ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

CRISIS FINANCIERA ESTADOS UNIDOS

brandon268213 de Junio de 2014

6.233 Palabras (25 Páginas)424 Visitas

Página 1 de 25

Estados Unidos, La Crisis Financiera Y Sus Consecuencias Internacionales

Por Alejandro Dabat

Introducción.

El presente material tiene el doble objetivo de (a) estudiar los aspectos fundamentales de la actual crisis financiera centrada en Estados Unidos y de sus repercusiones productivas e internacionales; y (b) de situar a la misma y a sus posibles consecuencias, dentro del marco más amplio y de más largo plazo de las transformaciones en curso de la economía mundial. Este segundo aspecto nos parece muy importante porque permite incluir en el análisis el papel de las nuevas condiciones internacionales en la gestación y el desenlace de la crisis actual, así como considerar las probables consecuencias de esta última sobre el curso futuro de la economía mundial y los trascendentales cambios que la están transformando aceleradamente.

Por tal razón dividiremos a la exposición en dos partes. La primera ubica la crisis financiera actual y la define como un fenómeno que expresa la problemática de EEUU; efectuado ese planteamiento, la exposición se extiende a discutir las consecuencias productivas inmediatas. En la segunda parte se ubica la referida crisis en su contexto mundial más amplio, abordando las consecuencias más probables para los países en desarrollo.

Primera parte

La actual crisis financiera y sus consecuencias productivas inmediatas.

Vista desde una perspectiva espacial, la actual crisis internacional es sobre todo una gran crisis de la economía de Estados Unidos, difundida ampliamente a nivel mundial, cuya magnitud dependerá tanto de la mayor o menor exposición de los diferentes países y regiones a los fenómenos que la generaron, como de las políticas defensivas que los mismos adopten y del aprovechamiento de las ventanas de oportunidad abiertas por la propia crisis. Pero es también un colapso del orden internacional que engloba y cuestiona aspectos económicos, sociales, políticos e institucionales propios del curso actual de la globalización, de la supremacía internacional de neoliberalismo, del propio curso de la economía del conocimiento (de la relación entre sus lados luminosos y obscuros)1 y, muy en particular, de la hegemonía mundial del Estados Unidos y el orden Mundial de Bretton Woods establecidos bajo su liderazgo.

A La especificidad de la crisis actual.

La actual crisis internacional se diferencia de casi todas las crisis económicas internacionales desencadenadas en los países capitalistas centrales, como las de 2001-2002 o la de 1990-1991, por ejemplo, para solo citar las mas recientes. La especificidad de la crisis actual estriba en que no es tanto el resultado de un proceso de sobreacumulación de capital en sectores productivos de punta, desencadenada en el plano financiero por una crisis bursátil 2, sino mas bien una crisis fundamentalmente financiera gestada dentro de una coyuntura de crecimiento sostenido de la economía mundial, tanto de la producción y la inversión productiva como, en particular, de los sectores de punta del actual ciclo económico mundial.

El estallido de la crisis hipotecaria en Estados Unidos a mediados de 2007 no afectó sensiblemente al curso de la economía mundial hasta mediados de 2008, la que continúo manteniendo altas tasas de crecimiento superiores al 5 % anual (UN, 2008) con niveles récords de inversión internacional directa cercanos al 30 % anual anterior (WTO, 2008). El nuevo núcleo dinámico de la economía mundial (Sector Electrónico-informático), mantenía altas tases de crecimiento al momento del estallido. Según Gartner, la consultora más reconocida de la industria electrónica, la producción de los componentes básico de la misma (semiconductores) seguía manteniendo ”un crecimiento sorprendentemente fuerte” aún en el III trimestre de 2008 (Deffree, 2008), y lo mismo señala la consultora IDC, para la cual las ventas de microprocesadores para las computadoras personales, continuaban creciendo a “niveles records” hasta el mismo período (Business Wire, 2008).

El nuevo sistema financiero conformado en la fase neoliberal del capitalismo informático-global, se estableció a partir de fenómenos tales como la titularización y desregulación del crédito, la informatización de la circulación del dinero, la globalización financiera, los instrumentos financieros derivados 4, los nuevos fondos especulativos de inversión (Dabat y Toledo, 1999) y el enorme enriquecimiento rentístico-privado de amplios sectores de la población mundial favorecido por la globalización, que acentuaron el sesgo especulativo del capitalismo estadounidense conforme consideramos en la sección B de la Segunda Parte.

