Así Habló Zaratustra (Libro 1)

Así habló Zaratustra

Federico Nietzsche

“Un libro para todos y para ninguno”

Así habló Zaratustra, uno de los libros más polémicos que el filósofo Alemán Friederich Nietzsche dejo entre su obra.

“entre mis escritos, ocupa mi Zaratustra un lugar aparte. Con él he hecho a la humanidad el regalo más grande que hasta ahora ésta ha recibido”.

El libro se divide en cuatro partes que tratan de retratar las andanzas de Zaratustra a partir de que deja su aislamiento voluntario en el que adquirió demasiados conocimientos, lo que le hace decidir bajar a vagar y predicar lo que ha aprendido.

La primera parte, que abarca, desde el prólogo, hasta Los discursos de Zaratustra, es una introducción al pensamiento de este filósofo persa, habla sobre el “Superhombre”, que es un humano superior a la humanidad común, es decir, un hombre que ha trascendido; muestra también como se unen a él algunos discípulos.

La muerte de Dios es el tema central de esta primer parte y habla sobre la evolución del espíritu humano y las virtudes que actúan sobre esta, exalta la guerra, la amistad, la vida, conceptos con sentido en sí mismos y, en fin, la generosidad de la sana virtud dada. Al final de ésta parte, Zaratustra decide aislarse de nuevo.

En la segunda parte, Zaratustra está aislado de nuevo, esperando nuevos frutos, pero también podemos detectar un tema central, que es la voluntad del poder, por lo que los primeros capítulos de ésta segunda parte, son, principalmente, ataques a todos aquellos que van contra su voluntad; los compasivos, los sacerdotes, los virtuosos, los sabios famosos, la chusma, las tarántulas; en fin, todos ellos sienten aversión contra la vida y su esencia, dice que aquellos están dominados por el espíritu de la venganza.

Los capítulos con lo que concluyes ésta segunda parte, son un tanto diferente, muestran la liberación del hombre del espíritu de venganza contra la vida.

Plantea la idea del eterno retorno, lo que le horroriza y de nuevo se aísla.

Dentro de la tercera parte, que es la más extensa del libro, se amplía la idea del eterno retorno, la evolución que esto ha tenido, aunque sigue significando misterio y al parecer, para el filósofo resulta aterrador revelar lo que sabe al respecto. Zaratustra, pide a los hombres despojarse de su "gravedad" y, finalmente, dicta sus nuevas tablas de valores, que derriban los antiguos conceptos sobre el bien y el mal e invoca a la eternidad en nombre de la alegría.

Esta parte, también tiene capítulos líricos intermedios.

La tercer parte del libro termina con este fragmento:

“¡Oh hombre! ¡Presta atención!

¿Qué dice la profunda medianoche?

«Yo dormía, dormía, -

De un profundo soñar me he despertado: -

El mundo es profundo

Y más profundo de lo que el día ha pensado.

Profundo es su dolor,

El placer - es más profundo aún que el sufrimiento:

El dolor dice: ¡Pasa!

Mas todo placer quiere eternidad,

-¡Quiere profunda, profunda eternidad!»”

Da muestra del pensamiento del eterno retronó y de la esencia del mundo; esto volverá a aparecer al final de la última parte.

Zaratustra, está de nuevo en su caverna. De pronto llega a él un grito de angustia que procede de criaturas, símbolos de antiguos valores ya caducos; un adivino; los reyes, la falsedad del poder , un "concienzudo del espíritu”, el veneno del positivismo; un mago que representa la fantasía esclavizaste, un papa errabundo como la Muerte de Dios; el más feo de los hombres; un mendigo voluntario que es la búsqueda de la felicidad; el viajero y la sombra. Zaratustra saluda a éstos, los hombres superiores, y celebra con ellos “La cena” y “La fiesta del asno”. El sabio no siente ninguna compasión

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