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En los albores del Siglo XX y como consecuencia de la revolución industrial


Enviado por   •  6 de Marzo de 2017  •  Trabajos  •  2.798 Palabras (12 Páginas)  •  223 Visitas

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Introducción 

En los albores del Siglo XX y como consecuencia de la revolución industrial, surgió un movimiento que más adelante se le llamaría el enfoque clásico de la administración. Dicho movimiento estuvo constituido básicamente por dos corrientes: 1) La escuela de la administración científica, desarrollada en los Estados Unidos, a partir de los trabajos de Frederick W. Taylor, Henry Lawrence Gantt, Harrinton Emerson y Henry Ford, entre otros; y 2) La corriente de los atomistas y fisiologistas de la organización, también conocida como escuela clásica desarrollada en Francia a partir de los trabajos de Henri Fayol, James D. Mooney y Lyndall F. Urwick, entre otros.

El panorama industrial del inicio de este siglo tenía todas las características y elementos para poder inspirar una ciencia de la administración: una variedad inmensa de empresas, con tamaños altamente diferenciados, problemas de bajo rendimiento de las máquinas utilizadas, desperdicio, insatisfacción generalizada de los trabajadores, competencia intensa pero con tendencias poco definidas, etc. A partir de lo anterior, los autores clásicos pretendieron desarrollar una ciencia de la administración cuyos principios, en sustitución de las leyes científicas, pudiesen ser aplicados para resolver los problemas de la organización.

En este sentido, la preocupación por racionalizar, estandarizar y establecer normas de conducta al administrador condujo a la mayoría de los autores clásicos a formular sus principios, los cuales deberían ser aplicados a todas las situaciones posibles de la empresa, lo que hizo de la incipiente administración una ciencia normativa y prescriptiva que pretendía ser una especie de recetario para el proceder del administrador respecto a determinadas situaciones.

Cada autor buscó establecer sus propios principios de la administración. Entre sus conceptos existieron tanto coincidencias como discrepancias, por lo que en el presente artículo se analizaran los referentes a los autores más representativos del enfoque clásico de la administración con el objeto de determinar su validez en la actualidad.

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¿Qué es un principio?

La palabra principio deriva del latín y significa el primer instante de una cosa, también suele entenderse al principio como la razón fundamental sobre la cual se procede discurriendo en cualquier materia. Algunos más lo definen como la idea o máxima particular que sirve para que uno se rija; para otros es la verdad fundamental, o que en un momento determinado se considera como tal, que explica las relaciones entre dos o más variables, por lo general una independiente y otra dependiente. En esta última concepción es en donde se encuentran ubicados los principios de la administración ya que son las ideas o verdades fundamentales a partir de las cuales se rige la administración.

En este sentido, el principio es una declaración o verdad fundamental que proporciona una guía para el pensamiento o la acción; de tal forma que esta afirmación nos dice qué resultados se esperan cuando se aplica el principio.

Lo que se busca con la utilización de los principios es que el administrador sea capaz de lograr con mayor facilidad sus objetivos evitando cometer errores fundamentales en sus actividades.

Los principios que presentaremos en este artículo han sido formulados por los autores que se citan a partir de años de experiencia en organizaciones tanto públicas como privadas y son hipótesis de trabajo que aunque no tienen una rigurosa comprobación científica han sido aceptados y utilizados en un muchas organizaciones. En la medida que se desarrollen investigaciones profundas, surgirán nuevos principios, se modificarán otros y algunos serán descartados como verdaderamente representativos de la práctica de la administración actual.

Según Terry & Franklin los buenos principios deben ser:

•  Prácticas que pueden ser aplicadas en casi cualquier momento de la vida de la organización y que serán apropiados.
•  Pertinentes a las formas generales de la estructura organizacional.
•  Congruentes para conjuntos de circunstancias similares en que se presentarán resultados similares.
•  Flexibles para la adaptación a las condiciones particulares de la organización.

La aplicación de los principios de administración tiene la finalidad de facilitar el trabajo administrativo, su uso busca simplificar la toma de decisiones de los administradores. Además, la lectura de los principios de administración provee valiosas orientaciones y bases de meditación a toda persona interesada en los procesos administrativos.

