INICIO DE LA GUERRA DE INDEPENDENCIA

COLEGIO SEMBRADORES DE AMISTAD

GUERRA DE INDEPENDENCIA

Inicio de la guerra de Independencia Organización de la guerra de independencia Resistencia de la Guerra de Independencia Consumación de la Guerra de Independencia

JULIAN GARCIA IBARRA A4 NO.LISTA:8

28/04/2014

INICIO DE LA GUERRA DE LA INDEPENDENCIA

Miguel Hidalgo y Costilla fue uno de los conspiradores en Querétaro que promovieron el surgimiento del movimiento de independencia.

Hidalgo pertenecía a un sector importante de criollos ilustrados.

El, desarrollo una carrera académica sólida en el Colegio de San Nicolasa que lo llevo a ser rector de esa casa de estudios.

Como sacerdote, fue testigo del trato violento e injusto que los españoles peninsulares daban a los criollos, mestizos e indígenas. Al ser consciente de la injusticia imperante en la Nueva España, Hidalgo decidió participar en las acciones conspirativas de los criollos ilustrados, quienes veían en la abdicación de Fernando VII en España una posibilidad real de transformación de las condiciones de vida de los criollos y mestizos en la Nueva España . Por ello la respuesta tendría que ser iniciar un movimiento de rebeldía, igual al que se desarrollaba en España con el que los ilustrados españoles rechazaban la Intervención Francesa. Así es que en el mismo Grito de Dolores para llamar la insurrección, Hidalgo expreso a la multitud “Viva Fernando VII, mueran los gachupines”, frase con la cual dejaba claro su posición política inicial.

En tan solo 10 días, los insurgentes avanzaron rumbo a la toma de la ciudad de México que para entonces ya había sido prácticamente abandonada por las fuerzas realistas del virrey.

Con más de 80.000 mil integrantes de su gran ejército, los jefes militares criollos tuvieron que reordenar la participación del contingente para no verse desbordados pos las fuerzas violentas de las masas participantes.

El 19 de Octubre, en su paso por Guadalajara, Hidalgo hizo un pronunciamiento de una gran trascendencia a los casi tres siglos de dominación española: decreto la Abolición de la Esclavitud y la Pena de Muerte, pronunciamientos de un transcendental valor histórico-político para todo este proceso y movilización social.

Hidalgo se entrevistó con José María Morelos y Pavón, para que esta encabezara la lucha del sur, de igual manera, responsabiliza de las acciones independentistas a José Antonio Torres en Guadalajara, a Rafael Iriarte en León, Aguascalientes y Zacatecas, así como en otras regiones del país.

Francisco Javier Venegas, quien acababa de ser nombrado virrey de la Nueva España y a él le toco enfrentar a la fuerza insurgente, ratifico el decreto por el cual se suspendía el pago de tributos de los pueblos indígenas, frustró la Conspiración de Valladolid y convirtió en cuartel militar la sede de la recién inaugurada Real y Pontificia Universidad de México.

El Obispo Abad y Queipo excomulgo al cura Hidalgo por los hechos violentos de Valladolid.

La fuerza realista también llamada “La Milicia Virreinal”, tendría una fuerte respuesta en manos de su jefe, Félix María Calleja. Al mando de este, los realistas aplacaron varios levantamientos insurgentes en varias partes y los castigos a los prisioneros fueron severos.

Venegas entendió la importancia del movimiento y de dio a la tarea de reorganizar al ejercito colonial. Enfrento siempre con firmeza a las fuerzas de Miguel Hidalgo y después las de José María Morelos y Pavón.

En la célebre batalla de Puente de Calderón, en Jalisco, el 17 de enero de 1811, con más de 90 000 hombres de Hidalgo contra 6 000 de las fuerzas virreinales, el ejército insurgente sufrió una de las derrotas más importantes del movimiento independentista. Esto fue consecuencia de la desorganización, la improvisación y la estrategia militar desplegada por las fuerzas realistas.

En Acatita de Baján, Coahuila, el 21 de marzo de 1811, los principales jefes rebeldes: Miguel Hidalgo y Costilla, Ignacio Allende, Juan Aldama y Mariano Jiménez, entre otros, fueron apresados, fusilados y sus cabezas exhibidas en la Alhóndiga de Granaditas, Guanajuato como símbolo  según el virrey Venegas, del termino del movimiento de Independencia.

El movimiento insurgente, ya con una fuerza muy mermada, se sostuvo a base de una guerra de guerrillas, encabezadas por los generales Ignacio López Rayón y el cura Don José María Morelos y Pavón, quienes habrían de sostener la lucha tras la muerte de Miguel Hidalgo y Costilla.

ORGANIZACIÓN DE LA GUERRA DE INDEPENDENCIA

De inmediato comenzaron los problemas entre Rayón y Morelos ya que tenían ideas muy diferentes sobre la forma en que México podía lograr su independencia.

Rayón nombró una Junta de Gobierno en Zitácuaro en la que se dijo que México volvería a estar bajo el dominio de Fernando VII cuando éste volviera a ser rey de España. También llamada la “Junta Suprema”.

Por su parte, Morelos pensaba que México debía independizarse por completo y contar con su propio gobierno. Además creía que era necesario lograr que los mexicanos vivieran mejor, pues miles de indígenas, mestizos y personas de otras castas eran muy pobres y no gozaban de los mismos derechos que los españoles.

Poco a poco Morelos fue ganando prestigio y se convirtió en el principal caudillo insurgente. Logró extender la lucha por el sur del país, contando con el apoyo de los hermanos Galeana, Mariano Matamoros, Vicente Guerrero y los hermanos Bravo, entre otros héroes.

En 1812 se aprobó en México la Constitución de Cádiz que había sido hecha en España y que decía, entre otras cosas, que los españoles y los habitantes de las colonias eran iguales. Pero Morelos no estuvo de acuerdo en aceptarla, pues pensaba que mientras España no reconociera que México era un país independiente, no podía haber igualdad de derechos.

Con esta idea Morelos reunió un Congreso en Chilpancingo, Guerrero, en 1813. En ese Congreso, que sustituyó a la Junta de Gobierno, dio a conocer un documento llamado Sentimientos de la Nación. En este documento se transformaron por completo las demanda del movimiento que antes se habían expresado en la Junta de Zitácuaro: ahora claramente se postulaba, entre otras cosas importantes, lo siguiente:

• Declaración

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