Tecnico En Administracion Hospitalaria

Iba camino a donde su abuela, su lugar favorito, el preferido para esconderse de la sociedad, para escuchar historias de antaño, de esas que hoy en día son sólo recuerdo; mientras caminaba se preguntaba que le faltaba por conocer de aquella abuela que vivió tanto y a la vez se perdió de tanto, de tanta tecnología y de tanta banalidad, que vivió a otro ritmo.

Aprendía de su sabiduría y conocía de la historia, de ella, de la familia, de su país. Al llegar, se tomó el algo, a las 4 pm, con ese chocolate caliente y espeso y sintió como se le ponían las mejillas como si hubiese nacido en tierra fría, coloradas, a causa del calor del chocolate y la parva recién traída de la panadería. Qué mejor escenario que este para preguntar, la abuela se sentó a su lado y Sienna inquirió.

-En mi camino vi muchas banderas del país, yo sé mamita que estamos en el día de la independencia pero no entiendo, ¿qué celebramos?

-¡Qué buena pregunta! Hace 200 años mi tesoro, acá en Colombia, a pesar de tanta alegría que ves y tantos caminos tan hermosos por recorrer, se vivieron grandes batallas que conmemoran este día. -¿batallas, peleas? Preguntó Sienna- Si, batallas de nuestros libertadores buscando soltarnos de los españoles, buscando conservar tradiciones y familias. Me contaban mis abuelos, tus tatarabuelos, que muchas cosas no son como parecen, como cuentan, pero más allá de la historia real o manipulada está el hecho de ser un país democrático, un país libre. Dicen que pelearon a palabrazos -¿Cómo así, diciendo vulgaridades?- -La abuela sonrió y dijo- No, sabes bien que los paisas y los colombianos, por nuestra cultura somos bastante habladores, ganamos a discurso, a leyes habladas y reseñadas, a críticas, a tertulias, a cartas escritas entre quienes batallaron lo triste mi niña linda –dijo mientras ella también tomaba su chocolate- es que muchas de las peleas fueron entre nosotros, por no estar de acuerdo con nuestros hermanos, se perdieron vidas y creencias.

-¿Qué pasó después? Pregunto inquieta Sienna- Vinieron otras batallas, con los países hermanos como Venezuela y Ecuador, batallas menos fuertes, pero batallas al fin y al cabo para decidir que era de quien, para decidir la forma de mando, en todos esos años, se crearon las fuerzas militares, se definieron partidos políticos, se unieron y desunieron lazos, todo tenía que ver, el clima, el lugar, hubo enfermedades, hermandades, viajes y tertulias, se crearon nuevas cosas como la prensa en el país y cambiaron muchas otras, sobre todo dentro de las familias, cambió su manera de pensar y de vivir, todo esto, para llegar a lo que somos hoy. Este es un país que tienen en sus manos ustedes los jovencitos para transformar.

Sienna, se levantó de allí, quería saber más, le dio un amoroso abrazo a su abuela, llevó los platos a la cocina, se lavó las manos llenas de dulce por la parva y

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