El Juego De La Vida

EL JUEGO DE LA VIDA Y COMO JUGARLO

El libro nos habla acerca del optimismo y de su contraparte la negatividad pues dice que si tenemos una mentalidad positiva atraeremos cosas buenas a nuestra vida y si se tiene una mentalidad negativa, las cosas malas terminaran por atormentarnos, pues el subconsciente siempre esta susceptible a todo tipo de pensamientos que tenemos, además de que los pone como metas a las cuales debemos llegar.

De la misma manera como atraemos lo que pensamos, lo mismo pasa con el dinero. El libro lo llama “la ley de la prosperidad”, que hay que actuar de tal manera que parezca que tenemos abundancia, siempre con la fe de que esa abundancia no se acabará, es decir, gastar dinero como si tuviéramos suficiente; de esa manera, aunque físicamente carezcamos de esa abundancia, con la sola fe de alguna u otra manera atraeremos prosperidad económica.

Según el libro, el subconsciente no entiende de bromas y platicas que no sean reales y por lo tanto hay que tener cuidado con las cosas que decimos y las cosas que pedimos pues nuestras palabras pueden ser muy poderosas. Por eso hay que hacer un buen uso de la palabra, pues podríamos a llegar a hacer mucho daño si no pensamos las consecuencias antes de hablar.

También nos habla de algo muy mencionado y muy interesante, y que puede llegar a influenciar en muchas cosas de nuestra vida, el Karma, el cual se puede resumir en la frase “uno cosecha lo que siembra”, lo que quiere decir es que si nosotros, por ejemplo, damos odio pues las personas nos van a odiar, y si damos amor y respeto las personas nos trataran con amor y respeto, es decir, todo es reciproco.

Para desecharnos de la carga debemos de limpiar toda la negatividad en nosotros, aquellas palabras o pensamientos que dañen a otros; es más, hasta a los enemigos deberemos de tratarlos bien pues seremos recompensados, ya sea, espiritualmente, económicamente, etc.

Siempre deberemos de tener en el lugar más alto de nuestros milagros a Jesucristo pues él es el que guía nuestro camino, pues al tener algún objeto material al cual le atribuimos buena suerte, vamos a perder esos tipos de milagros por no tener fe en él. Deberemos pensar que los objetos que digamos que son de la buena suerte es porque él nos los ha enviado para que tengamos siempre en cuenta a Jesucristo.

Sobre el amor nos dice que no pidamos el estar con alguien que nos guste físicamente, mejor que pidamos por encontrar a la persona ideal con la que compartiremos ese sentimiento tan hermoso que es el amor pues no con cualquier persona se puede llegar a tener un amor mutuo en el que la persona haga todo lo posible por el bien de su pareja y esté hasta dispuesto a dar la vida por la necesidad de su amor.

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