El Demonio

El demonio, puede tener varias interpretaciones, la que yo veo mas adecuada es, que todos los hombres tenemos un demonio adentro que no paramos de buscar, hasta encontrarlo.. Una parte de maldad, de furia, de travesia. Un demonio que rechaza las lagrimas, siendo fuerte al momento de torturar a su victima. Todos tenemos una tendencia o inclinacion a hacer el mal, inconcientemente, o no. Adentro nuestro tenemos un demonio propio que nos persigue que quiere constantemente salir, nos atormenta y vivimos luchando contra el, queriendo seguir por el camino correcto, sin salirse de la linea, pero no siempre es asi, en algun momento todo colapsa y se encuentra fuera de control.En mi interior vive un extraño ser, un ente diabólico que surge cuando mi delicado ego se ve amenazado. Al brotar transforma mi manera de actuar, me convierte en un ser demente que se comporta sin razonamiento alguno. Muchas veces lo consigo controlar, pero en otras ocasiones me desborda e inteviene sin contemplaciones.

Lo que pasa afuera es reflejo de lo que pasa adentro. Lo mismo cuando estás solo…Uno está solo pero antes, por ahí vos te aislaste en el interior.Nunca el problema está afuera, está adentro, nosotros somos el problema.Los conflictos que tenemos en nuestra vida, son reflejo de nuestros propios demonios interiores. Si estás derrotado en tu interior no encontrarás más que derrotas en tu vida… vas a mirar solo el lado negativo, todo lo malo, y no rescatar nada positivo.Para encontrar algo afuera primero hay que encontrarlo adentro. A veces uno busca afuera lo que tiene adentro sin darse cuenta que las dos cosas son la cara de la misma moneda. No todo es lo que parece ni todo lo que brilla es oro, dice la famosa frase, "Mucho brillo hay acá y muy poco oro". Algunos se terminan creyendo las apariencias y así viven. Pero vivir de verdad es otra cosa, amar de verdad es otra cosa. Hay que saber mirar muy bien para ver de verdad a la gente, para ver su esencia, y no su apariencia. A veces el que parece un santo es un demonio, y el que parece un demonio es un santo.

Lo esencial es invisible a los ojos, pero igual se ve. Hay que abrir los ojos para ver que la verdad no siempre es la apariencia.Todos tenemos demonios que enfrentar, una guerra en el interior de sus almas...dos aspectos de si mismo lucharan es su interior dicen que un aspecto es el malo y otro el bueno,que hay un angel y un demonio en nuestro interior. Por eso hay que sacarse el trapo de los ojos y contemplar toda la belleza del mundo y no la oscuridad.

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