ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Facultad De Medicina


Enviado por   •  7 de Septiembre de 2013  •  5.317 Palabras (22 Páginas)  •  416 Visitas

Página 1 de 22

CONDICIONES GENERALES DE LOS SERVICIOS MÉDICOS EN MICHOACAN ANTES DE LA FUNDACIÓN DE LA ESCUELA DE MEDICINA

ÉPOCA PREHISPANICA

Lo que ahora es el Estado de Michoacán de Ocampo, y buena parte de los de Guanajuato, Guerrero, Jalisco y San Luis Potosí, eran la sede de uno de los grupos indígenas más importantes por su número, su desarrollo social y cultural, los tarascos.

El mundo mágico en que vivían todos los grupos indígenas que poblaban lo que sería la Nueva España, envolvía práctica¬mente todos los actos y situaciones de su vida individual y colectiva. La enfermedad y la muerte se encontraban rodeadas de prácticas muy alejadas de posiciones racionales y de conocimientos objetivos sobre el organismo humano. Desconocimiento del cuerpo, sus órganos y funciones, que no permitía apreciar y reconocer las enfermedades y luchar contra ellas eficazmente.

Ciertamente que se practicaba el uso de plantas medicina¬ les, pero con base en un conocimiento práctico, empírico. Debe reconocerse la gran variedad de estos vegetales con pro¬piedades curativas y el acierto de su aplicación en algunos padecimientos y, especialmente, contra algunos síntomas y signos, como el dolor físico, por ejemplo.

Esta medicina, que no puede calificarse siquiera de elemen¬ tal, la aplicaban los sacerdotes, los magos, los chamanes, es decir, personas ligadas con la religión, la magia, lo sobrenatural La situación existente en lo relativo a la medicina, en el mundo indígena antes de la conquista, se mantiene con pocas variantes y solo algunos avances, en los tres siglos de vida colonial. Los adelantos se aplicaron especialmente en el sector de la población formado por los españoles peninsulares y los criollos, más que al sector mayoritario formado por la población indígena.

ÉPOCA COLONIAL

El estado de las ciencias y servicios médicos, no solo en la zona Tarasca sino en todo el gran territorio de la Nueva España, correspondía a la situación que privaba en todo el mundo en relación con el nivel a que habían llegado los descubrimientos y el desarrollo general de las ciencias médicas de esos siglos, exagerada por las condiciones de atraso social y cultural propias de todo estado colonial.

Las hierbas medicinales de los indígenas solo fueron motivo de curiosidad de los investigadores, sin llegarse a un estudio a fondo de sus componentes y su acción curativa, ni menos a establecerse su uso regular y acertado.

Los servicios médicos, curación de enfermedades y mantenimiento de la salud, en la calidad mas avanzada de su tiempo, no tenían carácter popular, ya que sólo los disfrutaban un pequeño sector social y privilegiado y, el mayoritario, formado por los mestizos y los indios carecía casi totalmente de ellos.

En cuanto a la enseñanza de las ciencias médicas y formación de los profesionistas necesarios para su aplicación, puede afirmarse que no existió de manera regular y científica.

En España, metrópoli de la colonia, las ciencias médicas tenían un desarrollo más lento que en los otros países europeos. Basta señalar que la enseñanza de la anatomía humana se limitaba por prejuicios muy arraigados; la Inquisición prohibía terminantemente la disección de cadáveres humanos con el fin de enseñanza. Esta situación se reflejaba, y aún se acrecentaba en la colonia, la Nueva España.

Sobre esta situación, en la obra Las Corrientes Filosóficas en la Historia de México, del Lie. Vicente Lombardo Toledano, se expresa lo siguiente:

"El Doctor Agustín Rivera y San Román da noticias pormenorizadas (en su obra Disertación sobre el Atraso de la Nueva España en las Ciencias Filosóficas) de la hostilidad del gobierno virreinal a los que profesaban la filosofía nueva y sostiene que todavía a mediados de esa centuria (XVIII) España se encontraba impedida para aprender las disciplinas filosóficas modernas en las universidades y cole¬ gios, por el atraso de la enseñanza pública, y también en lo privado, por la falta de buenos libros, y que ese hecho detuvo el progreso intelectual de México. Concluye con esta observación: Los estudios nunca florecerán bajo un sistema, colonial".

En esta situación general sobre servicios de protección de la salud en la Nueva España, merece señalarse el esfuerzo efectuado por los misioneros católicos que realizaron, induda¬ blemente, una labor protectora de los nativos indígenas en diversos aspectos. En esta labor destaca la creación de instituciones llamadas "Hospitales" con las siguientes funciones: cristianización de los indígenas, enseñanza del idioma castella¬ no, organización y enseñanza de las artesanías familiares, ayuda para mejorar las actividades agrícolas, ayuda y organización de la economía colectiva y familiar, atención de enfermos para su curación, refugio y sostenimiento de incurables e inválidos.

Estos hospitales se establecieron y funcionaron en la región Michoacana gracias al esfuerzo continuado y extraordi¬ nario de los religiosos Fray Juan de San Miguel y Vasco de Qúiroga.

En el siglo XVII llega a Michoacán un grupo de misione¬ ros pertenecientes a la Orden de San Juan de Dios, llamados por ello "Juaninos", que realizaban especialmente actividades de atención de enfermos, organizando y manejando hospitales especialmente para este propósito. A fines de esta centuria establecen en Valladolid su primera institución, que hacen funcionar con mucha pobreza y dificultades, hasta que logran su instalación en la casa que ocupaba el arzobispado, en la esquina que ahora ocupa el Hotel Oseguera, en avenida Madero con Morelos. En este local permanece el Hospital de los Juani¬ nos todo el siglo XVIII y parte del siguiente, y en él se establece la Escuela Médica de Michoacán.

SITUACIÓN POLÍTICA Y SOCIAL DE MICHOACÁN EN LA ÉPOCA DE LA FUNDACIÓN DE LA ESCUELA DE MEDICINA.

En el año 1829 el Presidente de la República don Vicente Guerrero deja su cargo, por el triunfo del Plan de Jalapa, en manos de don Anastasio Bustamante, lo que produce en Michoacán también el cambio del Gobernador General José Salgado, insurgente y amigo de Guerrero, por don Diego Moreno, que ocupaba el cargo de Vice-Gobernador. Entre estos dos gobernantes ocupa la gubernatura, provisionalmente, un funcionario, consejero del gobierno y profesionista médico, muy distinguido y estimado, el doctor Juan Manuel González Urueña que será el fundador de la Escuela Médica de Michoa¬ cán.

En su calidad de gobernador, el doctor

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (33.5 Kb)  
Leer 21 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com