Canon Y No Canon

LOS CÁNONES Y NO CÁNONES

Hablar de cánones implica tomar una postura, o los aceptas o los cuestionas; si tomas la segunda, seguramente entrarás en controversia con la propia cultura, con el entendimiento general de las cosas y las ideologías, con la manera en cómo se percibe el mundo y por supuesto con aquellos que establecen esos cánones.

Normalmente no se discuten los paradigmas, estamos acostumbrados a seguirlos; alguien tiene la idea, otros la hacen suya y la siguen sin cuestionarla siquiera. Así es como se establecen los cánones; se necesita de gente que crea en ellos y que los reproduzca sin hacer crítica al respecto. Pero qué sucede con aquellos que si la cuestionan y la ponen en duda, que no se dejan influenciar y por consecuencia que no están dispuestos a seguirlos.

Se corre el riesgo de que estos sean borrados y sustituidos por otros cánones, se rompen unos pero definitivamente se crean otros y habrá seguidores o discípulos para estos también, se opondrán a los existentes con la idea de derribarlos y entrarán en conflicto, un conflicto de poder ideológico.

Finalmente todos los cánones regulan, dominan, controlan, determinan todo lo que percibimos y creemos que es lo verdadero, lo fiable. Se vuelve casi una cuestión religiosa, inalterable a menos que te rebeles. Estos son reflejo de una sociedad, paradigmas sacados de la cultura y si hablamos de arquitectura sabemos que ésta responde a una sociedad, en ella se reflejan esos pensamientos, ideologías, deseos, frustraciones, creencias entre otras muchas cosas, así también la arquitectura paradigmática canónica solo nos delimita todo lo que percibimos y creemos que es la verdad.

“El canon, tanto en arquitectura como en cualquier otro arte, es un ente imperfecto, lleno de distorsiones e injusticias. Pero ello no quiere decir que sea inútil” . Pero el verdadero problema es que el arquitecto contemporáneo trabaja bajo ciertos cánones que ya no le corresponden.

La arquitectura siempre ha necesitado de cánones “el canon es el conjunto de conocimientos compartidos que une a los arquitectos de todo mundo y les confiere su identidad colectiva” , definitivamente concuerdo con esto pero considero importante historiar, conocer el pasado, esto no quiere decir que lo tengamos que seguir ciegamente, o que no lo podamos cuestionar, incluso por qué no, hasta podríamos romper con ellos y partir de nuestra realidad, trabajar libremente desde nuestro contexto histórico, temporal, de lo que demanda la actualidad.

Me parece que seguir un canon pasado puede resultar equivocado, ya que aquella respuesta formal, funcional, simbólica, etc., responde a un momento específico de la historia con un contexto político, cultural, económico muy especial, así que tal vez, debamos tener cuidado con esto .

Claro está que es importante el que conozcamos lo que se ha hecho, pero no con el fin de reproducir ni crear adeptos a estilos, modas e ideologías que ya fueron y que nada tiene que ver con nuestro momento, sino, nuestra labor es entender nuestro tiempo y a su gente para poder generar lo nuevo, lo que no se ha hecho. Esa construcción de nuestro presente efímero y del futuro cercano. Los arquitectos, somos intérpretes de historias

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