ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Filosofia


Enviado por   •  18 de Mayo de 2014  •  4.052 Palabras (17 Páginas)  •  158 Visitas

Página 1 de 17

Cuento basado en:

LAS COEFORAS - Esquilo

PERSONAJES

Orestes

Pilades

Coro de esclavas

Electra

La nodriza de Orestes

Clitemnestra

Egisto

Un esclavo

Planteamiento:

Esta es la historia de una familia en la que se vio afectado el amor, el respeto, la honestidad por la inoportuna traición, y a fan de esto algunos miembros de la familia fueron en busca de justicia para terminar con el odio acumulado por la desgracia.

Hace mucho tiempo cuando Helena fue raptada por el príncipe troyano Paris, se desato la guerra de Troya en la que Agamenón se convirtió en el comandante en jefe del ejército griego. Una vez ganada la batalla contra el ejercito troyano, mientras impartía viaje con sus tropas, se encontró desorientado por lo que pidió ayuda a la diosa Artemisa, le dijo – Por favor Artemisa se que os he faltado el respeto, pero necesito de vuestra ayuda para dirigir mis tropas de regreso a casa. La diosa se negó a ayudarle – Acaso te burlas de mi Agamenón, después de tus tiranías, vos crees que os brindare mi ayuda, ¡Brindad una ofrenda ante mí para intentar hacer una excepción a vuestra egoísta persona! Al decir esto, Agamenón ofreció a su hija Ifigenia en sacrificio a la diosa. -¡Mirad gran diosa Artemisa, ofrezco en sacrificio puro a mi hija, ganándome así vuestra ayuda! La diosa tomo el sacrificio de Ifigenia y Armagedón siguió con su viaje.

Pasados los días Agamenón logro regresar a las tierras de Argólida,- ¡Querida he regresado!- exclamo, pero tal fue su sorpresa al ver que su esposa Clitemnestra al no poder soportar la idea de que ofreció a su hija como sacrificio, no le otorgo el perdón y le mostro su indiferencia, - Veo que has vuelto con la victoria entre tus ropajes, la sangre derramada han teñido de victoria la blancura con la sangre de los troyanos, pero habéis regresado sin vuestra propia sangre, sin Ifigenia!- dijo mientras miraba fríamente a su esposo, y se dirigió a otra habitación, pues no quería verle ni estar con él.

Nudo:

Un día Egisto invitó a Agamenón a un banquete en su gran palacio, por lo que un mensajero a saltos de liebre llevo el mensaje. -¡Querida, hemos sido invitados a un banquete por Egisto! Dijo Agamenón algo emocionado, -¡Hablas tu enserio, entonces vallamos!- exclamo Clitemnestra. Al llegar, como castigo por haber dado a su hija en sacrificio, Clitemnestra vivía un romance con Egisto, y no dudaron en matarle trozando su cuerpo con un hacha.

El cadáver fallecido es sepultado y seis años después de su muerte, su hijo Orestes de18 años de edad, tiene ahora derecho de reclamar su reino, al haber sido enviado a Fócida durante el romance que vivió su madre. Orestes fue criado con Pilades, a quien consideraba como un hermano. Al enterarse de la muerte de su padre comienza desatarse la tormenta de problemas pues ambos hermanos Electra y Orestes sienten un dolor tras la pérdida de su padre, están indignados por la forma en que murió siendo rey y habiendo obtenido victorias, y al ser despojados de sus bienes, de su reino buscan vengar su muerte, peo mas deseo se vuelve de Orestes que de Electra, así que este emprendió viaje hacia Argos, pero antes visita el santuario de Delfos, en donde Apolo le dice - ¡Tu, quien llevas de la sangre Agamenón corres por vuestro cuerpo ordeno que vengues la muerte de vuestro padre, y se derrame sangre en nombre de la justicia!,- ¡Vengare la muerte injusta de mi padre y hare honrar su sangre derramada, el fue un héroe y debe ser venerado como tal!- Dijo con coraje Orestes al escuchar la orden de Apolo.

Llegando a Argos, temprano por la madrugada acompañada de su fiel amigo Pilades, se detienen ante la tumba de Agamenón. Orestes consagra en ella, en ofrenda a su padre, un mechón de sus cabellos; y exclama -¡Sobre lo alto de esta tumba invoco a mi padre: óyeme, escúchame...He ofrecido un rizo de mis cabellos a Ínaco que me alimentó; y otro en señal de duelo...!. Al decir estas palabras, escucha unos pasos que se aproximan, entre susurros de dolor y géminos per turbantes,-¿Qué cosa veo? ¿Qué cortejo de mujeres con negros velos es ese que avanza?, ¿Llevan a mi padre las libaciones que apaciguan a los muertos? Si, no puede ser otra cosa, además, vienen acompañadas por mi hermana Electra quien recae en llanto amargo, ¡Vamos Pilades, alejémonos para presenciar lo que pasa!- dice mientras se ocultan lentamente. Grande es su sorpresa al saber que se trataba nada más ni nada menos que del Coro, formado por unas portadoras de libaciones, las esclavas de Clitemnestra, acompañas por la hermana de este.

Electra comienza entonces a verter unos líquidos en la tumba de su padre, mientras se cuestiona,-¿Qué voy a decir al derramar estas libaciones en honor del muerto?… Al verter esta agua lustral en honor de los muertos, dirijo a mi padre esta llamada: ‘ten piedad de mí y de tu hijo Orestes; ¡Has que seamos amos de nuestra casa! Ahora somos simples vagabundos, vendidos por la misma que nos parió; en cambio, ella ha tomado, en tu lugar, un amante, Egisto, su cómplice en tu asesinato. A mí se me trata como a una esclava. Orestes, desposeído de sus bienes, está desterrado… ¡Que un golpe de suerte nos traiga aquí a Orestes! Escucha, padre mío, mi súplica… ¡Que surja, por fin, un vengador tuyo, padre, y que los que te mataron mueran a su vez: esto será justo!…-. Su acompañante Corifeo comienza a charlar con ella cuando de repente, a punto de retirarse, ven un cabello semejante al de Electra y a su vez observan en el suelo marcados dos pares de huellas de los cuales uno es semejante a sus pies, y llega así a la conclusión de que son de su hermano- ¡No puede ser posible, este cabello y estas huellas, no pueden ser del enemigo, si no, de mi hermano, habrá venido hasta este lugar como aventurero y vengador, tanto es el anhelo que tengo de verle!- confesó a su acompañante mientras su hermano y Pilades salen de su escondite y se dejan ver. Ambos comienzan a hablar sobre la memoria de su padre, y buscan hacer Justicia, cuando de repente Corifeo aclara el horrible sueño de Clitemnestra, que ha obligado a Electra a llevar libaciones a la tumba de Agamenón. El joven Orestes interpreta el sueño como un destino de la muerte violenta de su propia madre y crea un plan para perpetrarla -Como si yo fuera un extranjero, llevando el atuendo completo de uno, llegaré hasta la

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (23.2 Kb)  
Leer 16 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com