Cierre De Las Cuentas Y De Los Libros

Desarrollo

El cierre de cuentas y libros es la actividad del término del ejercicio anual, en la cual se liquida el periodo comercial y contable. En Chile el ejercicio comercial de las empresas es en un periodo de 12 meses el cual culmina el 30 de junio o 31 de diciembre de cada año. Las empresas consideran periodos más cortos al preparar sus informes, idealmente ejercicios mensuales, pero el cierre de cuentas y libros es necesario solo al término del ejercicio anual. Gran parte de los ajustes periódicos de ejercicios intermedios son solo de carácter provisional, registrándose en algunas ocasiones en la hoja del trabajo. En estos periodos intermedios se pueden apreciar de mejor manera la utilidad de trabajo para preparar el Balance y el Estado de Resultados, informes que pueden elaborarse indistintamente a partir de la hoja de trabajo o de saldos de las cuentas del Libro Mayor en el cual se deben registrar todos los ajustes y regularizaciones con carácter definitivo. Recordemos que las cuentas de resultados son las cuentas de ingresos, gastos, costos de venta y costo de producción y en las de balance son activo, pasivo y patrimonio. El resultado de la cancelación de las cuentas de resultados, se deben ingresar a la cuenta de patrimonio, si el resultado es una pérdida el patrimonio disminuirá y en caso contrario será de utilidades, esto quiere decir que el patrimonio se incrementará.

La utilidad surge cuando se superan los costos y gastos mientras que las pérdidas son cuando los costos y gastos superan los ingresos. Antes de cancelar las cuentas de resultados, se debe realizar los ajustes y conciliaciones del caso. Los ajustes más importantes que se deben realizar son: depreciación de los activos fijos, la liquidación de los activos intangibles, la provisión de carteras y los ajustes necesarios de los inventarios.

Las reclasificaciones de las cuentas son un proceso muy importante las cuales se deben realizar principalmente en las cuentas de banco, proveedores, clientes y en cualquier cuenta que resulte con un saldo negativo, otro aspecto importante es la realización de los ajustes necesarios a los diferentes activos y así reconocer su valoración o desvalorización. Al realizar el cierre contable es importante tener en cuenta los impuestos y los resultados financieros esperados. Esto nos lleva a una planeación para así conseguir un buen resultado.

La depreciación, provisión de cartera, métodos de evaluación de inversiones, las políticas de clientes, proveedores y de inventarios son elementos los cuales permiten variar los resultados finales, por lo tanto se deben analizar detalladamente y de esta forma decidir cuál sería el procedimiento más adecuado para la obtención de los objetivos que se han trazado. Una buena planeación de política contable permite que la empresa muestre una situación económica y financiera real que pueda incidir sobre la carga tributaria que se debe asumir, además sobre la estabilidad económica, en especial la disponibilidad de capital de trabajo.

El procedimiento contable no es una tarea que se deba realizar al momento del cierre contable, sino más bien al inicio del periodo ya que de esta manera las medidas adoptadas surtan efecto y para esto deben ser aplicadas desde un comienzo.

Al momento del cierre hay que considerar las variables que afecten al próximo periodo, por esta razón jamás una planeación debe ser improvisada. No se debe abusar de las figuras contables por querer incidir en los resultados finales, estas deben estar dentro de una política de prudencia y así no comprometer la situación económica ni financiera de la empresa y de esta forma no tener problemas de carácter legal, es muy importante que al fijar las políticas contables se le brinde la misma importancia a la parte económica de la empresa, es algo que se suele descuidar en las medianas y pequeñas empresas siendo estas

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