LAS PERSONAS EN LA ORGANIZACIÓN

LAS PERSONAS EN LA ORGANIZACIÓN

Jeimy Acosta Gamboa, Claudia Angulo Lazaro, Britzy Baca Jurado, Maria Celeste Cordova Cruz, Valery Cruz Contreras, Daleska Romero Lara

Hoy en día para las empresas el activo más importante son las personas, donde las cuales son las que desarrollan las actividades que requieren dichas organizaciones; durante el tiempo fue evolucionando el trato hacia los colaboradores, pero aun así seguimos experimentando atropellos y faltas a sus derechos, considerándolos solo un recurso más para resolver urgencias dentro de su centro de labores.

El término colaborador abarca a toda persona física que brinda sus servicios subordinados a otra institución o empresa, recibiendo una remuneración a cambio de la fuerza o habilidades de trabajo, pero ese no siempre fue el concepto que se tenía dado que en diferentes épocas de la historia se tenía una diferente percepción y su lugar en una organización, ejemplo de ello, se remonta a la época feudal abarcando los siglos XIII al XVI, periodo de cambio del feudalismo al capitalismo, en países como Inglaterra, Francia y Alemania donde se veía a la persona como un simple esclavo prohibido de cualquier derecho, sucesos como el antes mencionado refleja la evolución en la historia de este concepto de la persona como recurso.

En la actualidad se mantiene un concepto de persona como un ser único e irrepetible, habilidoso, con sabiduría, con diferentes cualidades de las cuales son potencia para las organizaciones, desempeñándose en diversos roles de forma paralela; por otro lado se define al recurso como un bien tangible que no tiene vida, que requiere del trabajo en conjunto para poder ser aprovechado de manera productiva y su principal característica es que a medida que pasa el tiempo tiende a desgastarse y perder su valor.

Cuando se trata de un forma agradable y correcta la situación tiende a ser diferente, ya que al no tener limitaciones para poder desarrollar sus habilidades potenciales permite que el manejo del trabajo sea mucho más complejo y realizado. Los patrones de comportamiento siempre serán variados, dado que influyen de manera decisiva los sentimientos de cada colaborador y su grado de compromiso hacia la entidad donde presta sus servicios.

En conclusión, la importancia que se le otorgue al talento humano, se verá reflejado en la efectividad de sus labores dentro de la empresa, ubicándose en el eje central de las organizaciones ya que implementan sus conocimientos en los negocios y las racionalidad en las decisiones, formular una estrategia tiene que tener como propósito fundamental el logro del compromiso colaborador – empresa, siendo así un trato no como unos colaboradores más, sino como parte de la empresa considerándolos socios estratégicos de la misma, y los principales responsables del éxito de la organización.

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