Chresis Alma Y Sujeto

INTRODUCCION.

En el siguiente ensayo se tratara de dar a conocer los cuidados de uno mismo para poder llevar a cabo el cuidado hacia los demás sujetos.

Tomando en cuenta que Platón designa chrêsis como la pasión en cierto modo singular, transcendente del sujeto en relación a lo que lo rodea, a los objetos que los dispone y también a aquellos otros con los cuales tiene relación a su cuerpo, y en uno mismo.

Conocerse a sí mismo es acceder al entendimiento profundo de la naturaleza humana, de la vida y del universo interior que complementa la realidad externa que experimentamos con los sentidos. No por medio de teorías, sino a través de múltiples observaciones y tomas de conciencia.

Según Platón el cuidado de uno mismo no se puede alcanzar la verdad sin una cierta práctica o si un cierto conjunto de prácticas totalmente específicas que transformen el modo de ser del sujeto, que lo cualifiquen transfigurándolo.

Ocuparse de uno mismo significa ocuparse de su alma. El sujeto es aquel que sirve de medios para hacer cualquier cosa que sea. Cuando el cuerpo hace algo es que existe un elemento que sirve de él, y este elemento no puede ser más que el alma, y no el propio cuerpo. El sujeto de todas estas acciones corporales, instrumentales, de lenguaje, es el alma, el alma en tanto que sirve del leguaje de los instrumentos y del cuerpo. Es el alma que únicamente en tanto que sujeto de acción, en tanto que sirve de su cuerpo, de sus instrumentos, etc.

Platón, utiliza termino chrêsis para indica una actitud del sujeto respecto a sus medios que no es simplemente instrumental. Utiliza el termino chrestai para referirse a la pasión en cierto modo singular, transcendente del sujeto en relación a lo que lo rodea, a los objetos que los dispone, y también a aquellos otros con los cuales tienen relación a su cuerpo mismo, y en fin, a uno mismo. Platón utiliza chrêsis para referirse al uno mismo del que hay que ocuparse, no se refiere en absoluto al alma-substancia que ha descubierto sino a alma-sujeto.

El pensamiento platónico nos ofrece tres dimensiones del cuidado de uno mismo en tanto que sujeto de las propias acciones. Ante todo, la dimensión, esto es, relación entre el cuidado y el régimen general de la existencia del cuerpo y el alma.

Foucault ve otra dimensión del cuidado de si en la economía en tanto relación entre el cuidado de uno mismo y la actividad social. La tercera dimensión la haya en la perspectiva platónica de la erótica entendida como la relación entre el cuidado de uno mismo y la relación amorosa.

Desde la perspectiva genealógica de Foucault, el cuidado de si es entendido como el conjunto de prácticas mediante las cuales el individuo establece cierta relación con uno mismo y en esta relación el individuo se constituye en sujeto de sus propias acciones. Todo sujeto debe de ocuparse de sí mismos para que sus pensamientos y acciones, de acuerdo a lo que han vivido estén cargadas de valores morales, de los cuales se han ido adquiriendo de sus experiencias de vida y así puedan cuidar de los demás, porque si no hay conocimientos o experiencias previas no podemos llegar a conocerlos ni mucho menos a tener un cierto conocimiento de cuidado hacia los otros.

Foucault, en La ética del cuidado de sí como práctica de la libertad, dice que:

…El cuidado de sí es ético en sí mismo; pero implica relaciones complejas con los otros, en la medida que este ethos de la libertad es también una manera de cuidar de los otros; por esto es importante para un hombre libre que se conduce como se debe, saber gobernar a su mujer, a sus hijos a su casa. Ahí está el arte de gobernar. EL ethos implica también una relación hacia el cuidado de los otros, en la medida que el cuidado de sí

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