Aprendizaje y cuidado

Aprendizaje y Cuidado

Antigua ha quedado ya la discusión entre cuidado y aprendizaje, o asistencial y pedagógico. En esta dicotomía, cuidado y aprendizaje,  tal como lo expresa Antelo Estanislao…”no solo no se enfrentan, sino que se requieren mutuamente”. …”cuidar es responder, es estar allí presente.  Enseñar  y aprender esta sostenido por los docentes a partir del cuidado, la asistencia y las practicas de crianza.”

Definimos cuidado de la manera más amplia, fundido con los conceptos de ternura, miramiento y sostén; y es en este sentido que no podemos desligarlo del aprendizaje.

Un niño se desarrolla, sólo si  aprende, y aprende si es cuidado;  Es decir si  la existencia de Otro, que lo mira, lo advierte, lo sostiene y lo guía, se hace presente desde que es un ser recién nacido,…podríamos decir que aún desde  antes.

Es así que el aprendizaje  pasa a ser, tal como lo expone  N. Burbules  cuando habla del juego, un diálogo, entre uno y otro jugador. Un dialogo en el que,  el llamado experto implica en un vínculo de ternura y miramiento a quien le enseña, o mejor dicho a quien sostiene en un acto de aprendizaje  mutuo.

 Paulo Freire plantea, que la verdadera educación es diálogo. Y ese encuentro no se da en el vacio sino en situaciones concretas entre individuos para transformar  al mundo.

Concluimos que cuidado y aprendizaje resultan recíprocamente sostenidos, el cuidado es aprendido, y  se aprende solo si se es cuidado.  Promulgamos la necesidad de creación de un entorno que propicie este vínculo de un adulto cuidador acompañando al niño en el proceso de aprendizaje.

Es en la dinámica de esta relación que se aprende  a construir ideas acerca del mundo,  se despierta el deseo de aprender…y  por sobre todas las cosas,  los seres se humanizan en el reconocimiento del derecho de cuidar, ser cuidado y cuidarse.

Pero,… que es lo que se debe enseñar?   Que debe  aprender un niño a tan corta edad?…  a ser un ser social, el aprendizaje de la vida colectiva, y del mundo. Aquel supuesto de que existe un mundo pequeño para el niño y uno grande para el adulto ha quedado revertido.

 El aprendizaje debe ofrecer al niño esta posibilidad de conocer  el mundo, de pararse  en él  y desarrollar su autonomía, despertando la curiosidad, su iniciativa, su capacidad para descubrir por sí mismo y expresarse creativamente.

Cuídame, cuídame posando tu mirada sobre mí,

Cuídame, sostenme entre tus brazos con firmeza,

Cuídame, bríndame  tu más sincera sonrisa

Cuídame, cuéntame sobre este y otros mundos.

Cuídame,…y aprenderé a vivir y a cuidarte.

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