La Eneida

Periodo histórico

La batalla de Actium (31 A.c.) puso fin a la serie de guerras civiles sufridas en suelo italiano durante tanto tiempo. Dejando así, debilitadas las tradiciones religiosas de toda la nación. Durante el gobierno de Augusto, el estado de las cosas cambian. Se intenta de varias maneras resucitar las costumbres antiguas y devolver su pasado brillo a la religión romana. El nuevo emperador encomienda al poeta Virgilio, la realización de una obra para el orgullo de la nación. Es así como surge la Eneida, monumento a la gloria de Roma y a las antiguas tradiciones del Lacio.

En esta época nacen las lecturas poéticas y los ejercicios oratorios.

Publio Virgilio Marón (70 A.c. - 19 A.c.), fue un poeta formado en las escuelas de Mantua, Cremona, Milán, Roma y Nápoles. Estudio filosofía, matemática y retórica. Siempre se mantuvo en contacto con los círculos culturales mas notables. Esto lo llevo a ser reconocido por el emperador Augusto, quien le encomendó la creación de una obra. Surgiendo así, la Eneida. Fue la mayor creación de su vida, se dice que pensó en quemarla, tal vez para que no pudiera ser conocida más allá de los años o simplemente era demasiado buena para aquel mundo. Lo que si sabemos es que no lo hizo, y hoy podemos disfrutar de su grandeza.

Story line

Virgilio se dispone a cantar las peregrinaciones y combates de Eneas, quien habiendo escapado a las ruinas de Troya, se dirige a Italia con el fin de inaugurar el periodo romano. La diosa Juno, en su afán, contrario a los destinos, de reservar para Cartago el imperio del mundo, persigue con odio a los troyanos.

Un héroe en la sociedad

Las sociedades buscan en un Héroe modelos de conductas virtuosos, necesitando de los mismos en épocas de agitación social y falta de confianza nacional. Una persona se convierte en héroe cuando realiza una hazaña extraordinaria y digna de elogio. Este satisface las definiciones de lo que se considera bueno y noble en su cultura de origen.

Con certeza podemos decir que Eneas es un verdadero héroe, ya que conduce a través de los mares y travesías infinitas a los sobrevivientes de Troya hasta llegar a “la tierra prometida”, donde fundaría Roma.

Ideal guerrero

La historia eneidica, se basa principalmente en el personaje de Eneas, quien debe llegar a las costas de Italia con el objetivo de fundar Roma. A lo largo de sus travesías, se demuestran sus capacidades de relacionarse con los suyos, de comandar en batalla y enfrentarse valientemente a sus enemigos. En todo momento mantiene relaciones con los dioses, tanto buenas como malas que le permiten llevar a cabo su cometido. En estas intervenciones divinas se ven los pensamientos religiosos de la época: la capacidad de los dioses de definir el destino de las personas. También se nota la capacidad divina de aconsejar a los mortales, es el ejemplo de la diosa Venus, madre de Eneas, quien lo acompaña a lo largo de su viaje apareciendo solamente

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