La importancia del pensamiento presocratico

Pedro Cruz Arellano

Importancia del pensamiento presocrático

La filosofía presocrática se remonta a la antigüedad, a la Grecia antigua, donde comenzaron las primeras discusiones sobre el mundo y la existencia del hombre, es esta filosofía es el fundamento y punto de partida para todo el pensamiento posterior. Por lo tanto, la importancia de los presocráticos es incalculable, los presocráticos fueron los primeros pensadores de la historia occidental, sus teorías se basan en la búsqueda de la verdad con un enfoque racional, donde el conocimiento es el resultado de la experiencia y el razonamiento. Por ejemplo, Tales de Mileto postuló que el principio de la naturaleza era el agua, mientras que Heráclito afirmaba que el principio del mundo era el fuego “el fuego es, en efecto, el elemento primero y el principio de todas las demás sustancias. Él es quien en el transcurso de sus metamorfosis corre a través del agua, la tierra y el aire. Está presente en el ciclo de la materia, de la que reviste todas las formas”.

Los Presocráticos desarrollaron una forma de pensamiento crítico, abriendo la puerta a una comprensión de la realidad más profunda. Sabiendo que la filosofía busca, con la ayuda de un nuevo procedimiento para comprender el motivo (logos), encontrar el motivo y algunas causas de los mismos fenómenos que los mitos dieron como elaborados por los seres divinos y heroicos de tiempos lejanos. El hecho mismo de cuestionar el planeta mítico sugiere una lucha con la tradición. La filosofía se presenta así desde el principio como una tarea crítica. Los primeros filósofos griegos dejaron de lado los mitos que la mayoría de la población seguía creyendo y comenzaron investigaciones racionales. El tema de esta investigación seguía siendo el mismo que hasta entonces había intentado describir los mitos: los principios y la naturaleza del mundo. Intentaron encontrar el principio último y eterno (arché) del mundo, es decir, aquel del que todo nace y del que todo se forma. Sin embargo, no la buscaron en las realidades antropomórficas (los dioses), sino en lo que llamaron naturaleza (physis). Los filósofos presocráticos estudiaron la naturaleza de las cosas: eran "físicos"; y con ellos comenzó en paralelo las crónicas de la filosofía y de la ciencia (que en origen eran lo mismo). Los pensadores presocráticos a menudo mencionan e interpretan esta revolución cultural como una transición del mito al logos. Ellos defendieron diversas teorías filosóficas, pero dentro de ellas encontramos secuencias de recursos habituales, sustituyeron los logos por los mitos, sustituyeron las narraciones míticas (las hazañas de los dioses) por explicaciones de tipo racional. El componente central de su pensamiento es la noción física. Intentan describir la physis (naturaleza) de lo que la constituye y de donde nació (el arché o principio constitutivo de cada cosa). Comparte la iniciativa del hilozoísmo, según el cual la sustancia corpórea fundamental incluye las fuerzas que la hacen moverse y vivir. También consideran al planeta como una sola entidad, todo lo cual aparece dual y cambiante ante los sentidos como una realidad exclusiva y ordenada (cosmos) y los seres humanos son entendidos como factores mucho más que la naturaleza (microcosmos) y no como el centro. Para los presocráticos, los mismos principios que defienden la constitución de todo el mundo físico también defienden a los seres humanos.
En este sentido, el concepto de filosofía presocrática se utiliza como una categorización cronológica de los pensadores siguiendo las tendencias de los filósofos de los siglos VI y V a. C., anteriores a la posterior reestructuración del pensamiento filosófico por parte de Sócrates. Nació de la crítica y la curiosidad de un grupo de personas que tienen interés en comprender mejor la naturaleza y sus fenómenos, así como los principios materiales que no fueron hechos por los humanos, pero no desde la mitología sino desde el razonamiento reflexivo y racional, nació como una especulación independiente y no se basa en la secuencia de los textos sagrados, por lo que se reconoce como una fase de la cosmología. El razonamiento presocrático plantea el problema de la disolución o continuidad respecto del pensamiento anterior y respecto de la influencia del pensamiento oriental. Sobre la tesis del olvido del supuesto milagro griego, los escritores contemporáneos destacan tanto las raíces míticas del primer pensamiento presocrático (especialmente el predominio de la cosmogonía mítica de Homero y Hesíodo), como la aceptación intelectual de ciertos desarrollos (especialmente la astronomía y las matemáticas) del pensamiento oriental (básicamente caldeos, babilonios, persas y egipcios). Sin embargo, mientras se ejerció esta influencia, también predominó el pensamiento altamente innovador y crítico de los primeros filósofos. Entre los milesios (Tales, Anaximandro y Anaxímenes) se desarrollaría una cosmología y cosmogonía sin alusión a dioses o entidades sobrenaturales, explicada en cambio a partir de los conceptos de physis (naturaleza), arkhé (principios rectores) y mundo (orden). No hablamos de concepciones míticas que aspiran a describir inicios e historias interesantes, sino que hablamos de teorías verdaderas. Es así como se pasó de la creencia de los mitos, por la creación de la lógica y la búsqueda de la verdad del cosmos hasta la reflexión de que es el ser y el mundo que lo rodea.
Desde diversas posiciones filosóficas, la historia de la filosofía ha tendido a concretarse en términos de tiempos y acontecimientos, dando la impresión de que los presocráticos iniciaron su camino con una comprensión similar a la de nuestros días. Sin embargo, podemos concluir que estos pensadores de todo el mundo antiguo sentaron las bases de una forma de pensar completamente nueva y, como iniciadores de un nuevo paradigma del pensamiento humano, son fundamentales para la historia de la comprensión del mundo.

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