Antecedentes Historicos

ANTECEDENTES HISTORICOS

Una de las etapas de evolución del derecho penal, es la venganza privada “La ley del Talión”, en la que la manera de hacer justicia era actuar por su propia mano dando al agresor un daño igual o superior al que había sufrido.

Algunos sabiondos del derecho opinan que el homicidio fue uno de los primeros crimines de la humanidad caracterizado por ser severamente castigado al lesionar la vida.

En otras sociedades como la Romana, esta figura típica se considero una infracción no solo publica sino religiosa, y su sanción se tradujo en los periódicos de Justiniano y Constantino en la pena de muerte al sacrílego denominándolo questores parricidi. En la edad media el derecho canónico distinguió entre el homicidio culposo y el doloso dándole penas que iban desde las pecuniarias hasta la muerte. Por lo que hace nuestro sistema jurídico, durante la época prehispánica se prohibió la justicia por propia mano, sancionándose el delito de homicidio con la muerte ejecutada por los hombres facultada por el emperador.

El primer ordenamiento jurídico de la época independiente de nuestro país que regulo la figura del homicidio es el Código Penal para el Distrito Federal y territorio de la Baja California de 1871, ubicando la figura del homicidio en el articulo 561 del titulo segundo “delitos contra las personas cometidas por particulares”, sancionándolo con penas de dos hasta doce años de prisión o pena de muerte dependiendo de si el autor del delito era primodelincuente o reincidente, o si el tipo penal era simple (con imprudencia) o calificado (cometido con premeditación, alevosía, ventaja o traición).

Por tasa, Jalisco es duodécimo lugar en homicidios

GUADALAJARA, JALISCO.-Jalisco está en el lugar número 12 de las entidades federativas según la tasa de homicidios registrados por cada 100 mil habitantes, de acuerdo con los datos que arroja un comparativo de los datos nacionales recopilados por el Inegi. Según la demografía, lo normal sería que la Entidad ocupara la posición número cuatro, pero hay estados más pequeños que padecen mayor incidencia, como Sinaloa, Guerrero, Durango, Nuevo León y Baja California, así como Nayarit y Colima.

Chihuahua lidera la estadística con 131 homicidios por cada 100 mil habitantes, pero en 2010 registró la mayor tasa, de 188. En Jalisco, como comparación, el año pasado se reportó una tasa de 20 fallecimientos accidentales y violentos, seis veces menos que en Chihuahua.

Los que exhiben a Jalisco son el Distrito Federal y Michoacán, pues sus tasas de homicidios en 2011 se ubicaron en 12 y 19 por cada 100 mil habitantes, respectivamente.

De manera general, los homicidios casi aumentaron cuatro veces en Jalisco entre 2005 y 2011, al pasar de 441 a mil 524 casos.

Si bien las muertes por suicidios o accidentes (principalmente viales) se incrementaron, las “ejecuciones” forman parte del detonante de los registros; el motivo: la disputa de los territorios entre los grupos delincuenciales.

Lo anterior se puede explicar de la siguiente forma: entre 2007 y 2011 se registraron en Jalisco cuatro mil 262 homicidios, de los cuales tres mil 235 fueron clasificados como dolosos (asesinatos), es decir, 75% del total ?la información surge del comparativo de datos del Inegi y de la Procuraduría de Justicia del Estado?.

En otra arista, de los tres mil 235 asesinatos, mil 694, prácticamente la mitad, es atribuida a la delincuencia organizada; este dato surge del comparativo de los registros del Inegi y del Sistema Nacional de Seguridad Pública.

En 2011, cabe destacar, no se incluyen los 26 cadáveres de jóvenes de entre 25 y 35 años que fueron encontrados en tres camionetas en la zona de los Arcos del Milenio, la mayoría con signos de asfixia,

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