ETICA Y UNIVERSIDAD

ÉTICA Y UNIVERSIDAD, CUATRO VERSIONES DE LA ÉTICA Y LA MORAL, LAS TAREAS DE LA VIDA ÉTICA.

Los textos ofrecen una mirada a la ética desde varias perspectivas como son la diferenciación con la moral, su incorporación en la vida de los seres humanos y su papel en la universidad, lo que permite realizar una aproximación de su significado, su práctica y un ambiente favorable para su desarrollo.

Diferenciar la ética de la moral es un ejercicio que aun presenta confusión natural, debido a la gran cantidad de conceptos y significados emitidos por eruditos y estudiosos. Sin embargo y para el propósito que nos convoca, daré una interpretación de los conceptos emitidos en cada uno de los textos bajo el punto de vista humanístico.

La ética es una conducta humana que agrega una visión racional a los problemas morales. La ética, abarca y trasciende lo moral. (Polo Santillan, 2004)

La moral puede entenderse como la creencia que tiene cada individuo de lo que es bueno o malo para la familia, la sociedad y el estado. (Polo Santillán, 2004)

Para ser consecuente lo que pensamos sobre la ética y la realidad en que vivimos, es perentorio que el individuo no solo reconozca los conceptos, sino su aplicación en las tareas de la vida ética, lo que es motivado por tres contratos y su conexión como lo expone Michel Lacroix, de manera que evite la destrucción del individuo. Estos contratos con la naturaleza, con lo humano y de transformación personal, tienen como elemento nuclear, la ética. . (Polo Santillán, 2004)

El contrato con la naturaleza se refiere a la manera como debemos redefinir la economía y la tecnología para evitar la destrucción del medio ambiente y por lo tanto de la especie humana. El segundo contrato tiene que ver con lo social, donde la justicia juega un papel importante y a pesar de que esta sobrepasa los límites de la ética, debe prevalecer para mantener una sociedad cada vez más digna. El tercer contrato, transformación personal, invita a integrar tanto la naturaleza y la humanidad, de manera que la existencia misma del individuo desde lo interior contribuya a un mejor mundo exterior para una plena existencia, justa y gozosa. (Polo Santillán, 2004)

Por último, la ética encuentra en la universidad su espacio apropiado para crecer, donde el ejercicio del pensamiento contribuya a la verdad. Una verdad que se convierta en vida y libertad y este es el reto para construir la justicia que deseamos. Ahora bien, la universidad también es llamada a contribuir al verdadero servicio social, donde se motive la equidad y esto es una obligatoriedad ética de las instituciones con la misma sociedad. El texto motiva a estudiantes y docentes a participar con su actuación a la verdad, a la justicia y a la dignidad de las personas como uno de los principios fundamentales de la ética:

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