La Revolucion Industrial

Asignatura: Hombre, cultura y sociedad I (FCA-151)

Revolución Industrial.

Fue la fase de evolución económica, tecnológica y social que tuvo inicio en la segunda mitad del siglo XVIII en el Reino de Gran Bretaña, que se extendió durante los siguientes períodos a gran parte de Europa occidental y América, y que concluyo entre 1820 y 1840. Durante este tiempo se vivió el mayor conjunto de renovaciones económicas, tecnológicas y sociales de la historia del mundo desde el período Neolítico, (McCloskey, Deidre 2004), que vio el paso desde una economía rural basada especialmente en la agricultura y el comercio a una economía de naturaleza urbana, industrializada y mecanizada. (Chaves Palacio, Julián 2004).

La Revolución Industrial marca un punto de inclinación en la historia, alterando e influenciando la apariencia de la vida común de una manera u otra. La productividad tanto agraria como de la naciente industria se incrementó a la vez que se reducía el tiempo de producción. A partir de 1800 la fortuna y la renta per cápita se elevaron como no había sucedido nunca antes en la historia (Lucas, Robert E. 2003), pues, hasta entonces, el PIB per cápita se había mantenido prácticamente invariable durante siglos. (Lucas, Robert E. 2003).

Antecedentes y causas.

El comienzo de la industrialización europea se puede encontrar en la Edad Moderna. A partir del siglo XVI se distingue un progreso en el comercio, sistemas financieros, banca y un indiscutible avance técnico en la navegación, impresión o relojería. Sin embargo estos avances siempre se veían sobrecargados por epidemias, incesantes y extensas cruzadas y hambrunas que eran obstáculo para la difusión de los conocimientos modernos y un crecimiento demográfico extenso.

El Renacimiento protagonizo otro punto de inclinación con el advenimiento de las primeras sociedades capitalistas en Holanda y el norte de Italia. Es a partir de mediados del siglo XVIII cuando la nación europea comenzó a apartarse del resto del mundo y a establecer las bases de la futura sociedad industrial requerida por el desarrollo, aún antiguo, de la industria pesada y la minería, (Max Pietsch. 1961). La coalición de los comerciantes con los agricultores hizo posible el aumento de la producción, lo que a su vez determino un impulso demográfico, acentuado a partir del siglo XIX, (David S. Landes. 1980). La Revolución Industrial se determinó por la transformación de una economía rural y artesana a una comercial e industrial cuya doctrina se fundamentaba en el racionalismo, la mejora y el argumento científico. (Fernand Braudel. 1985).

El Comercio Internacional.

Economía industrial.

La revolución industrial no hubiera podido ser exitosa sin la participación y la mejora de los trasportes, quienes serían los encargados de llevar las mercancías elaboradas en la empresa hasta los mercados donde se consumían.

Estos nuevos trasportes se vuelven fundamentales tanto en el comercio nacional como en el internacional, ya que en esta época se desarrollaron los grandes bazares nacionales e internacionales. El comercio internacional se liberaliza, especialmente luego del Tratado de Utrecht (1713) que liberaliza los vínculos comerciales de Inglaterra, y otros países europeos, con la América española. Se concluye con las compañías privilegiadas y con el proteccionismo económico; y se respalda por un régimen imperialista y la supresión de los derechos gremiales. Además, se liberan las tierras eclesiásticas, señoriales y comunales, para poner en el mercado nuevas tierras y crear un nuevo juicio de pertenencia. La Revolución industrial también genero una extensión de los mercados extranjeros y una nueva división internacional del trabajo (DIT). Los nuevos mercados se ocuparon mediante la devaluación de los artículos producidos con la máquina, por los recientes sistemas de trasporte y la inauguración de vías de comunicación, así como también, mediante una un régimen de desarrollo.

El Reino Unido fue el que dio inicio a toda una cadena de transformaciones que la situaron a la cabeza de todos los países del mundo. Los cambios en la agricultura, en la población, en los medios de trasporte, en la tecnología y en las industrias beneficiaron un desarrollo industrial. La empresa textil algodonera fue el departamento líder de la industrialización y el origen del acopio de la riqueza que dará paso, en un segundo periodo, a la fundición y al ferrocarril.

Trasportes.

Fueron los medios que se revolucionaron para hacer posible la comercialización nacional e internacional, entre estos medios de trasporte los más desarrollados e importantes fueron:

• El ferrocarril:

El ferrocarril, inventado en el siglo XVIII, fue uno de los grandes intérpretes de la Revolución Industrial. En su origen se disponía de la fuerza animal como método de locomoción, los rieles eran de madera y su uso se restringía a las minas para el traslado de carbón. En un libro publicado en 1797, Carz afirmaba haber sido el primero que planeo reemplazar la madera por hierro. (Navarro, Francesc. SF). La primera aprobación del Parlamento inglés para el levantamiento de un ferrocarril —movido por caballos— se remonta a 1801; se trataba de una ruta entre Wandsworth y Croydon que tenía al menos unos 13 kilómetros

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