ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

El cinico


Enviado por   •  29 de Abril de 2019  •  Documentos de Investigación  •  3.002 Palabras (13 Páginas)  •  155 Visitas

Página 1 de 13

DERECHO ROMANO

EL CÍNICO

Axel Espinosa León

Licenciatura en Derecho

Profesora:

María Eugenia García Contreras

 Universidad de Quintana Roo

Turno: Matutino

Introducción

El análisis de la vida cínica es algo que a lo largo del tiempo ha sido motivo de estudio, y esta investigación no es la excepción, pues es el cuerpo de este trabajo, así como de muchos otros que han sido muy bien reconocidos. La escuela cínica data de Grecia en el siglo IV a.C., por supuesto, su máximo representante es el “perro” Diógenes, quien reinterpretó la filosofía que el mismo Sócrates predicaba sobre la felicidad y la verdad, haciendo así una postura totalmente nueva acerca de la felicidad del hombre y de dónde provenía esta. Mientras que Sócrates hablaba de una forma de pensar un poco más limpia, con fines beneficiosos para combatir la ignorancia de la ciudad, como el hablar franco, cuestionar las acciones políticas que se llevaban acabo en Grecia, impartir su conocimiento por puro amor al arte y otras tantas más, Diógenes vivía exiliado de la sociedad, se sabe que se despojo de todos sus bienes materiales ya que de esta forma se desharía de toda preocupación, andaba por las calles, desnudo, sin el más mínimo apuro, comiendo todo tipo de sobras y con un sarcasmo característico de un personaje de TV, se regía por una filosofía propia de vivir por el placer mismo, ya que según él, era la única forma de alcanzar la felicidad. En el libro El coraje de la verdad, por Michael Foucault, se nos habla esencialmente de los personajes antes mencionados, introduciéndolos bajo una forma de pensar de las cuales ellos eran los exponentes más grandes, Sócrates con la Parrhesía y Diógenes con el Cinismo. En la siguiente investigación trato de explicar de la forma más cercana posible qué características tiene una persona cínica, qué hace, cómo vive, cómo actúa, etc . Esta forma de pensar es la misma que nos aleja de la ciudad perfecta que nos predicaba Sócrates, pues fomenta en nosotros las ideas más instintivas y quizá hasta egoístas con las que un ser humano podría socializar, o podría hacernos generar una forma de pensamiento que probablemente sea nueva y que, en vez de perjudicar, genere un bien a la sociedad, todo depende del enfoque personal con el que se pretenda utilizar. Este análisis me ha hecho reflexionar sobre la forma de pensar que uno puede generarse sobre la política y la sociedad misma, pues con los eventos actuales todos nosotros podemos generarnos formas de pensar diferentes, pero ¿Qué hubiera pasado si estos pensadores hubieran vivido en nuestra época

Objetivo General

-Hacer un análisis exhaustivo de las características que tiene una persona que se rige por el pensamiento Cínico y cómo dice la verdad de sí mismo.

Objetivo Particular

Hacer una investigación sobre las características esenciales que tiene una persona cínica elegida de forma personal.

Marco Teórico

“El curso titulado El coraje de la verdad es el último que Michel Foucault habría de dictar en el Collège de France, entre febrero y marzo de 1984. Foucault murió poco tiempo después, el 25 de junio. Ese contexto invita a escuchar en estas clases un testamento filosófico, tanto más cuanto que el tema de la muerte está muy presente en ellas, sobre todo a través de una relectura de las últimas palabras de Sócrates: «Critón, debemos un gallo a Esculapio», que Foucault, con Georges Dumézil, comprende como la expresión de una profunda gratitud a la filosofía, que cura de la única enfermedad grave: la de las opiniones falsas y los prejuicios.  Este curso prosigue y radicaliza análisis llevados a cabo el año anterior. Se trataba entonces de examinar la función de la parrhesía –el «decir veraz»– en política, a fin de establecer, para la democracia, una serie de condiciones éticas irreductibles a las reglas formales del consenso: coraje y convicción. Foucault propone para ello un estudio desenfadado del cinismo antiguo como filosofía práctica, atletismo de la verdad, provocación pública, soberanía ascética. Al volver la mirada hacia la escuela cínica, Foucault apuesta por el escándalo de la verdadera vida, la vida desplazada, la vida «otra», la provocativa. Propone, por vez primera, una genealogía del artista maldito, del activista revolucionario, del héroe filosófico.” (Akal, 2014)[1]

«No hay instauración de la verdad sin una postulación esencial de la alteridad; la verdad nunca es lo mismo; sólo puede haber verdad en la forma del otro mundo y la vida otra.»

                                                          Michael Foucault

Del concepto Foucaultiano

La primera vez que Foucault hizo pública una alusión al cinismo como “postura” filosófica[2] fue en una conferencia proferida en Tokio en 1978 titulada «La filosofía analítica de la política[3], seis años antes del seminario El coraje de la verdad[4]curso que estamos analizando y en el que realiza su análisis más profundo y minucioso en torno a la filosofía cínica. Si bien es cierto que, en La voluntad de saber, Foucault usa el término “cinismo” varias veces y el vocablo “cínico” una vez”, no lo hace en este caso, sin embargo, para referir al movimiento filosófico del período helenístico, y tampoco a sus herederos religiosos, políticos o artísticos, sino que lo usa en su sentido más habitual y natural para dar cuenta de una cierta actitud descarada del poder. En «La filosofía analítica de la política», Foucault, después de decir que su primera intención era hacer un análisis en torno a la institución penitenciaria, explica que prefirió concentrar su conferencia en una temática más general, el asunto del poder, o, más exactamente, del lugar de la filosofía respecto al poder. Además de la interesante alusión al cinismo que se hace en este texto, podemos notar aquí cómo ya en 1978 Foucault usa ejemplos del pensamiento clásico que luego serán frecuentes en sus cursos de los años 80. En efecto, cuando el filósofo francés explica que una de las funciones más antiguas de la filosofía occidental fue poner un límite al exceso de poder, sobre todo cuando éste constituye una amenaza, los ejemplos que nos brinda pertenecen a la Antigüedad, cosa que facilita su comprensión. Sin embargo, el cinismo es entendido aquí en la forma general de anti potencia, pero las particularidades de su oposición al poder resultan especialmente interesantes. La filosofía no se limita a poner trabas, sino que legisla y modera, cumple un papel activo dentro del mismo escenario político- institucional; su espacio es el marco legal. El cinismo se mantendrá ajeno a las dinámicas donde el poder es reconocido como tal, se mostrará independiente respecto al juego, lo banalizará y lo tomará como objeto de chanza humorística.

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (18.1 Kb)   pdf (162 Kb)   docx (16.7 Kb)  
Leer 12 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com