La Tercera Revolucion Industrial

ECONOMIA I

LA TERCERA REVOLUCION INDUSTRIAL

JESUS DAVID PLAZAS PEREZ

COD. 1520142074

UNIVERSIDAD DE IBAGUE

FACULTAD DE CIENCIAS ECONOMICAS

ADMINISTRACION DE NEGOCIOS INTERNACIONALES

IBAGUE

2015

La tercera revolución industrial

Después de las primeras dos revoluciones industriales, cuando se mecanizo la industria textil, y cuando Henry Ford se convirtió en el maestro de las líneas de ensamblaje en movimiento, hacia el final de la segunda guerra mundial; se inició el desarrollo de una nueva era, la era de la tecnología y la digitalización de la producción cambiando no solo los negocios sino la forma en que el mundo va a seguir evolucionando.

Anteriormente, la forma de producir bienes exigía una vasta cantidad de materiales y procesos manuales que en un conjunto daban como resultado tales bienes; Ahora es fácil encontrarnos con la producción o impresión de bienes a partir de diseños digitalizados, y digo impresión porque literalmente son las impresoras 3D las que están permitiendo la producción de objetos de una pantalla a nuestra mano, sobrepasando la complejidad de detalles que incluso en algunos objetos es difícil perfeccionar de manera tradicional. Se cree que en un futuro no muy lejano, se podrá crear casi todo lo que nos imaginemos con estas impresoras, desde piezas militares, hasta esas piezas de repuesto que no se volverían a encontrar por ser obsoletas en el mercado. Sin embargo, este es solo un pequeño avance en el esquema general de esta revolución. Hoy día, se utilizan materiales más resistentes y livianos al mismo tiempo, permitiendo reemplazar partes de aviones y hasta bicicletas. La nano-tecnología ahora le da a productos un valor agregado inmenso al que se le podía dar anteriormente, vendas que ayudan a sanar más rápido heridas abiertas, e incluso dándonos la oportunidad de pensar en crear energía a partir de virus genéticamente desarrollados.

El paradigma de hombres engrasados en las fábricas se empieza a romper en estos momentos, donde las fabricas están en la capacidad de desarrollar el doble de producción con una concepción más higiénica, dejando el trabajo manual pasar a las oficinas paralelas a las fábricas, las cuales estarán llenos de expertos en las diferentes áreas tecnológicas de la organización. Pero hay que tener en cuenta que no es solo la forma en que se hacen las cosas lo que va a cambiar, sino el lugar, antes las empresas buscaban mano de obra económica en otros países, pero ahora los costos de producir bienes crecen menos por lo tanto las organizaciones están intentando volver a sus casas matrices y crear cerca a sus verdaderos clientes, e impulsando de manera astronómica los ingresos y exportaciones del país en cuestión.

Es necesario ser conscientes de los cambios que se vienen encima en cuanto a la producción de bienes y servicios en nuestra sociedad, pues es fundamental estar preparados y tener la mente abierta para evolucionar al paso de ellos. No podemos permanecer en el esquema de es mejor hacerlo a la antigua porque es más seguro, no porque sea malo, sino porque la competencia internacional viene con su desarrollo a ofrecernos mejores productos y servicios, a mejores precios y con una entrega de ellos mucho más variada y cómoda a la que estamos acostumbrados. De esta manera necesitamos urgentemente la capacitación en tecnologías de producción de última generación en el país, siendo el gobierno y los grandes empresarios quienes deben llevar a cabo campañas para fomentar el interés por el desarrollo intelectual tecnológico de los profesionales y laborales del país.

Conclusiones

- Una tercera revolución que estamos viviendo no es solo esa que cambia la forma de hacer las cosas, sino

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