Inversión Extranjera Directa

Sectores de inversión directa

México tiene actualmente inversión extranjera directa que promedia más de 20 mil millones de dólares al año, una previsión de crecimiento nacional del 3.6 al 4% para el año en curso y su inclusión en el grupo de los próximos países emergentes denominado ‘MIST’; por lo que México ofrece diferentes posibilidades de inversión.

Los principales inversores en México son: en primer lugar Estados Unidos, después le sigue la Unión Europea (principalmente España, Holanda, Reino Unido y Alemania) y por ultimo Canadá.

La inversión extranjera directa llega a México gracias al incentivo del Tratado Norteamericano de Libre Comercio, pues acuerdan no pagar impuestos o aranceles al exportar sus productos entre ellos; estas inversiones llegan principalmente al sector de la industria manufacturera concentrando aproximadamente el 43.5% de las inversiones, al sector financiero con casi el 25.3% de las inversiones y en transportes, comercio y comunicaciones atrayendo casi el 15%. Algunos Estados, como Querétaro, Guanajuato o Tabasco destacan por la atracción de inversionistas de sectores como el aeroespacial, el automotriz y el energético.

Una empresa busca invertir en otros países con la finalidad de participar en nuevos mercados, aumentar la eficiencia productiva (buscan lugares en donde los costos de ciertos insumos sean más baratos, la fuerza laboral sea abundante y los salarios relativamente bajos) y el intento de explotación de ciertos activos estratégicos (mano de obra calificada, un tipo de infraestructura o el desarrollo de ciertas habilidades).

México, por su parte debería atraer IED por medio de sus tratados y acuerdos comerciales ya que existe una cobertura de 43 países y más de mil millones de consumidores potenciales, por la diversificación de los mercados de bienes y servicios, por la comunicación con los demás países, por las terminales de distribución interior comunicados con los principales puertos marítimos, lo que permite reducir costos y agilizar la llegada y salida de mercancías, el entorno cultural favorable, la mano de obra barata, etc.

Las inversiones en el país están limitadas por la falta de recursos, pero una reforma fiscal permitiría aumentar los recursos del gobierno, y así estos podrán invertirlo en infraestructura, pues México necesita infraestructura de hidrocarburos, carreteras, electricidad y agua para poder abastecer a las industrias.

También se necesita una buena educación e inversión en tecnología, pues desgraciadamente en México existen más personas con capacidades obreras que ingenieros, licenciados, científicos, etc. Es por esto que no hay avances tecnológicos que nos puedan hacer un país apto para inversiones que impliquen trabajadores muy calificados; y muchas de las empresas traen a extranjeros que sí son capaces, lo cual deja a los mexicanos con salarios mínimos y pocos ingresos.

México podría captar inversiones extranjeras directas por medio del sector eléctrico, las telecomunicaciones, los aeropuertos, la distribución de gas natural y los ferrocarriles; pues en Querétaro empresas como la canadiense Bombardier que es fabricante de aviones y trenes, han invertido cientos de millones de dólares, mientras que otras, como la europea Eurocopter que es fabricante de helicópteros y abrirán plantas de producción durante el año en curso. Por su parte, Aeroméxico inaugurará un centro de mantenimiento para sus aviones con una inversión de 40 millones de dólares.

A los otros países les conviene invertir en México en estos sectores gracias a su ubicación geográfica, ya que estamos junto a la primer economía mundial, a la variedad de recursos naturales, de tierra y climas propicios para el fomento de todo tipo de industrias, ya que se cuentan con materiales como

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