Colombia, una de las principales naciones de oro negro

[pic 1]                        UNIVERSIDAD DE LA SALLE

FACULTAD DE INGENIERIA AMBIENTAL Y SANITARIA

IMPÁCTO AMBIENTAL

Leonardo Leguizamón 41141704

GRUPO 03

Colombia, una de las principales naciones de oro negro.

Desde hace varios años, la intervención de multinacionales ha traído a nuestro país aportes y desarrollo económico, pero a su vez nos ha generado impactos negativos tanto para nuestros campesinos como  para los recursos naturales, principalmente el agua.

Multinacionales petroleras utilizan la sísmica como método de obtención de información sobre el contenido de las capas del subsuelo  para saber si este contiene petróleo.  Pero esta sísmica tiene consecuencias negativas debido a que hay que explotar el suelo para obtener la información por medio de ondas y dicha explosión causa que el agua subterránea se infiltre hacía otros espacios más profundos generando mayor trabajo para su extracción.

Estudios afirman que tipos de técnicas de extracción de petróleo como el Fracking (extracción de petróleo de forma hidráulica) pueden generar posibles derrumbes.  En el caso de Colombia desde el 2012 se viene practicando esta técnica lo cual ha generado controversia debido a que si bien hay intereses individuales en dicha extracción también hay personas que están  en contra del Fracking como los campesinos y grupos ambientalistas.

El principal factor que tiene en contra este tipo de explotación es que implica gastar entre 9 y 26 millones de litros de agua por pozo la cual no puede ser reutilizada así como lo afirma Camilo Prieto el portavoz del movimiento ambientalista colombiano Solo puede reutilizarse un 15% de ese agua. El resto queda contaminado por los químicos con los que se mezcla: “inservible, no se puede potabilizar” y no hay tecnología para evitarlo.

En países de Europa como Francia, Bulgaria, Irlanda, Rumanía, República Checa, se ha prohibido el Fracking debido a los impactos negativos que tiene sobre el agua subterránea y el suelo , ya que como lo afirma Hipertextual Nahum Méndez Chazarra, geólogo experto en tectónica  La fracturación hidráulica produce una emisión de contaminantes a la atmósfera, contaminación de las aguas subterráneas debido a caudales de fluidos o gases provocados por escapes o vertidos, fugas de líquidos de fracturación y descargas no controladas de aguas residuales, así como la utilización de más de 600 productos químicos para liberar el gas natural.

No obstante, en Colombia el panorama no es muy alentador ya que se necesitan más estudios sobre sus recursos naturales especialmente del suelo del cual no se tiene mucha información porque lastimosamente las que tienen conocimiento de este recurso son empresas privadas que muy rara vez comparten la información de sus estudios tal como lo plantea  Brigitte LG Baptiste         Las empresas que desarrollan actividades petroleras o mineras tienen mayor conocimiento que no necesariamente es público lo cual representa una desventaja porque esta información tan importante se la está guardando los privados y simplemente entidades como la ANLA que es la encargada de otorgar las licencias ambientales debería tener conocimiento previo. 

Es cierto que lo que no se puede cultivar hay que extraerlo, pero hay que hacerlo de la mejor manera posible usando técnicas adecuadas de extracción ya sea de petróleo o de cualquier  mineral porque de igual manera necesitamos de estos recursos para nuestra sobrevivencia.

Hay algo que debemos tener claro y es que la industria petrolera genera un gran aporte de ingresos a la economía de nuestro país, pero la pregunta sería, ¿Realmente dichos aportes suplen el monto de las afectaciones a nuestros recursos y a los campesinos que se han visto en la necesidad de abandonar sus tierras porque ya no cuentan con los recursos necesarios para llevar a cabo un buen cultivo?; es en este punto donde nosotros como colombianos debemos tomar una decisión y pensar si es necesario dejar el petróleo en el subsuelo o convertirlo en un recurso para el bienestar de nuestra nación y de las generaciones futuras.

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