Dimenciones Escolares De Elsie Rodwell

Elsie Rodwey, investigadra del CINVESTAV nos describe la experiencia escolar cotidiana mexicana en su libro De huellas, bardas y veredas: una historia cotidiana en la escuela. Hace mención de cinco dimensiones que ella crea para abordar la práctica docente.

La primera dimensión es la estructura de la experiencia escolar. A pesar que la diversidad de escuelas es muy amplia todas se rigen bajo un reglamento único y agrupan a los alumnos bajo distintas percepciones, esta agrupación causa diferentes sentimientos entre los alumnos pues unos se sienten rechazados mientras que otros pueden mejorar su autoestima. El tiempo escolar está organizado de manera que se cumpla no solo con ejercicios escolares sino con actividades paralelas, sin embargo, es muy flexible y muchas veces no obedece con las disposiciones oficiales. Dentro del aula existen diferentes formas de participación, una de ellas se da de manera horizontal, es decir, los alumnos comentan entre ellos los contenidos, se ayudan y despejan dudas.

La definición escolar del trabajo docente es la segunda dimensión que abarca la experiencia como punto central del desarrollo de la práctica del profesor, la cual tiene una delimitación bastante amplia pues rebaza la función de maestro. Los libros de texto gratuitos juegan un papel importante en la presentación del conocimiento escolar, son guía de la secuencia de contenidos y tienden a seguir la práctica tradicional.

La tercera dimensión es la definición escolar del aprendizaje que describe los rituales y usos que la autora observó. El docente da instrucciones para adquirir el conocimiento aunque también existen prácticas alternativas como concursos de redacción libre en los que se refleja la expresión original de los estudiantes. Para Elsie R. fue difícil estudiar los procesos de razonamiento, no obstante, observó cómo los alumnos asociaban los fenómenos físicos con sus conocimientos previos. Con respecto al conocimiento autónomo, el estudiante encuentra límites si no se enfrenta a situaciones en las que pueda experimentar.

La cuarta dimensión la engloba como la transmisión de concepciones del mundo. Los valores son enseñados mediante actividades como ceremonias y actos cívicos que no siempre son significativos para el alumno. La autora describe cómo el alumno aprende a seguir reglas mediante juegos, con estas reglas el niño aprende la negociación.

Como última dimensión está la transformación de la experiencia escolar. Aunque hay una resistencia al cambio las escuelas se transforman ya que son entes sociales, van cambiando debido a los fenómenos políticos y sociales. Para comprender la transformación es necesario hacer un análisis minucioso de la cotidianidad escolar.

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