Trayectoria vital y literal de Miguel Hernández

Trayectoria vital y literal de Miguel Hernández[pic 1]

Miguel Hernández Gilabert nació en Orihuela en el año 1910. Su padre era cabrero y él tuvo que dedicarse al mismo oficio. Su escolarización fue muy breve y su formación cultural y literaria se debió a su autodidactismo con ayuda de Luis Almarcha o Ramón Sijé, gracias a los cuales pudo conocer obras de escritores españoles.

En 1931 realiza su primer viaje a Madrid para intentar ganarse la vida como poeta, pero este primer contacto con el centro cultural le lleva a un cambio de ideas que se refleja en Perito en lunas, libro en el que habla de objetos de la vida cotidiana y de la naturaleza como entorno vital.

En 1934 estalla una insurrección revolucionaria de la clase obrera que afectó a Miguel Hernádezen un compromiso posterior con el pueblo y el mundo del trabajo. En 1935 el poeta plasma su pena amorosa en El Rayo que no cesa dedicado a tres mujeres en especial: Josefina Manresa, su amada; a su amor platónico y a la mujer con la que se inició en las relaciones sentimentales.

En 1937 se casa con Josefina Manresa y poco antes de finalizar el año nace su primer hijo. Al comienzo del año siguiente el poeta permanece con su familia y se incorpora al ejército de costa de Castellón. A finales de 1938 muere su hijo. En esta época escribe El hombre acecha, un conjunto de poemas que ensalzan el trabajo del campo y denuncia las injusticias sociales y las desigualdades del momento, como el trabajo infantil en “El niño yuntero”.

Cuando la guerra finaliza el poeta se dirige a Orihuela, pero en visto del peligro que corría intenta pasar a Portugal por Sevilla y Huelva. Logra pasar, pero es detenido por la policía e ingresa en la prisión de Torrijos ye en España. En este momento, el poeta pasa por una época de tristeza, dolor y agonía. Echa de menos a su hijo y a su mujer y así lo refleja en su libro Cancionero y romancero de ausencias, una recopilación de poemas que se acercan al estilo de una diario íntimo del poeta donde lo único que le mantiene vivo es el recuerdo de su hijo y de su amada esposa.

Finalmente, la madrugada del 28 de marzo, Miguel Hernández muere en la prisión alicantina a causa de una “fimia pulmonar”.

Poema a comentar

Un carnívoro cuchillo

Un carnívoro cuchilo

de ala dulce y homicida

sostiene un vuelo y un brillo

alrededor de mi vida.

Rayo de metal crispado

fulgentemente caído,

picotea mi costado

y  hace en él un triste nido.

Mi sien, florido balcón

de mis edades tempranas,

negra está, y mi corazón,

y mi corazón con canas.

Tal es la mala virtud

del rayo que me rodea,

que voy a mi juventud,

como la luna a la aldea.

Recojo con las pestañas

sal del alma y sal del ojo

y flores de telarañas

de mis tristezas recojo.

¿Adónde iré que no vaya

mi perdición a buscar?

Tu destino es de la playa

y mi vocación del mar.

Descansar de esta labor

de huracán, amor o infierno

no es posible, y el dolor

me hará a mi pesar eterno.

Pero al fin podré vencerte,

ave y rayo secular,

corazón, que de la muerte

nadie ha de hacerme dudar.

Sigue, pues, sigue, cuchillo,

volando, hiriendo. Algún día

se podrá el tiempo amarillo,

sobre mi fotografía.

Introducción

He decidido elegir este poema de Miguel Hernández porque es un poema el cual tiene un profundo sentimiento de dolor y que expresa su pena amorosa, de una manera muy literaria y llamativa.

Localización del poema

El poema “Un carnívoro cuchillo” se incluye dentro de El rayo que no cesa. Esta obra se incluye a su vez en una etapa amorosa-existencial del poeta donde plasma en esta obra su pena amorosa y la fatalidad de esta. En esta época el poeta cambia sus ideas: abandona su credo religioso para abrazar la defensa de los más débiles y de las mujeres. Esta obra se dirige sobre todo a tres mujeres: su mujer Josefina Manresa; su amor platónico, María cegarra; y una mujer que no le corresponde con la que mantuvo una relación erótica, Maruja Mallo.

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