La interacción entre ambos factores (causa estructural y detonante), se dio principalmente en el mercado inmobiliario de Estados Unidos, por ser el mismo, donde más se expresaron y convergieron los factores mencionados. Pero a su vez, como veremos en la Segunda Parte del presente trabajo, la causa estructural mencionada (carácter del nuevo sistema financiero) encuentra sus raíces en algo aún más profundo en términos históricos, que es el proceso previo de declinación del capitalismo norteamericana ante la competencia internacional, atribuible en gran parte a su propia naturaleza socio-institucional.

En principio, la crisis hipotecaria estadounidense pudo ser detonante de la otra crisis mayor por las características muy particulares del mercado inmobiliario de ese país. El mismo es un mercado de muy gran tamaño, debido al altísimo nivel relativo de los precios del suelo7, a los elevados niveles de ingresos de la población o a la amplia difusión de la vivienda propia. Estos factores fueron muy acentuados coyunturalmente, por el excepcional auge de la construcción inmobiliaria tanto por la prosperidad de la última década del siglo XX como por la fuerte reducción de los costos hipotecarios en ese entonces, que permitieron incorporar al mercado a una gran cantidad de adquirentes de bajos ingresos. El crecimiento del mercado hipotecario y de los precios de la vivienda en Estados Unidos, pueden verse en la gráficas 1 y 2, que en conjunto (multiplicando el volumen de ventas por el alza de precios), elevó el valor de la propiedad inmobiliaria (stock) de unos diez trillones de dólares en el año 2000 (cifra muy cercana a la del PIB nacional de ese mismo año) a cerca de veinte en 2005, que implica mas de un 130 % del PIB en solo cinco años. En términos de flujos (valor anual de las operaciones inmobiliarias) ello significo un salto del 4.4 % del PIB estadounidense al 6.3 % entre los mismos años (The Economist, 2007).

Pero, la gravedad de la crisis hipotecaria de Estados Unidos no estribó tanto en el tamaño del mercado hipotecario y de su eslabón más débil (la magnitud de los créditos subprime o de baja calificación crediticia), sino en su relación con el nuevo sistema financiero y los mecanismos de integración en él. Estados Unidos no solo fue el centro originario del nuevo sistema financiero de titularización del crédito y de la globalización financiera, sino también el país que contó con los mayores índices de profundización financiera (relación entre activos financieros y PIB, mayor peso de los instrumentos derivados y, en particular, a partir de la crisis de 2001-2002, de sus formas mas peligrosas de contagio: los denominados Obligaciones Colateralizadas de Deuda (CDOs en ingles) y Vehículos Estructurados de Inversión” (SIVs) que incorporaron nuevos y letales mecanismo de diversificación y transmisión de riesgo sistémico en gran escala en el conjunto del sistema financiero y la economía, conforme veremos en la Sección B de esta primera parte.

El peso en Estados Unidos del nuevo sistema financiero, queda patente en el cuadro 1 que expresa el peso mucho mayor del mismo en relación al PIB, tanto al nivel de los activos financieros (monto de acciones, bonos y otros instrumentos titularizados de crédito tales como las hipotecas convertidas en documentos negociables). El FMI subestima considerablemente los montos de las columnas B y, sobre todo, C 8. Pero a pesar de ello, el cuadro sirve para demostrar tanto la enorme magnitud relativa de los activos financieros y los instrumentos derivados frente a la economía real en Estados Unidos y el mundo, como la enorme concentración de los mismos en el país del Norte que solo se encuentra en magnitud cercana de muy pocos países del mundo, como es el caso de Gran Bretaña y Australia

Cuadro 1

Activos financieros e instrumentos derivados en relación al PIB, 2006 (miles de millones de dólares)

A. PIB B. Activos financieros C. Instrumentos derivados*

Total % Total % Total %

Estados Unidos 13.195 100 50.185 280,34 100.738 663,47

Resto del Mundo 35.010 100 101.606 190,22 142.596 307,30

Total 48.204 100 151.791 214,89 243.334 504,80

Fuente: Global Financial Stability Report, FMI Septiembre 2007

* No incluye derivados sobre acciones y Commodities

La enorme concentración del capital dinerario y ficticio en Estados Unidos, fue acrecentada por la gran aceleración de los flujos externos de inversión pública y privada, destinada esta última principalmente a la adquisición de títulos públicos (letras del tesoro fundamentalmente) y privados (bonos y acciones), depósitos bancarios, títulos hipotecarios y derivados entre otros, con muy escasa participación de la inversión directa que se fue reduciendo desde un 30. 6 % de la inversión extranjera

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (40 Kb)
Leer 24 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com