LA CIVILIZACION DEL ESPECTACULO

LA CIVILIZACION DEL ESPECTACULO.

CAPITULO 2: BREVE DISCURSO DE LA CULTURA.

Este capítulo básicamente nos plantea un panorama general sobre la situación de la cultura en la sociedad contemporánea. La primera impresión que me genero el texto es la facilidad de oponerse a muchas de las ideas planteadas por el autor con el fin de hacer el esfuerzo de no aceptar una realidad que no queremos vivir, pero que sabemos que está ahí, y mas que eso el pensar que hacemos parte de esa contribución a la continua distorsión de la cultura, al final puedo decir que mi lógica y análisis no permitió que ese esfuerzo ganara, ya que es más fuerte lo que constantemente observamos en la sociedad que lo que queremos creer de ella solo para hacernos sentir mejor y creer que vivimos en lugar paralelo en el que realmente nos encontramos

En principio puedo decir que las ideas de este capítulo pueden ser entristecedoras y desalentadoras al momento de relacionarlas con el futuro, ya que nos muestra claramente situaciones que muchos vemos pero no decimos, incluso siendo participes de ella, el texto nos lleva a deducir claramente que ahora el principal espacio que tenemos en nuestras vidas está dedicada a el ocio, el entretenimiento, la diversión, somos un blanco fácil y el principal motor de que funcionen las técnicas de publicidad, el auge del capitalismo, la creciente banalización del arte ya que lamentablemente en lugar de triunfar la literatura y el arte con sentido y motivación, lo hagan los productos extravagantes, vacios, y fáciles. Todo lo anterior agregándole otros factores más como el que menciona el autor en su obra y es que ya no hay un criterio universal de belleza, o de lo que podemos calificar como el buen arte, si sumamos todo esto que esta descrito a grandes rasgos, solo nos va a dirigir a una consecuencia y es en la que enfatiza el autor: que triunfe el amarillismo, el frivolismo, la banalización y creer que todos tenemos cierto grado de cultura así nunca hayamos leído un libro, analizado una obra de arte o contribuido a la literatura. Honestamente no me parece perjudicial la clasificación clara e inequívoca que había en el pasado de alta cultura y baja cultura, era algo necesario, común, que en principio relacione con la discriminación pero luego de verlo desde otro punto de vista me di cuenta que no es así, ya que precisamente uno de los problemas actuales con la extinción de la cultura, o la distorsión de su significado ha sido precisamente eso: la perdida de esa clasificación tan marcada como estaba antes, y gracias a ello es que ahora nos atrevemos a señalar todo como manifestación de cultura.

No culpo al ser humano de que una de sus prioridades sea el entretenimiento y la diversión porque incluso yo estoy en esa lista, lo que me parece desalentador es que seamos un publicó fácil de complacer y más aun que los autores de los productos literarios y artísticos tengan una sola finalidad: divertir, supongo que eso sucede así para complacernos pero deberían ser un poco más inteligentes y no seguir alimentando el panorama actual e intentar hacer una mezcla de ambas cosas: diversión y cultura, pienso que no son excluyentes y es hasta una interesante combinación. Aunque afortunadamente puedo decir que hay productos que incluyen esos dos factores, pero…desafortunadamente no son mayoría.

Finalmente puedo decir que el último interrogante que me surgió al leer este capítulo fue: ¿qué va a suceder en el futuro con la cultura? Desaparecerá?

Y más que un interrogante es una preocupación, porque si nos detenemos a observar la situación no es alentadora, que le deparara la sociedad a nuestros descendientes, a que otras manifestaciones nos atreveremos a llamarle cultura, y a qué clase de personas le daremos en calificativo de “cultos”, Porque es obvio que si el panorama actual esta de tal forma en la que una pieza de la santa

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