Inferno, una triste verdad

Inferno, una triste verdad.

Sorprendentemente la película “Inferno”, era una en la que no tenía expectativas altas. Había sido obligado a ir al cine para verla, por lo cual mi disposición no era mucha. Una vez adentro de la sala tuve una sorpresa, casi no había gente, una película con 2 o 3 días de haberse estrenado, ¿Qué podía hacer? Parecía ser una película poco prometedora. Claramente parte de todo esto fueron sus precuelas “El código Da Vinci” y “ángeles y demonios”. Si bien la primera película es increíble, la segunda no fue de mi agrado, dejando de lado el gusto por el personaje Robert Langdon.

Una vez que termine de ver la película quede perplejo, me pareció increíble que, con semejante temática, con tan excelente desarrollo la gente no apreciara la película. Me pregunte ¿será por sus precuelas?, ¿la gente pensara lo mismo que yo?, o ¿será que la temática es demasiado dura para las familias? Todas preguntas sin respuesta en ese momento.

La película tiene como temática principal un problema social actual, algo a lo que la mayoría de gente tememos, esto es “la sobrepoblación mundial”. A pesar de que este tema es bastante polémico, además por obviedad es del dominio público, creo la sociedad, el mundo, no suele hablarlo con el realismo necesario.

Presentando el final.

La película inicia con un discurso, o parte de este, es aquí donde el personaje Bertrand Zobrist expone su argumento, usando las siguientes palabras “Le llevo a la población mundial 100 000 años llegar a los mil millones, y solo 100 años más alcanzar los 2000, y solo 50 años duplicarlo. Estamos cerca de los 8 mil millones. Estamos destruyendo la base en la que se sostiene la vida todos los males globales que afectan al planeta tienen su origen en la sobrepoblación humana. Por qué nadamos en negligencia, deforestamos, desechamos, consumimos, destruimos. La mitad de las especies de la tierra se han esfumado en los últimos 40 años y seguimos atacando al medio ambiente, necesitamos una catástrofe para aprender la lección, una catástrofe que llame nuestra atención, nada modifica una conducta como el dolor, tal vez el dolor nos salve.” (Inferno, 2016). Dentro de mí, estas palabras me dejaban perplejo, como podía alguien hacer un guion tan crudo, tan directo, en una temática tan sensible.

El personaje de Bertrand Zobrist además nos ataca con una pregunta “Hay un interruptor, si lo accionas la mitad de la población mundial morirá, pero si no lo haces la raza humana se extinguirá en 100 años ¿qué es lo que harás? La humanidad es un cáncer dentro de su propio cuerpo, ¿amas lo suficiente la humanidad para salvarla?” (Inferno, 2016). Seguido de esto el personaje se dirige a una persona, la cual no estará identificada, pidiendo que libere a inferno si es que él llega a perecer. Este cuestionamiento, poco o nunca antes presentado en filmes, además de la petición que realiza, nos lleva a sobreentender lo que es Inferno.

Sin duda es un problema que se maneja mucho en la actualidad, el problema con el consumo humano. Sin embargo, casi ningún otro material ataca esta temática tan directamente, o por decirlo de otro modo, con ideas tan radicales. Un ejemplo de esto podrían ser los filmes: Wall-E. Como olvidar al pequeño robot que se quedó solo en un mundo deshabitado, un mundo lleno de basura en el cual las plantas ya no crecían, la vida ya no existía, y los problemas ambientales eran comunes además de catastróficos.

El día que la tierra se detuvo. En donde una raza alienígena viene a conocer el mundo, observar a la especie dominante y es recibida con agresión militar, esto provoca una mala percepción de la humanidad, lo cual conduce a una solución. Se comienza un proceso para aniquilar a la raza humana y salvar a todas las demás especies que habitan el planeta, respetando así la vida desarrollada y acabando con el conflicto. Sin embargo, el alienígena detiene este plan al darse cuenta de que la raza humana tiene también sentimientos, acciones y consecuencias positivas, dejando únicamente un P.E.M. (Pulso electro magnético), para frenar el daño a la tierra.

Después de la tierra, en donde el planeta tuvo que ser deshabitado por los humanos. Estos exiliaron a otro planeta tras destruir el medio ambiente y casi provocar su extinción, regresar por un casual accidente y descubren que la tierra, como cualquier otro cuerpo con vida, ha desarrollado métodos para evitar la vida humana.

El dador de recuerdos. Aunque no es su temática central, casi toda la historia referencia a este problema. Una sociedad se aísla dentro de límites en la tierra para prosperar. Esto se realizó quitando las emociones de las personas, además de crear roles para cada uno, en otras palabras, se sistematizan las vidas, se convierten

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