Resumen La Noche del Meteorito
Diego Vera LermandaSíntesis17 de Mayo de 2023
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LA NOCHE DEL METEORITO
AUTOR: FRANCO VACCARINI
EDITORIAL: SM
Capítulo 1: ANIMALES.
Valentino es fanático del Museo de Ciencias Naturales (lo visita casi todas las tardes) desde que sufrió el zarpazo de un Monstruo de Gila en el zoológico (que es una fea y horrible lagartija de bellos colores). Gabriel y Mechi lo acompañaban ese día. Le encantan los mundiales de futbol. Es hincha de River Plate. La historia se está escribiendo antes del Mundial de Alemania 2006. Ir al Museo es su entretenimiento favorito. Su héroe es Carolus Linnaeus, un naturalista Sueco que vivió en el siglo XVIII. Lo que más sabía era acerca de los tres meteoritos que estaban en el vestíbulo del Museo. A Valentino le gusta el Rock, aunque no tiene oído para la música. Su mejor amigo hombre es Gabriel.
Capítulo 2: MI FAMILIA, LAS MOMIAS EGIPCIAS Y EL DESODORANTE DE AMBIENTES.
El protagonista se llama Valentino Bravard, y vive en la Avenida Gallardo (Buenos Aires, Argentina) en un edificio un poco antiguo, con habitaciones amplias y mucha luz, en el departamento ‘B’ del piso 6°. Desde la ventana de su dormitorio puede ver el Parque Centenario y el Museo de Ciencias Naturales. Su papá es Ingeniero Agrónomo, y pasa mucho tiempo en el campo. Su Mamá es profesora de Historia, trabaja en varios colegios, es acelerada aunque tiene buen humor, es una bola de energía, gritona, le gusta fumigar las piezas con desodorante ambiental porque le tiene terror a los olores. La Nana se llama Felipa, es tranquila, tiene el pelo negro, es muy delgada, y le gusta cantar mitad castellano y mitad guaraní.
Capítulo 3: LA PELOTA DE TENIS COLOR NARANJA.
Valentino tiene un gato llamado Ruperto, que un día comenzó a jugar con una pelotita peluda de color naranja. Con el desodorante ambiental, la pelotita comenzó toser y a estirarse. Tenía bracitos de pulpo, algo parecido a una boca y tenía tres pares de ojos (o sea, tenía 6 ojos). Cuando Valentino se da cuenta, se desmaya.
Capítulo 4: UN PEDIDO DE AYUDA.
La pelotita naranja hablaba, parecía un varón. Su nombre era Sancho Fragancia Bebé, y le pidió ayuda a Valentino.
Capítulo 5: EL UMBRAL DEL ASOMBRO.
Sancho hablaba en castellano antiguo, y era amigable. Venía de TITÁN, la luna más grande de Saturno. Sancho aprendió a hablar así gracias a los libros que estaban en el escritorio de Valentino, entre ellos El Quijote de La Mancha. También aprendió leyendo las cartas que su papá le enviaba a sus clientes. Sancho buscaba meteoritos, y sabía que a Valentino también le gustaban, por lo que él era la persona más adecuada para ayudarlo. A Sancho le gustaba la palabra ‘Bellaco’. En el Museo había un meteorito que se llamaba ‘El Toba’ de 4.000 kilos de peso y que estaba hecho en un 90% de hierro.
Capítulo 6: EL UNIVERSO Y LAS ABEJAS.
Valentino se va a la escuela. Tenía muchas ganas de contarle lo de Sancho, a Mechi (su amiga del alma). Quería sorprenderla. A Mechi la había picado una abeja en la cara, por lo que la tenía hinchada. Valentino se lo va a contar a la salida de la escuela.
Capítulo 7: ESCALOFRÍO.
Mechi tenía la virtud de escuchar una historia siempre que ella fuera intrigante (misteriosa). Valentino le contó que tenía un extraterrestre en su casa, pero al principio Mechi no le creía. Mechi tiene ojitos orientales que le gustaban mucho a Valentino, tenía el pelo castaño y lacio (liso). Además, arruga la nariz cuando se pone impaciente. A Sancho no le gustaba el desodorante ambiental: era veneno para él.
Capítulo 8: MECHI, LA MARAVILLOSA.
Mechi va a la casa de Valentino. Al principio no encontraban la pelotita naranja, pero después Mechi se da cuenta que Sancho los estaba mirando desde el escritorio. A diferencia de Valentino, Mechi no se desmaya. Valentino piensa que Mechi es maravillosa porque tomó la situación con mucha naturalidad.
