El arte como actividad mercantil

CEL ARTE SE CONVIERTE EN COMERCIO

Karen Tatiana Barbosa Hernández, Jeison Caicedo, Leidy Yuranny Carrillo Saavedra, Edith Juliana  Doria Morales, María Camila  Rincón Bermúdez.

Universitaria Agustiniana.

     Resumen

     Como punto de partida vamos a darle solución a  la siguiente cuestión  ¿Cuándo el arte se convierte en comercio?, encontraremos el desglose de dos artículos  del código del comercio como es el artículo 23, donde señala que actos no son mercantiles siendo uno de ellos la adquisición de  bienes para producir obras artísticas y la enajenación de estas por su autor ; el segundo artículos es el 20 del código del comercio donde se muestran las operaciones, las empresas mercantiles y  la adquisición de bienes a título oneroso con destino a enajenar en igual forma, y la enajenación de los mismos . Junto con la explicación de estos artículos se dará un acercamiento histórico del comercio del arte y las formas que hay para comercializar este, también daremos a entender por qué no es considerada una actividad mercantil y se expondrá nuestros puntos de vista.

Palabras Clave: Arte, Acto mercantil, Artista, Enajenación.

1. Introducción

La enajenación del arte se ha visto cuestionada por  no considerarse como un acto mercantil , por ello buscaremos explicar que factores influyen a que esto no sea así , comenzaremos citando directamente el (1) artículo 23 del Código de Comercio este señala cuales actos no son mercantiles, donde se presentan 5 pero haremos énfasis en el segundo que dice que “La adquisición de bienes para producir obras artísticas y la enajenación de éstas por su autor” no es considerado un acto mercantil ; ¿cómo podemos decir que los artistas al enajenar sus obras de arte no están ejerciendo el comercio?, si la enajenación es la venta de bienes? ; En el artículo 20 dice que 1) La adquisición de bienes a título oneroso con destino a enajenarlos en igual forma, y la enajenación de los mismos. Es decir la compra y venta de bienes y servicios;  si miramos desde un punto de vista previo podemos observar que la ganancia que se da al vender y comprar arte es benéfica  y  que cada día viene tomando más fuerza en la economía, aparte de que el arte se ha convertido en un estilo de vida para muchas personas como también se ha venido incentivando lo que se le llama la economía naranja.

1. Historia

     (2) Desde su inicio el arte era considerado anecdótico o artesanal, también limitado para la población del común, ya que era considerado un objeto de lujo. En el renacimiento nace un cambio que logra reconocer el arte en Europa a mediados del siglo XVII.

En Centroeuropa se desarrolló el coleccionismo durante el siglo XVII, que también era impulsado por el alzamiento económico y social de la burguesía centroeuropea.

Esta burguesía necesitaba una manera para poder manifestar su posición económica, y encontraron un lenguaje perfecto: el arte, contrataban  artistas del momento como Johannes Vermeer de Delft (1632 – 1675).para la decoración de sus hogares, como símbolo de poder y riqueza.

Este acontecimiento enriqueció a los pintores de la zona norte de Europa, ellos exhibían las colecciones de pinturas, esculturas y curiosidades, este tipo de obras se colocaban en una pared que recibía el nombre de pared preciosa.

Aquí nace la dinámica o modelo de intercambio de obras artísticas que será el auténtico comienzo del mercado del arte, que evolucionará hasta llegar al día de hoy.

 Los cuadros no solo actuaban  como muestra del poder y riqueza de los burgueses, si no que forman parte de su patrimonio también considerado como  inversión ya que  pueden desprenderse de ellos en caso de ser necesario, si necesitan dinero, lo cual aumenta más la demanda que la oferta, y como consecuencia se produce una competitividad entre los clientes que desean la obra  generando  mercado, por medio  de la subasta.

El poder de los marchantes de arte aumenta exponencialmente, y comienzan incluso a imponer condiciones a los artistas, muchos de los cuales se han enriquecido y han pasado a formar parte de la nueva burguesía, también.

Los artistas y los clientes empiezan a no ser las únicas personalidades importantes en una venta de arte. Como decíamos previamente, los marchantes ganan fuerza y poder, y actúan como intermediarios en las ventas y en los eventos públicos destinados a estos fines, rodeándose de otros personajes como pueden ser los peritos tasadores, redactores de catálogos, abogados,… En cuanto a los eventos, los más destacados comienzan a ser las ferias y subastas públicas de arte, como la de Saint-Germain en Francia y Leipzig en Alemania, o las subastas de Amberes y Ámsterdam. Los marchantes se convirtieron en los dinamizadores de la vida artística. Los artistas habían dejado de producir únicamente por encargo, y los talleres comenzaban a producir de forma casi masiva y para clientes desconocidos, anónimos.

1. Arte y Comercio

     (3) Primero aclararemos que el mercado del arte está dividido en 2, uno es el mercado primario que da salida a obras recién producidas y el otro es el mercado secundario que es la reventa de obras de arte concretas. Como gestores o representantes artísticos, construyen la trayectoria profesional de los artistas, y como comerciantes, compran y venden obras de arte (Celaya, 2006).

Las compañías dedicadas a la producción y venta de mercancías normalmente están organizadas en forma de sociedad anónima en el mercado de valores. La capacidad de producción y el volumen de ventas son transparentes; Sin embargo, no contamos con cifras que muestren los resultados del mercado primario del arte, en el que la facturación de las existencias es muy baja, se mueven considerables sumas de dinero en poco frecuentes transacciones, los coleccionistas adquieren sus obras sin recibo, los pagos se realizan en efectivo, la privacidad de cara a los impuestos desempeña un papel importante, y el artículo en sí pasa a ser un bien sagrado.(Celaya,2006).

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