Comentarios De Teorias

Comentarios De Teorías en orden Geográfico

A nivel mundial

En las últimas décadas, el perfil de la inmigración en EEUU ha cambiado profundamente. Mientras que en 1960 más del 75% de los inmigrantes procedía de Europa, en la actualidad, esta cifra se ha reducido al 15%. Más de la mitad de los inmigrantes en EEUU son de América Latina. Cabe distinguir entre dos olas de inmigración latinoamericana bien diferenciadas: en los años sesenta emigró la elite cubana que huía de la revolución de Fidel Castro, y en los años ochenta y noventa se produjo la emigración económica proveniente de México, Centroamérica y el Caribe.

EEUU concentra la comunidad hispana más importante del mundo. Con 39,9 millones de hispanos, es el cuarto país de habla hispana después de Brasil, México y España. Teniendo en cuenta que la tasa de fertilidad de los hispanos es un tercio más alta que la del resto de los ciudadanos estadounidenses,[3] los pronósticos indican que en el año 2040 una cuarta parte de la población estadounidense será de origen hispanoamericano.

La inmigración es temática universal a la que no escapa ningún continente pero que encuentra en América Latina un fructífero campo de sueños, de dramas, de abusos, de éxitos y desencantos. La inmigración de los países de América Latina hacia Estados Unidos es fuente hoy de innumerables controversias traducidas en las últimas cifras publicadas por las autoridades norteamericanas. Salvadoreños, guatemaltecos, mexicanos, peruanos, muchos son hoy los que regresan a sus países con el sueño americano a cuestas y no como perspectiva.

Más de 700. 000 extranjeros fueron detenidos tras ingresar ilegalmente a Estados Unidos durante el año fiscal 2008, mientras que 386 fallecieron por diferentes circunstancias en la búsqueda de ese sueño. Las cifras fueron proporcionadas por la Patrulla Fronteriza y del total de detenidos 661.766 son mexicanos y 62.059 ciudadanos de otros países, que en muchos casos ingresaron caminando desde México. Laura Rivas, miembro de la Red Nacional pro Derechos de Inmigrados y Refugiados, describió a RFI el panorama crítico que se vive en la frontera entre México y Estados Unidos.

A su vez, el Servicio de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE) reveló que deportó a más de 154.000 centroamericanos y mexicanos durante el año fiscal 2008, es decir un 46% más que el año anterior. Álvaro Valderrama, académico y periodista, especialista en temas de inmigración en los Estados Unidos, constata que el sueño americano empieza a volverse una pesadilla.

Las cifras y los testimonios sobrecogedores de las situaciones que atraviesan muchos candidatos a la inmigración corresponden a un endurecimiento de las políticas migratorias aplicadas en los últimos dos años. Eso es lo que explicó a RFI Carlos Moreno, abogado defensor de inmigrantes, quien calificó la situación como una cacería.

http://publications.iom.int/bookstore/free/WMR2013_SP.pdf

A nivel de América

Una consecuencia muy importante de la emigración en América es el flujo de remesas, cuyos efectos macroeconómicos son significativos en varios países. En 2007, el valor de las remesas a nivel regional se elevó por encima de los 66 mil millones de dólares. En algunos países, la magnitud de estos envíos de dinero supera con creces la de otras fuentes de divisas, lo que indica que la estrategia individual de los migrantes constituye un importante apoyo a las economías nacionales, regionales y locales que desafía las políticas públicas. Los grandes receptores de remesas han sido, desde 1980, México, Brasil, Colombia, El Salvador, Guatemala y República Dominicana, países en los que se concentra el 80% del total de las remesas.

Existe en los países de la región gran interés político y social por explotar estos recursos como fuente de financiamiento del desarrollo. El debate se ha enfocado en varios temas, tales como la utilización de las remesas a nivel interno como fuente de ingresos ordinarios y eventualmente de ahorro, su medición en las balanzas de pagos y en las cuentas nacionales, los costos de transferencia, la transparencia del mercado y el potencial que representan en materia de productividad y bienestar. Algunos países como El Salvador, México y Colombia ya cuentan con experiencias al respecto, que han contribuido al discurso sobre las potencialidades de las remesas en términos de desarrollo. Los organismos internacionales de ayuda al desarrollo, como el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), han prestado especial atención a las remesas como mecanismos para reducir la pobreza y contribuir al desarrollo de los países de origen de la migración internacional, y han creado dependencias dedicadas a promover su uso productivo.

Más de una quinta parte de los jóvenes latinoamericanos participa en los procesos de migración internacional por motivaciones diversas, que en algunos casos se basan en decisiones propias relacionadas al estudio, la carrera profesional o la búsqueda de nuevos horizontes y una mayor autonomía. En otros casos, los jóvenes migran acompañando a sus padres, o algunos se ven forzados a buscar oportunidades de trabajo en el exterior, enfrentando numerosos obstáculos que amenazan sus derechos en el momento de la inserción en el mercado laboral. Los que afrontan mayores riesgos son los jóvenes migrantes de bajos niveles educativos, los que pertenecen a minorías étnicas, los indocumentados y los que apelan a las redes de tráfico o son víctimas de la trata de personas. Considerando estas situaciones, se puede notar un contrapunto entre el protagonismo juvenil y la vulnerabilidad de los jóvenes migrantes. A escala regional, las condiciones de vulnerabilidad predominan en la migración entre países limítrofes: desventajas en logros educativos e inserción laboral y probablemente un rápido tránsito hacia la vida adulta caracterizan a la mayoría de jóvenes que migran. Aquellos cuyo desplazamiento involucra grandes distancias suelen experimentar con más frecuencia una relativa satisfacción de logros y la posibilidad de ejercicio de sus opciones. En este contexto, es fundamental informar a los jóvenes sobre la realidad de la migración, con sus opciones y riesgos, además de alertarlos sobre las redes ilegales de tráfico de personas. La migración internacional de los jóvenes refuerza además la necesidad de promover una mayor reciprocidad en los acuerdos entre países, por ejemplo para facilitar estudios o empleo, y medidas para evitar la discriminación. En el caso de la migración de jóvenes profesionales, es

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