Arquitectura Mexicana

Introducción

Los colores, las formas, la textura, ese folclor mexicano presente en nuestra arquitectura desde Mesoamérica, se ven reflejados hoy en nuestras Arquitectura. Desde siempre la nuestra arquitectura ha estado basada en el legado y el intercambio cultural, lo podemos ver en las culturas mesoamericanas, se fueron heredando los estilos y estos mismos fueron intercambiando en base a las tierras y de esta evolucionaba; es común ver elementos y grabados iguales o similares en regiones distantes, y entre culturas de periodos muy alternados.

Nuestro país tiene una enorme diversidad de culturas, de condiciones geográficas y climáticas. Por ello no debemos pretender que exista un estilo mexicano, fundamentado en formas, materiales y colores. Las raíces y la cultura mexicanas son mucho más variadas y profundas.

Por otro lado, en esta época en que la tecnología y las comunicaciones progresan a un ritmo abrumador, buena parte de los arquitectos han caído en la tentación de la moda perdiendo raíces bajo el dominio económico de países poderosos y la errónea interpretación del concepto de globalización.

La nueva arquitectura es impulsada por una nueva generación de arquitectos mexicanos, Teodoro González de León, Ricardo Legorreta, Bernardo Gómez Pimienta, Enrique Norten, Abraham Zabludovskyy Javier Sordo Madaleno, quienes consideran que sus obras sólo retratan un momento del desarrollo mexicano.

Javier Sordo Madaleno considera que a pesar de sus formas y tendencias, la nueva arquitectura mexicana no es diferente a la realizada por Pedro Ramírez Vázquez o Luis Barragán, pues en sus líneas, formas, colores y texturas conserva el nacionalismo mexicano.

Arquitectura mexicana

El intercambio en nuestra arquitectura ha sido tan importante que gracias a él podemos ver arquitectura de casi todos los estilos en México, Plateresco, Barroco, Churrigueresco, Renacentista, Ecléctico etc. Tal vez ninguno de estos estilos es puro al 100%, y eso también es gracias al intercambio y a la lentitud de las comunicaciones en ese momento.

Al nacer una nueva nación se realizaron muchas obras arquitectónicas “la arquitectura es cosa de humanidad” y de esta manera el patrimonio que tenemos, siempre diferente y en su momento creciente, dependiendo de su momento y región.

Los inicios de la arquitectura mexicana actual se inicio con Juan O´Gorman, diseñó y construyó al sur de la Ciudad de México un par de casas-estudio para Diego Rivera y Frida Kahlo. Con escasos recursos y un mínimo de materiales, O´Gorman produjo el más notable ejemplo de arquitectura funcional con plantas libres, espacios articulados llenos de luz, ventanales abiertos en donde es preciso, volúmenes puros de esencia geométrica y total ausencia de ornamentación.

Poco después, Luis Barragán se encaminaba también hacia la recuperación y recreación de los valores propios pero por otras vías: Sus primeros trabajos realizados en su natal Guadalajara se inscriben dentro de una corriente regionalista que recuerda a la arquitectura vernácula de los pueblos de Jalisco reinterpretada a la luz de las propuestas líricas de Ferdinand Bac.

Luego de mudarse a la ciudad de México, Barragán transitó brevemente por el funcionalismo. Al final, en su época madura, alcanzó la síntesis entre ambas tendencias produciendo una arquitectura profundamente mexicana y universal a la vez.

La nueva arquitectura mexicana, o la arquitectura mexicana de la nueva escuela viene de un proceso largo y tal vez un poco complicado, de error y prueba, estancados en lo colonial, y en art nouveau y art deco, viene un movimiento importante después del modernismo, hubo intentos terribles en la buscada de la arquitectura mexicana, se logró una arquitectura mexicana “neo prehispánica” con formas retro y una

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