ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

MAQUIAVELO PRINCIPE


Enviado por   •  13 de Diciembre de 2013  •  1.174 Palabras (5 Páginas)  •  351 Visitas

Página 1 de 5

RESUMEN DE EL PRINCIPE.

Capítulo XV:

Un hombre que quiera hacer profesión de bueno entre tantos que no lo son será perdido, por lo que el príncipe deberá aprender a no ser bueno de acuerdo a la necesidad. Si bien seria lo ideal que el príncipe posea todas las buenas cualidades que pueden existir, en la realidad le es imposible y por este motivo tendrá que evitar la vergüenza de aquellas cualidades que le podrían hacer perder el estado y de ser posible aquellas que no, aunque a veces una virtud puede causar la ruina y un vicio trae bienestar y seguridad.

Capítulo XVI:

La prodigalidad o gasto en lujos perjudica si se usa para “fanfarronear”, si es bien practicada, incluso se puede pensar que uno es todo lo contrario. Si se genera este tipo de actitud se obliga a si mismo a continuar realizándola, consumiendo todos sus recursos y al quedarse sin estos, a consumir a través del pueblo y sus impuestos cosa por la cual será odiado. Si decide cambiar su postura será llamado tacaño, lo que convendrá con el tiempo ya que aumentaran los recursos para la guerra y no tendrá que incrementar los impuestos, por lo menos no de manera excesiva y será llamado prodigo por practicar la generosidad con todos a los que no quita nada. Es preferible tener vergüenza pero sin odio, a ser odiado por los súbditos.

Capítulo XVII:

Todos los príncipes deben desear ser tenidos como clementes y no por crueles, aunque no debe preocuparse por que le digan que es cruel, siempre y cuando tenga por objeto mantener la unión y le fidelidad de sus súbditos. Con pocos castigos ejemplares que sean contra pocos será más clemente que aquel que por no ser cruel permite que se sucedan desordenes, matanzas y saqueos que perjudican a toda la población. Sin embargo debe ser moderado, prudente y humano.

Es más seguro ser temido que amado, ya que los hombres son ingratos, volubles, simuladores, cobardes ante el peligro y ávidos del lucro. El amor es un vínculo de gratitud que los hombres perversos por naturaleza rompen cada vez que puedan beneficiarse mientras que el temor es miedo al castigo, que no se pierde nunca.

No es imposible ser temido y no odiado, bastará con no apoderarse de los bienes ajenos ni las mujeres de sus súbditos, así como no matar a alguien sin justificación y motivo. “Los hombres olvidan primero la muerte de su padre que la pérdida del patrimonio”.

Capítulo XVIII:

Los príncipes más alabados son aquellos que cumplen sus promesas, pero suponiendo que hay dos formas de actuar, con las leyes y con la fuerza, a menudo la primera no alcanza y se debe recurrir a la segunda.

Conviene que el príncipe sea como un zorro para esquivar las trampas y como un león para espantar a los lobos (el zorro no se protege de los lobos ni el león de las trampas). Hay innumerables ejemplos de tratados y promesas rotas, en las cuales el más zorro ha sido el vencedor, pero hay que saber disimular.

Está bien mostrarse piadoso, fiel, humano, recto y religioso pero se debe estar dispuesto a ir al otro extremo de ser necesario, adaptándose a las circunstancias y no alejándose del bien mientras sea posible.

Por este motivo es fundamental que el príncipe se muestre con esas virtudes, aunque nunca sin estas, ya que “todos ven lo que pareces ser pero muy pocos saben lo que eres realmente” y estos pocos no se atreven a oponerse al resto, a la mayoría.

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (6.8 Kb)  
Leer 4 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com