El conocimiento en función de construir nuevas realidades

Jefferson Alvarez Alvarez

El conocimiento en función de construir nuevas realidades

El conocimiento es un rasgo esencial en el ser humano, ya que desde él puede apreciar un contexto determinado para la construcción de nuevos paradigmas. El hecho de crear nuevas realidades conlleva al uso de varios tipos de conocimientos, como lo son el científico y el tecnológico, pero cabe resaltar que estos están sujetos a la verdad, es decir, a su veracidad con respecto a varios aspectos de la realidad para que no se creen falsos fantasmas, y consecuentemente a la degradación del conocimiento en función de la realidad. Por ello, es necesario seguir una serie de pasos mediante la formulación de teorías, para confirmar la veracidad de los conocimientos, y por consiguiente llegar a posibles acercamientos de la verdad o finalmente a esta misma, pero esto sólo siendo posible con un conocimiento maduro y avanzado.

Tal como lo menciona Javier Aranguren Echevarría en su libro de Antropología Filosófica: “Y es que el hombre es una realidad tan rica que sólo se puede conocer a base de mirarla desde distintos ángulos, tratando de relacionar entre sí esa abundancia de rasgos diversos”, llegando a la idea de que la realidad es compleja de analizar, ya que a pesar de tener un sólo modelo de veracidad, es decir, una sola verdad, esta a su vez puede tener múltiples interpretaciones por varias personas convirtiéndolo en algo subjetivo.

También resaltando la frase: “El conocimiento de la verdad, en sus dos vertientes, constituye una gran tarea humana, sobre la que se funda el uso de la libertad”, lo cual explica, cómo logra resaltar en el descubrimiento de la verdad, el hecho de que sea una infructuosa labor, con el siempre presente peligro de crear paradigmas falsos, que en un futuro podría chocar con la verdad y así mismo causar su continua modificación.

Por consiguiente, para evitar caer en modelos mentales falsos se recurre a la elaboración de teorías, y así mismo, con esto recalcamos una definición mencionada en una investigación hecha por Colciencias: “Una teoría es un conjunto de proposiciones generales relacionadas entre sí lógicamente, que permiten explicar los fenómenos a los cuales ellas se refieren, con un determinado interés que puede ser: a) el interés de predecir y controlar los fenómenos explicados; b) el interés de ubicarse y orientarse gracias a la explicación de los fenómenos; y, c) el interés de liberarse de cualquier tipo de opresión causada por los fenómenos explicados”, lo cual conlleva a un conocimiento maduro para su concerniente elaboración, negando la afirmación en el susodicho texto de que los niños también pueden hacer teorías, ya que esto requiere la elaboración de un método científico, que a esa edad aún no se puede manejar adecuadamente.

En conclusión, el conocimiento es una característica trascendental en nuestro ser que nos permite la interpretación de la realidad en la que estamos inmersos, conduciéndonos al directo e inevitable contacto con ella. Con esto también nos referimos a la creación de nuevas realidades viéndolo desde el ámbito paradigmático, ya que el ser humano forma su propia visión del mundo y se guía en su camino concernientemente a lo que crea que es la verdad, lo cual integra y elabora su propio juicio en diferentes aspectos de su contexto. Esto es benéfico en el aspecto de un proceso en formación de paradigmas, que ya sean falsos o verdaderos, contribuyen al acercamiento de la veracidad de la realidad. Por lo tanto se hace uso de varias herramientas, como la elaboración de análisis y la formulación de teorías, que por medio del conocimiento científico y tecnológico, se sacan nuevas ideas que continuamente mejoran la percepción de la realidad y consecuentemente a un mayor control sobre ella. Por lo tanto el ser humano es un arquitecto de nuevas realidades.

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