La música, algo más que una combinación de sonidos

“La música, algo más que una combinación de sonidos”

Hoy día, la música es algo cotidiano, no pasa una semana en la cual no escuches una de tus canciones favoritas, es algo tan complementario, y a la vez, se ha vuelto tan necesaria, al grado de causar estrés sino escuchamos un poco de música en unos cuantos días. La música nos acobija en sus sonidos, nos apasiona con el timbre de las voces, hace que sintamos desde la alegría hasta sentimientos de rabia, euforia, coraje desprecio y hasta en sus palabras coloquiales “sentimientos de ardidos”.

La música nos invade, nos atrae, es tan poderosa que de alguna u otra manera nos conquista, ya que, es tan diversificada que no hay por donde no empaparse de gustos, géneros, cantantes o notas musicales. Ésta está tan arraigada al oído humano, y con toda certeza, sin alguno temor a equivocarme, que “no hay una fiesta sino hay música” o como dice mi abuela “sin música no es fiesta”. Pero no sólo nos atiende en las fiestas, sino en los momentos más dolorosos y oscuros, cuando nos disgustamos de las personas, cuando perdemos lo que tanto amamos, si hablo del desamor por los seres que queríamos, es cuando nos proyectamos en la letra de la canción.

 Hablando de la compañía que nos hace la música, quisiera reiterar que la música no es algo cultural de los últimos años, sino todo lo contrario. La música ha estado presente desde tiempos de los cavernícolas, donde el golpeteo de ciertos materiales les causaba un especial sentimiento, anterior mente utilizaban la música como ritual para ir a la cacería y tener suerte con las presas.

Como es importante notar la música está presente en situaciones o actividades esenciales para las personas, ya sea para rituales o simple gusto personal. Pero la música no está presente solo en las personas, también es utilizado por los animales como medio de comunicación entre ellos mismo.

La música hace más que llenar los sentidos y distraernos, también es causa de inspiración y pación por los gustos. La música ha sido clave para la inspiración de una infinidad de personas, ya sea para el trabajo propio o la vida misma, ya que con sus ritmos y letras son capaces de inspirar cualquier deseo escondido o imposible que se tenga.

La prueba de que la música es capaz de mover a las personas con sus melodías es la de infinidad de grupos musicales que luchan por hacer escuchar sus melodías y compartir con todas las personas esos sentimientos que se tienen escondidos. Es el compartir vivencias con las cuales las personas se sienten identificadas unas con otras.

Es esto lo que hace a la música un arma de doble filo, algo que se puede usar para bien o para mal, ya sea para atacar a alguien o como consuelo de rachas difíciles que se tienen.

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