No obstante lo anterior, debido a su naturaleza, los principios administrativos no tienen la exactitud de los principios de la física. En este sentido, la formulación de los principios administrativos se ha dirigido no tanto hacia propósitos exclusivos de la investigación, sino que más bien hacia la aplicación práctica del conocimiento obtenido en un reducido número de casos.

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Teorías de la Administración

Principios de la Gerencia Científica de Taylor

Frederick Winslow Taylor (1856-1912) ingeniero de Filadelfia ha sido considerado por muchos “el padre de la administración científica” debido a sus trabajos sobre el desarrollo inicial de la administración. Sus principales estudios se enfocaron a conocer los problemas y actitudes de los trabajadores para aumentar la eficiencia en la producción. En sus principios se reafirma el uso de la ciencia, la cooperación en el grupo, el logro de la producción máxima y el desarrollo de los trabajadores.

En sus trabajos, Taylor hizo énfasis sobre la importancia de los principios administrativos que deben regir en toda organización, dichos principios, según él, se basan en el enfoque científico de la administración.

En el cuadro que se presenta a continuación, se muestra un resumen de los principios de la gerencia científica formulados por Taylor, los cuales a pesar de haberse publicado hace más de 85 años no se encuentran muy alejados de las creencias fundamentales del administrador moderno.

•  Principio de planteamiento: sustituir en el trabajo el criterio individual del operario, la improvisación y la actuación empírico-práctica, por los métodos basados en procedimientos científicos. Sustituir la improvisación por la ciencia, mediante la planeación del método.

•  Principio de la preparación: seleccionar científicamente a los trabajadores de acuerdo con sus aptitudes y prepararlos, entrenarlos, para producir más y mejor, de acuerdo con el método planeado. Además de la preparación de la mano de obra, preparar también las máquinas y equipos de producción, como también la distribución física y la disposición racional de las herramientas y materiales.

•  Principio de control: controlar el trabajo para certificar que está siendo ejecutado de acuerdo con las normas establecidas y según el plan previsto. La gerencia debe cooperar con los trabajadores para que la ejecución sea lo mejor posible.

•  Principio de la Ejecución: distribuir distintamente las atribuciones y las responsabilidades, para que la ejecución del trabajo sea disciplinada.

Los principios arriba mencionados tuvieron por objeto hacer una distinción precisa de lo que es la gerencia científica, en oposición a la simple gerencia sistematizada. Además de ellos, Taylor enunció en forma dispersa a lo largo de su obra algunos mecanismos o reglas fundamentales que se pueden establecer también en forma de principios, los cuales se presentan a continuación.

•  Estudiar el trabajo de los operarios, descomponerlo en sus movimientos elementales y cronometrarlo para, después de un análisis cuidadoso, eliminar o reducir los movimientos inútiles y perfeccionar y racionalizar los movimientos útiles.

•  Estudiar cada trabajo antes de fijar el modo como deberá ser ejecutado.

•  Seleccionar científicamente a los trabajadores de acuerdo con las tareas que le sean atribuidas.

•  Dar a los trabajadores instrucciones técnicas sobre el modo de trabajar, o sea, entrenarlos adecuadamente.

•  Separar las funciones de planeación de las de ejecución, dándoles atribuciones precisas y delimitadas.

•  Especificar y entrenar a los trabajadores, tanto en la planeación y control del trabajo como en su ejecución.

•  Preparar la producción, o sea, planearla y establecer premios e incentivos para cuando fueren alcanzados los estándares establecidos, también como otros premios e incentivos mayores para cuando los patrones fueren superados.

•  Estandarizar los utensilios, los materiales, la maquinaria, el equipo, los métodos y los procesos de trabajo a ser utilizados.

•  Dividir proporcionalmente entre la empresa, los accionistas, los trabajadores y los consumidores las ventajas que resultan del aumento de la producción proporcionado por la racionalización.

•  Controlar la ejecución del trabajo, para mantenerlo en los niveles deseados, perfeccionarlo, corregirlo y premiarlo.

•  Clasificar de forma práctica y simple los equipos, procesos y materiales a ser empleados o producidos, de forma que sea fácil su manejo y uso .

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