EL FINAL DEL IMPERIO MONGOL Y EL NACIMIENTO DEL MODERNO ESTADO RUSO

EL FINAL DEL IMPERIO MONGOL Y EL NACIMIENTO DEL ESTADO RUSO

Resumen:

        Los siglos XIV y XV en Europa Oriental supusieron importantes cambios dinásticos, fusiones, rupturas de monarquías, etc. En este entorno europeo, en Rusia surgió el  principado de Moscú, que gracias a Iván III el Grande (1462 -1505) dio lugar al nacimiento del moderno Estado Ruso.

        Iván III fue anexionándose los diferentes principados hasta que en 1478-80 puso fin a la independencia de Novgorod. Una vez anexionado Novgorod, consiguió la anexión de Tver, el último gran principado ruso. En 1494 expulsó a los comerciantes alemanes y suprimió los derechos comerciales hanseáticos, logrando así la dependencia económica respecto Lituania y la Hansa. Tras acabar con el dominio tártaro en 1492, en 1501 la Rusia del zar Iván III era ya un gran poder europeo.

        La importancia del breve reinado de Iván III estriba en que durante estos cuarenta y tres años, se logrará abolir el dominio tributario de los tártaros, se iniciará la unificación de todos los países colonizados por grandes rusos, Lituania perderá progresivamente su poder y Moscú se convertirá en la mayor potencia de Europa oriental. Y, sobre todo, se considera que su forma de gobernar sirvió de base para todos los posteriores gobiernos autocráticos.

Palabras clave: Imperio Mongol, Horda de Oro, Principado de Moscú, Iván III, Tercera Roma, Absolutismo, Autocracia, pomestie.

Introducción:

        En este trabajo se aborda la Historia de Rusia desde el fin del dominio del Imperio Mongol hasta el nacimiento y crecimiento del nuevo Estado Ruso que representó el reinado de Iván III (1462 a 1505). Este reinado supone un cambio respecto a todos los anteriores, representando para muchos autores le inicio del nuevo Estado ruso moderno y  las bases de la primera autocracia.

        Todo el trabajo se ha basado en fuentes secundarias, principalmente libros, pero también artículos y publicaciones en revistas especializadas, todos referenciados en la bibliografía al final del trabajo.

        El estudio consta de tres partes: en la primera, Antecedentes históricos, analizo lo que supuso el imperio mongol en Rusia y las consecuencias de su dominio ; en la segunda, Iván III, me centraré en los detalles del comienzo de la autocracia, las características del reinado de Iván III y las transformaciones que supuso; y en la tercera,  conclusiones, recapitularé los principales motivos por los que se considera a Iván III como el iniciador del moderno estado ruso y el fundador de la forma de gobierno autócrata.

Antecedentes históricos.

Los mongoles

        Los mongoles son uno de los muchos pueblos que habitaban en Mongolia Central, en las estepas asiáticas. Era un pueblo eminentemente ganadero, lo que les obligaba a realizar migraciones estacionales. Su principal fortaleza se basaba en la caballería. El Kan Temüjin (1167-1227) sometió a varios de estos pueblos y adoptó el título de Ghenghis Khan. En 1206, después de haber completado la tarea de unificación o sometimiento por la fuerza de las tribus de Mongolia, fue aclamado khan de todas las tribus turcas y mongolas Entre 1211 y 1216 conquista la China septentrional y toma Pekín. En 1215 somete Jorezm. En 1222 tiene el primer contacto con los rusos en la batalla de Kalka. ^[1]

        En 1222 muere Ghenghis Khan y reparte el reino entre sus hijos. Ögodei (1229-1241) es elegido su sucesor. En 1236 su sobrino Batu inicia una serie de campañas de expansión del dominio mongol invadiendo el continente europeo, atravesando las estepas del Rys y destruyeron las poblaciones encontradas a su paso. Se dirige a Occidente aniquilando a los búlgaros del Volga. Después de esta primera campaña, emprende una serie de campañas contra los rusos al norte y al sur de Kiev que duraron hasta 1240. La derrota rusa fue completa excepto en Novgorod. Por otro lado, en el avance hacia el oeste, los tártaros conquistaron Vladimir-Volynsk, en Volinia, y Galitsch, llegando a invadir Hungria y Polonia. Ese mismo año derrotaron también a la caballería germano-polaca y a los búlgaros del Danubio. Sin embargo, y a pesar de los triunfos, en 1241 retrocedieron de nuevo a las estepas rusas, posiblemente por la muerte del Gran Kan, para que Batu estuviera presente en la sucesión del nuevo khan.  

