Para Que Sirve La Historia Empresarial

¿Qué agregarían usted a las lecturas? ¿Desde su perspectiva, qué otra utilidad y para qué más sirve la historia empresarial?

Las lecturas asiganadas para la clase de hoy son: Erro, Carmen y Francisco Javier Capistegui, “Empresarios e Historia empresarial. Algunas claves para un mutuo acercamiento”, Pasado, presente y retos de futuro, Barcelona: Ariel, 2003, pp. 173-202 , “Lo que la historia le puede enseñar sobre el futuro de su negocio. Una conversación con el experto en historia empresarial Geoffrey Jones”, en: Harvard Business Review: diciembre de 2007, pp. 46 – 51, Dávila, Carlos. “Presente, futuro y pasado en la actividad empresarial”, en: Portafolio (separata: “La academia frente a la crisis”), Bogotá: marzo 15 de 2002, pp. 20 y 22., Dávila, Carlos. “Lecciones de la historia para la nueva economía”, en: Dinero, No. 124, Bogotá: diciembre 18 de 2000, p. 72.

La historia empresarial sirve para analizar, el porque del presente desde todos sus ámbitos. Se podría llegar a creer que esta rama de la historia, solo genera conocimientos de la parte económica, pero realmente nos da un conocimiento general de las relaciones sociales, políticas y hasta culturales de un país o una región. Las diferentes interacciones entre el empresariado y las instituciones de poder, nos han hecho pensar, como es que la política ha estado dominada y guiada por las decisiones económicas, en la mayoría de los casos siendo los intereses individuales de los empresarios más poderosos, los que sobresalen.

Por otro lado como dijeron los autores de la lecturas, retomando sus conclusiones, creo que la generalidad nos muestra que para poder analizar el presente y planificar el futuro, hay que conocer el pasado, para así: no caer en los mismo errores, y dos aprender de las acciones que llevaron al éxito de una empresa o empresario. Si bien yo estoy totalmente de acuerdo con la anterior conclusión general que retomo de las lecturas, me parece que la historia del desarrollo empresarial, por lo menos centrándose en Colombia, nos da importantes insights, del porque no hemos logrado el desarrollo económico anhelado por todos, y porque nuestros momentos de industrialización tuvieron frenos que no hemos podido superar. Con lo anterior, que considero lo más importante, no me refiero a quedarnos con los brazo cruzados frente a esta información. Como próximos empresarios debemos generar cambios: institucionales, económicos, en infraestructura, en oportunidades laborales, en todas aquellas deficiencias que estudiando la historia hemos podido identificar. El estudio del la historia del desarrollo empresarial, no es un fin, es un medio de cambio, de análisis, que nos permite hilar “grueso” y “delgado”, para poder conectar casos, biografías de empresarios, hechos históricos, autores económicos, reformas institucionales, y muchas más aspectos, permitiéndonos entender en el presente que sucede e iluminándonos el camino hacia el futuro.

A la lectura de Geoffrey, yo le aumentaría hablar más de los métodos de investigación que el utiliza para conocer el pasado, si bien habla de inmiscuirse en los archivos y documentos de las empresas para poder conocer su historia, no da bases teóricas y en ningún momento nombre autores de los que le sirva a los investigadores como base de partida de su análisis.

Contrastando con Dávila en el articulo de “Presente, futuro y pasado en la actividad empresarial”, podemos ver que Geoffrey deja de lado la invitación a los estudiantes y universidades a involucrase de manera directa con la investigación de los acontecimientos individuales de diferentes empresas. Algo que se puede ver es que Geoffrey solo da ejemplos de multinacionales como Unilever y P & G, y cuando habla de Brasil habla de la empresa automotriz. Me parece importante precisar, que sus estudios en Latinoamérica no solo se deben centrar en ejemplos de las dimensiones que el nombró, sino que por su

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