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Análisis macroeconómico

Frente a la crisis, la reacción de consumidores y empresas en el mundo fue de cautela en sus decisiones de gasto. Así, el gasto que más se ajustó fue el correspondiente a bienes durables (vehículos, maquinaria y electrodomésticos), debido a que dependen en gran medida del acceso al crédito y/o pueden considerarse bienes suntuarios. Este proceso afectó en mayor grado a países especializados en la producción de estos bienes, como es el caso de Alemania y Japón.

Entre los países de Latinoamérica, México y Brasil han mostrado las mayores contracciones de la producción por su mayor especialización en bienes durables.

Sin embargo, la economía peruana sigue creciendo aunque a un menor ritmo, a pesar del fuerte ajuste observado en la demanda global.

La producción sigue mostrando tasas de crecimiento positivas, en gran parte, debido a que el recorte del gasto privado ha sido mayor en bienes durables, los cuales no representan producción nacional.

Los consumidores peruanos también reaccionaron frente a la crisis ajustando sus gastos en bienes durables. Esto se tradujo en menores importaciones, ya que estos bienes son producidos principalmente en otros países. Mientras que la compra de bienes de primera necesidad, que representa esencialmente producción local, no se vio seriamente afectada.

El gasto de inversión fue fuertemente ajustado ante el endurecimiento de las condiciones de financiamiento y las menores expectativas de crecimiento de los empresarios, especialmente en lo relacionado a ampliación o construcción de nuevas plantas. Esto ha significado un ajuste de mayor intensidad en importaciones de maquinaria y equipo para la industria que en bienes de este tipo de origen nacional.

Por otro lado, el rápido deterioro de las expectativas sobre la demanda llevó a las empresas a reducir y, en algunos casos, paralizar su producción con el fin de utilizar inventarios acumulados para satisfacer sus pedidos. Estos ajustes se han traducido en una menor demanda de insumos que ha afectado más al componente importado que a la producción del sector manufacturero local. De este modo, mientras que la producción local de bienes intermedios se redujo 10,9% en el periodo marzo-abril, las importaciones reales de insumos se contrajeron 36.6%.

En suma, la producción en Perú ha sido la más resistente frente a la crisis en la región, debido a que el tipo de gasto que se ha ajustado con mayor intensidad corresponde a productos importados. Esta dinámica, junto a la moderada recuperación de las exportaciones respecto del primer semestre 2009, ha permitido que la balanza comercial muestre un superávit de US$ 1,210 millones entre enero y mayo de este año.

Análisis Sectorial

En el primer semestre 2009, el precio promedio mensual de la harina de pescado se mantuvo entre los US$ 950 y US$ 1,050, indicando un ligero retroceso respecto a lo máximos alcanzados en el 2008 (US$ 1,140).

Las condiciones favorables de la demanda de harina de pescado pueden sostener un ligero aumento adicional de precios en lo que queda del 2009, estas condiciones no se replicarían en el caso del aceite de pescado crudo.

El precio de la harina de pescado ha sido de los menos afectados por la crisis mundial entre los commodities.

La cotización promedio de la harina de pescado en el período enero-mayo del 2009 fue 7% menor que la cotización promedio en el mismo periodo del 2008, mientras que el precio promedio del aceite de pescado crudo cayó 45% entre los períodos mencionados.

Las tendencias distintas que han mostrado los precios de la harina y aceite de pescado se explican principalmente porque presentan factores de demanda diferenciados, a pesar que ambos son requeridos más por la acuicultura.

La harina de pescado se dirige crecientemente a China, principal consumidor mundial e importador de este insumo, donde es usada para la producción de langostinos, tilapia y carpa. Su producción acuícola está orientada en un 85% a su mercado interno, lo cual ha contribuido a que la economía china mantenga un crecimiento fuerte a pesar de la crisis.

Un factor coyuntural adicional que ha contribuido en la fortaleza del precio de la harina de pescado ha sido la menor oferta mundial de soya ante las malas condiciones climáticas en Argentina.

Por otro lado, cerca del 70% del aceite de pescado crudo consumido por la acuicultura es requerido en Chile y Noruega para la producción de salmones para la exportación, especialmente al hemisferio norte.

A la menor demanda en los mercados de exportación, se añaden los efectos de la epidemia Anemia Infecciosa del Salmón, golpeando así a la demanda de insumos como el aceite de pescado crudo.

Análisis Individual

Parte corresponde a datos de la pagina web, habría que añadir datos de la memoria

Austral Group SAA. es una compañía del grupo noruego Austevoll Seafood ASA , una de las empresas pesqueras líderes a nivel mundial, con más de 25 años de experiencia y actividades en cuatro países con larga tradición pesquera como Perú, Noruega, Escocia y Chile. Somos una empresa líder en innovación y calidad dentro de la industria peruana, Disponemos de una flota conformada por 38 embarcaciones, con una capacidad total de bodega de 16,000 TM, equipadas con sistemas de refrigeración (RSW) y equipos electrónicos de última generación, que garantizan la calidad y frescura de nuestra pesca. Contamos con 11 modernas plantas estratégicamente ubicadas a lo largo de la costa peruana y completamente equipadas para el procesamiento de harina y aceite de pescado, así como conservas de pescado y productos congelados.

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