Todos Santos

Todos Santos, uno de los barrios más antiguos de Cuenca

5 septiembre, 2011

La hermana Elizabeth Ochoa, animadora de la comunidad religiosa muestra las pinturas descubiertas una de las paredes de la iglesia en restauración. (COR)

Uno de los barrios más antiguos de Cuenca es el de Todos Santos, donde se edificó la primera Iglesia de la ciudad, en el lugar donde los indígenas tenían su centro ceremonial denominado Hermita del Usno (piedra sobresaliente en una colina).

Aquí se empezaron a asentar los primeros pobladores atraídos por los molinos de Núñez de Bonilla.

Según la hermana Elizabeth Ochoa, animadora de la comunidad religiosa Todos Santos, luego de la llegada de los españoles en el año 1600 aproximadamente aparece en diferentes escritos de la época el nombre de Capilla de San Marcos, que se erigió en este lugar, en honor al santo que se venera hasta nuestros días.

Posteriormente se le cambió de nombre a Iglesia de Todos Santos.

La Capilla de San Marcos se destinó para el uso exclusivo de los indígenas, en donde incluso se fundó la primera escuela para este sector de la población.

Actualmente se mantiene también un centro educativo denominado comunidad educativa Sagrado Corazón, que sirve a niños de escasos recursos de las zonas periféricas de Cuenca.

Proceso de restauración

La antigua edificación denominada complejo patrimonial de Todos Santos, que incluía la iglesia y el convento donde viven las religiosas oblatas que dirigen esta comunidad, estaba a punto de colapsar, por lo cual con el apoyo de organismos internacionales y el Municipio de Cuenca se emprendió en un proceso de restauración.

Al momento están trabajando en la Iglesia, donde se encontraron pinturas murales, bajo la pintura blanca que tenían las paredes, y que se están recuperando.

También se recuperó la zona del horno de leña de la comunidad, donde se ha vuelto a elaborar pan tradicional como las rodillas de cristo, quesadillas, entre otros.

Además se instaló un restaurante denominado también Todos Santos, y una pequeña galería que se llama Rikuna, donde se ofrece una variedad de artesanías.

James Perry de origen canadiense y su esposa colombiana María Eugenia Cárdenas, visitaron todos estos espacios, quedando fascinados por la antigua arquitectura y los espacios bellamente restaurados.

Además se deleitaron del pan tradicional en horno de leña.

Falta la Hostería

Este proyecto integral de restauración, tiene una etapa que está pendiente que es

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