         En 1242, al regresar de la gran expedición, Batú  se instaló en las tierras del Rus^[2] para consolidar su poder, fundando en la orilla del Ajtuba, un afluente del Volga, la ciudad-campamento de Sarai, centro de sus dominios (kanato de la Horda de Oro o Kipchak). Desde allí sometía a los "kniazes" de la antigua Rus,  y ejercía su control sobre las estepas del Don y del Dnieper, Crimea y las laderas del Cáucaso. En 1293 el nuevo kan envió una expedición contra las ciudades rebeldes de Vladimir y Suzdal, cuyo centro de poder fue totalmente destruido. Tver logró evitar a los mongoles y su gran duque Mijail II extendió su dominio sobre las posesiones de Vladimir a principios del siglo XIV, convirtiéndose en el más poderoso de la antigua Rus. Cuando en 1327  quiso rebelarse contra la Horda fue sometido por Iván "Kalyta" de Moscú, quien así concluyó con el poder de Tver y obtuvo el agradecimiento de los mongoles, iniciando el proceso de engrandecimiento de Moscú.^[3]

        Desde Sarai distribuyó a sus representantes (Baskaken) por la residencias de los príncipes rusos con el fin de que  recaudaran impuestos (el yarlyk tátaro). Siempre que se realizaba este pago, los mongoles no se inmiscuían en los asuntos internos rusos  y toleraban incluso la libertad religiosa. ^[4]

        Los kniaz (duques) de las ciudades (gorod) del Rus fueron eliminados y únicamente quedó el poder del clero ortodoxo, a quienes los mongoles, religiosamente tolerantes, conservaron en funciones.

        La nobleza que pasaba buena parte de su vida en la corte de los kanes  ya sea buscando ganar influencia, obtener la investidura o neutralizar a sus rivales en el poder, terminó emparentándose con los tátaros, y formó una nueva clase dirigente adaptando sus costumbres y métodos.

        A finales del S.XIII, la recaudación de impuestos dejó de ser obligación de los príncipes rusos. Sin embargo, la decadencia del sur sería aprovechada por el norte, más rico gracias al comercio del Báltico, para que surgiera allí un nuevo Estado ruso fuerte desde Moscú.

El dominio mongol

        El dominio mongol de Europa Oriental durará hasta mediados del S.XIV. Las invasiones mongolas en las tierras rusas, a diferencia de las que hubo en los reinos de Europa central, fueron de gran trascendencia y  marcaron el curso de su historia durante más de dos siglos.

        Tras la retirada a Asia de las hordas tátaras, y aprovechándose de que Batú estaba más pendiente de asuntos internos como lograr afianzar su reino al sur, los príncipes rusos que no querían someterse a los mongoles, aprovecharon para fortalecer sus posiciones. Andrés Jaroslavic de Vladimir al noreste y Daniel Romanovic en Galitzia-Volinia al sudoeste, mantuvieron un “sometimiento” a los mongoles pero con una concentración de fuerzas en el interior. Sin embargo, en Novgorod,  Nevski, hermano de Andrés, decidió someterse a los mongoles ante la amenaza de los latinos contra su fe ortodoxa, ya que los mongoles eran tolerantes en asuntos religiosos, y por otro lado, quizás Batu podría ayudarle a arrebatar a su hermano el título de Gran Duque. ^[5]

        En 1250, la consolidación económica y militar del nordeste de Rus´y Galitzia—Volinia propicio la alianza de Andrés y Daniel. Nevski aprovechó esta unión para conseguir su ansiado título de Gran Duque. Lo consiguió con el apoyo de la nobleza y el clero, temerosos de la posible alianza de Daniel con los latinos. Andrés fue derrotado en 1252 y Daniel en 1258. Así, el gobierno de Nevski supuso la consolidación del dominio mongol.

        El khan Batu dependía del gran khan de Karakorum: los príncipes rusos trataban sus asuntos directamente con el khan de la Horda de Oro. De hecho, los aspirantes a Gran Duque tenían que visitarle personalmente en Sarai, y a cambio del nombramiento, se les exigía tributos y contingentes militares. Sin embargo, a partir de S. XIII empezaron a aparecer signos de independencia (el gran jan autorizó al Gran Duque de Vladimir a recaudar él los impuestos). [CARSTEN: pp.68-69]

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