El Principe De Maquiavelo

Introducción

Se dice que quien quiera gobernar y mantenerse en el poder debe tener presente la obra de Nicolás Bernardo de Maquiavelo, El Príncipe. Ya que en dicha obra están los consejos del autor para lograr la satisfacción de un gobernante y de su pueblo. Este libro podría resumirse en las palabras “manual para conquistar, dirigir y mantener un estado”.

Cabe destacar que El Príncipe fue escrito en pleno renacimiento italiano, época en la que los estados de dicho país no estaban unidos y algo así, podría llegar a converger en una destrucción total del país.

Claramente vemos que el libro fue escrito para Laurentio De Medicci, ya que se encuentra en la dedicatoria. Por ende es fácil asumir que este “manual” es una obra consejera para el Príncipe Florentino a quien le dedica el libro. De esta forma intenta llegar a la idea del deber formar un estado unificado y fuerte que sea gobernado por un solo príncipe. Hecho que no había sucedido debido a las malas administraciones anteriores en Italia.

Así mismo, el libro puede resumirse en una frase conocida por muchos: “El fin justifica los medios”. Esta frase se le atribuye a esta obra, aunque nunca es mencionada en él. No obstante las intenciones de Nicolás Maquiavelo son válidas, acorde a la situación Europea a fines del siglo XV, y además convergen en tradiciones bélicas de dicha época, es digno de destacar que el adjetivo “maquiavélico”, utilizado como algo retorcido y malicioso, no es algo merecido por el autor. Esto se debe a que su pensamiento debe ser analizado en su totalidad, ya que lo que en realidad cree que es mejor para el pueblo es, ni más ni menos, que una república.

El Príncipe

Si lo que separa a la raza humana de los animales es la racionalidad y el pensamiento, bien podemos decir que nos une la supervivencia del más apto. Charles Darwin hacía referencia a que en la competencia por la subsistencia de una especie, sería el más fuerte o quien se adaptara más rápido al medio el que sobreviviría.

Los lobos, las hienas o los leones, entre muchos otros, tienen un líder que es el que domina. Lo hace debido a su fuerza e inteligencia, aunque su poder no es perenne ya que al volverse viejo será derrotado por un animal más joven que tomará el poder. Para los hombres la situación es similar, alguien que esté al frente de un estado podrá perderlo todo si no sabe cómo perpetrar su poder y su linaje.

El Príncipe plantea la forma en que se debe llegar al frente de un estado, aunque muchas de sus ideas son poco éticas. La guerra y la violencia son los principales caminos para concebir un estado y mantenerlo en pie. Con el derramamiento de la sangre enemiga se obtiene la rendición y la conquista del territorio deseado. Si el principado anexado tiene soberano y descendientes, todos deben ser eliminados ya que un soplo de posibilidad de levantamiento existiría si un hijo del trono quisiera lo que le corresponde. Si el pueblo no estaba acostumbrado a vivir libre, será más fácil la toma de poder y con el tiempo, el apoyo de los súbditos. Siempre y cuando se respeten sus leyes y cultos.

La conquista podrá ser fácil o difícil. Si el principado es gobernado por un príncipe y sus nobles, existen más posibilidades de corromper a algunos de ellos. Si un estado es corrupto la traición servirá para debilitarlo y así conquistarlo fácilmente. En cambio, si es el príncipe quien tiene poder absoluto de decisiones, la complejidad será mayor.

No basta con derrocar un gobierno y erigir uno propio, una nueva tarea se presenta, que es la de mantenerse en el poder. El pueblo debe estar del lado de su regente. ¿Es mejor ser temido o amado? Según Maquiavelo, un príncipe bondadoso y compasivo será mejor visto por sus súbditos, aunque esto puede denotar a un hombre débil que le falta mano dura. La voluntad de ser amado no es propia de uno mismo, sino los demás. Es el otro el que elije amar u odiar, en cambio es la propia persona la que puede lograr ser temido o no. Es más fácil ser temido que ser amado.

La creación de colonias es una excelente idea, según el autor, para perpetrar el poder. Será beneficioso ya que además de reducir gastos, dará ganancias. Deberá haber un administrador de la colonia, tal vez un noble de confianza del príncipe que sea el nexo de comunicación entre el pueblo y su regente principal. Aunque habrá que tener cuidado que el

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