Elogio De La Dificultad

ELOGIO DE LA DIFICULTAD

Somos seres humanos y como iguales estamos acostumbrados a vivir entre cadenas, la mayoría a un sometimiento constante de las cosas y de los hechos, a un facilismo constante tratando de buscar un rumbo fijo, somos capaces de cambiar de mentalidad constantemente logrando vencer de alguna manera estas barreras impuestas, evitando que se sigan cometiendo injusticias y discriminaciones, la lucha es diaria y no es fácil tratar de borrar algo que viene con nosotros, nuestras raíces, un pasado que no se olvida, nuestro código genético el estar acostumbrados a los yugos, a las cadenas, comprendiendo que nada es fácil en la vida y nuestra mayor gloria es el la lucha propia y diaria para poder llegar a la libertad.

Soñamos con tener felicidad, a pesar de las circunstancias (pobreza, enfermedad, entre otros), pero todo esto lo esperamos sin tener que esforzarnos, sin necesidad de superar barreras, esperando que el sueño anhelado llegue de la nada, se intenta conseguir lo inalcanzable, vivimos todo el tiempo sintiendo una seguridad sobre todo lo que se pretende alcanzar, pero cuando esto no se da, la depresión es la que primero llega, el aburrimiento y la desolación, no son fáciles de olvidar. Pero realmente el problema de nosotros los seres humanos es no saber desear deseamos todo fácil, sin complicaciones, no deseamos algo que nos permita cambiar nuestras vidas que nos genere ese mecanismo de lucha que tenemos guardado.

Podemos “afirmar que es posible imaginar un mundo pleno y lleno de felicidad, pero la realidad es un hastió constante y lleno de incertidumbres; así el autor quiere demostrar que logramos volar con nuestros anhelos y sentimientos a lugares sorprendentes e inalcanzables de las dificultades, esto solo demuestra que llevamos a nuestra vida a un sometimiento facilista, sin retos constantes, sin conocer la indiferencia de la pérdida relativa, sin ser un prócer que lucho hasta el último momento por la libertad de su pueblo, de este modo indico que como primer argumento es indispensable mostrar que la vida plena y sin preocupaciones es un sometimiento a un periodo vacio y de simpleza, la realidad de la vida se fundamenta en la complejidad de vivirla a satisfacción con un devenir constante de ires y venires”.1 pero esta “felicidad del hombre no se debe interpretar como todo lo fácil o de primera mano; la búsqueda de la felicidad es un camino que hay que buscar, seguir y alcanzar. La felicidad es el resultado al trabajo arduo, responsable, amoroso y constante que nosotros le colocamos a diario a nuestro proyecto de vida”.

Aunque no solamente debemos tener interés en lo material, quizás lo más importante es el progreso espiritual. Esto debido a que la verdadera felicidad se encuentra en el interior de cada uno de nosotros, eso cuando sentimos que tenemos la capacidad espiritual suficiente de luchar por nuestros ideales, de asumir con responsabilidad nuestros retos. Cuando logramos esto nos sentimos verdaderamente felices y orgullosos de nuestro sacrificio y de nuestra meta cumplida.3

Vemos en el sentir un placer constante, es algo absurdo e irreal, sin ser capaz de manejar un altruismo completo, nos convierte en seres superfluos, acaso necesitamos problemas en nuestra vida, hasta que punto podemos manejar una realidad provista de ideales y una verdad pura y concreta, sin entrar inevitablemente en una concepción paranoide, la verdad es única e inmutable en el universo, y como se enuncia en el escrito, quien no sepa manejarla incurre en un absolutismo vacío y sin interpretación2

No es lo mismo luchar por lo que se quiere que vivir con la conciencia intranquila porque otro me ha dado en la mano lo que yo he debido luchar, es fácil juzgar pero no ser juzgado, todos vivimos pensando en la realidad y otros no piensan en eso sino que simplemente viven cegados de las cosas; seres que solo pensamos

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