Capítulo 9: SALVAR UN MUNDO CUALQUIERA.
Sancho les mostró la computadora donde había archivado notas de diario en que se informaba del descenso de una sonda terrestre en Titán. La NASA y la AGENCIA ESPACIAL EUROPEA (las dos principales agencias espaciales del mundo) habían mandado un vehículo espacial a un satélite a Saturno. Titán es la mas misteriosa de las lunas de Saturno. Tiene una composición química similar a la que tenía la Tierra hace 3.800 millones de años atrás. La sonda se llamaba HUYGENS, y viajaba sobre su nave nodriza CASSINI, de la cual se separará el día de Navidad. La sonda Huygens descendió exitosamente sobre Titán el día 14 de Enero de 2005, y tanto durante su descenso como después de posarse sobre la superficie de Titán, enviaba muchísimos datos a los científicos que estaban en la Tierra. Sancho explicó que la llegada de la sonda Huygens había provocado reacciones químicas complejas en la atmósfera de Titán (una epidemia) y que toda la vida allí estaba amenazada. Solo tenían una sola forma de salvarse: conseguir un elemento muy escaso en el Sistema Solar. Ese elemento se encuentra dentro de algunos meteoritos, más precisamente dentro de El Toba. El elemento que buscaban era la ‘Esencia’, es decir, el ‘alma’ de El Toba. Sancho dice que su mundo se estaba muriendo por la culpa de los científicos de la Tierra que enviaron la sonda Huygens. Sancho les dice a Valentino y Mechi que ahora a ellos les toca salvar su mundo. Sancho dice que la población de Titán vive debajo de la superficie, muy por debajo de la corteza (en ciudades subterráneas), porque sobre la superficie todo se marchitaba.
Capítulo 10: NOSOTROS.
Valentino dice que Mechi le gusta. Además, Mechi es capaz de pensar con frialdad aún en las situaciones mas complicadas, ya que es organizada y práctica. Sancho les pide a los chicos lo siguiente: para la próxima luna llena (es decir, en 2 dias mas, o sea el próximo Sábado) deben ir al Museo a media noche, y así cuando El Toba libere su esencia ellos la recogerán, y terminarán con la epidemia de Titán. Sancho les pide ir a conocer el Museo mientras tanto.
Capítulo 11: VISITA AL MUSEO.
Sancho no parecía tener necesidad de alimentarse. Don Luis era el Boletero del Museo de Ciencias Naturales. Era un hombre bajo y gordo (daba la impresión que podía rodar sin problemas). Siempre vestía una vieja camisa de lino arrugada. Como Valentino iba casi todos los días al Museo, se conocía muy bien con Don Luis. El animal que más le gustaba a Mechi eran las ballenas. A diferencia de otros meteoritos, El Toba no tenía líneas rectas entrecruzadas o ‘Figuras de Widmanstatten’ (los expertos no sabían por qué ese meteorito no las tenía). Dentro del Museo, Sancho le pidió a Valentino que lo sacara del bolso donde lo transportaba porque quería tocar a El Toba, ya que quería estar seguro que le iba a servir para acabar con la epidemia de Titán (es decir, quería estar seguro que este meteorito tenía alma). Sancho dice que si las figuras no estaban en el meteorito, entonces la esencia sí estaba dentro de él.
Capítulo 12: EL HURACÁN MAMÁ.
Sancho no quería llevarse el meteorito a Titán: sólo quería aspirarle su alma. La mamá de Valentino quería mucho a Mechi y la encontraba muy linda. Mechi le recuerda a Valentino que mañana estará de cumpleaños.
Capítulo 13: LA FIESTA DE CUMPLEAÑOS.
Valentino no dejaba solo a Sancho en la casa, y lo llevaba a todos lados. Valentino fue a una casa de regalos y compró un par de aros para Mechi en su cumpleaños. La casa de Mechi era linda, y tenía 2 pisos. Uno de los invitados al cumpleaños era un chico al que llamaban ‘Lobo’: era pedante (cachiporra, vanidoso), rubio, alto, ojos celestes, y tenía su propia banda de rock: Ñandú. Gabriel, el amigo de Valentino, siempre le encontraba a todo el lado cómico. Al terminar la fiesta a media noche, Valentino se volvió solo a su casa, que estaba a tres cuadras de distancia. De pronto, un hombre de impermeable y acento francés se cruzó en su camino. Era inmenso de alto (2 metros), y ancho como una pared. Se llamaba Jean-Pierre Platini y era Investigador de la Agencia Espacial Europea. Quería hablar con Valentino en el parque.
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