Pláticas de Arquitectura 1993. - Juan O´Gorman

Pláticas sobre arquitectura, México 1993

Nota preliminar:

La Sociedad de Arquitectos Mexicanos nos establece una problemática, que la arquitectura y su “corriente” está en crisis después de la guerra, no se haya el modo de arquitectura o sólo no se establece un tipo como la arquitectura indicada, por o cuál conglomera a varios arquitectos para poder analizar sus puntos de vista y hacerles ciertas preguntas: ¿La funcionalidad la etapa definitiva en el desarrollo de la arquitectura o sólo un principio bio- embrionario de un devenir arquitectónico? ¿Se puede ser bello partiendo de la funcionalidad o este principio va aparte?

Legarreta: “Ojalá mueran todos”

Juan O ‘Gorman

Nos establece una comparativa entre la arquitectura que satisface necesidades espirituales y la arquitectura que satisface necesidades esenciales.

Como lo dice a lo largo de todo el párrafo, las necesidades espirituales son meramente subjetivas y se ven influenciadas de infinidad de cosas, principalmente por la educación y entorno del humano, pero además intervienen factores externos.; mientras, las necesidades esenciales son precisas y exactas, las mismas para todos.

¿Se puede hacer arquitectura esencial que satisfaga las necesidades espirituales? No, según O ‘Gorman pues, al satisfacer las necesidades espirituales se deconstruye el principio básico de la funcionalidad, dejando de ser universal y por lo tanto, esencial.

¿Es la función del arquitecto diseñar e imponer la forma de vida impregnando sus sentimientos en la solución del proyecto? En principio, pareciera que sí, pero atribuyen varios factores: caprichos, ego, jerarquías, VANIDAD. Se busca sobresalir en cuanto a los demás, tener algo que el otro no tenga] “por necesidad” pero es mero capricho.

Se ve claramente en la arquitectura destinada al anuncio: Bancos, casinos y demás. O ‘Gorman nos establece el ejemplo perfecto con un anuncio de jabón, el cuál exclama ser el mejor (sin tener esto fundamentado) pero los consumidores al ver una imagen bella, llamativa, lo asocian con calidad, lo cual es meramente ENGAÑO y por lo que mucha arquitectura no funcional se va inclinada.

Precisamente se rige por esto la frase “el arte por el arte” lo cual lleva a una confusión con tener conocimiento y cultura, un malentendido.

La arquitectura espiritual ve su auge cuando se empieza a comparar la arquitectura divina(hermosa) con la arquitectura humana(fea), olvidando que la arquitectura no tiene que ser bella, sino funcional pues surgió como necesidad de resguardarse de la naturaleza. Esto sigue siendo igual sólo que la naturaleza está regida y acondicionada por la forma de vivir del ser humano.

La arquitectura moderna y la arqueología(“contrarias”) van de la mano, estableciendo dos puntos para el diseño arquitectónico: 1.- interesarse por as formas, juegos de luces y sombras o 2.- “Copiar la arqueología”, una arquitectura meramente funcional

La discordancia estética se ha visto desde siempre y se vuelve razonable si “a mí me gusta”. Un ejemplo que establece es cómo los conquistadores derrumbaron toda arquitectura prehispánica para construir la suya, pues era funcional para ellos y más bella.

¿Es la estética medio y finalidad de la obra en vez de su consecuencia? O Gorman lo niega, -aquí-

“la arquitectura que resuelve las necesidades materiales, palpables, que no se confunden, que existen pudiéndose comprobar su existencia y que al mismo tiempo son fundamentales y generales de los hombres es la verdadera y única arquitectura”

Conclusion:

Al contrario que de la mayoría de pensamientos radicales de este texto, yo sí considero la funcionalidad la etapa definitiva de la arquitectura, pero, con el pasar de los tiempos hemos visto que la funcionalidad para uno no es la misma para otro (quitando aspectos estéticos), lo cuál nos habla de una diferencia de diseño y no una sola forma de arquitectura.

El ámbito estético va de la mano pues, la arquitectura es un arte, no es lo más primordial, ni la base (y eso se sostiene aquí) pero en nuestra sociedad quizá sí sea el fin de esta pues la VANIDAD como le llaman, es algo que gobierna en cada uno de nosotros, satisface nuestros caprichos y necesidades espirituales.

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