Las Intermitencias De La Muerte

Todo comienza un fin de año día 31 de diciembre nunca de los nunca

una noticia de tal magnitud sería el comienzo de una total crisis, pues en 24 hrs. no se había consumado una sola muerte en todo el país, hombres que en accidentes sangrientos sin tener remedio los mismos doctores ya no podían hacer nada en sus cuerpos mutilados otros con traumatismos pobres diablos ya no tienen remedio comenta uno de los doctores , sonaba las ultimas campanadas para entrar el año nuevo cuando en la jerarquía la reina madre se encontraba en su lecho de muerte pero quien iba a pensar que cuando se dio la última campanada ella solo se queda una expresión la cual los que estaban con ella no lo podían creer no paso mucho tiempo cundo los medio de comunicación se dieron cuenta de lo que sucedía comenzando a buscar la respuesta.

Una reportera buscando la noticia se le acerca un joven comunicándole que a él le había pasado algo similar a lo que le paso a la reina madre, diciéndole que su abuelo se había arrepentido de morir, la reportera al escuchar lo que le dijo aquel joven se queda sorprendida y le dice que lo acompañe hasta llegar a la radiodifusora, donde él comenta lo sucedido, el director muy molesto con la reportera, se refería el significado del moribundo en sentido literal, se arrepintió del paso que estaba a punto de dar, o sea morir, finar , estirar la pata mientras que el joven lo que anunció efectivamente, como si se hubiera arrepentido era radicalmente diferentes de un pretorio, la periodista envuelta de vergüenza solo se queda callada, mas tarde el primer ministro da una rueda de prensa para anunciar lo sucedido que en las 24 horas del día 1 de enero no se ha consumado ningún acontecimiento de muerte al comienzo la gente no le tomaba importancia incluso el primer ministro dio la noticia con muy poca preocupación diciendo que no había de que preocuparse todo estaba bajo control, al poco tiempo ya cuando salía de su despacho el primer ministro, suena su teléfono llamándolo el cardenal haciéndole entender que la narración de la noticia entes dada era realmente una blasfemia pues como no ha de haber por qué preocuparse pues sin muerte no habría resurrección.

Comenzando así la crisis eclesiástica, el cardenal se refería a que la muerte si en realidad se fuese es una idea realmente sacrílega pues al no haber muerte no existiría Dios pues tendríamos que llegar a la muerte para así encontrarnos con el dador de vida, al despedirse del ministro solo le pidió que le hiciera saber al rey de lo conversado. Un día todos muy contentos disfrutando de la inmortalidad saliendo a la calle sin que nada los asustara pues al fin al cabo ya no había muerte. Una señora viuda solo lloraba la muerte de su esposo y el pensar que nunca más volvería a estar con él pues la ella pensaba que al morir ella se reunirían en el más allá, para esto coloca una bandera

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