ASPECTOS CLINICOS DE PATOLOGIA GRAVE DEL SUPERYO

TEORIA GENERAL DE LOS DESORDENES DE PERSONALIDAD                                         CLAUDIO CARBALLO VAZQUEZ

ENSAYO.

ASPECTOS CLINICOS DE PATOLOGIA GRAVE DEL SUPERYO

Con especial referencia a las contribuciones freudianas esenciales, debemos examinar la participación del superyó en el funcionamiento mental normal y en la psicopatología, sin entrar en las diversas unidades nosológicas.

La patología que observamos en la clínica psicoanalítica incluye tanto aquellas imágenes en las que se puede deducir la presencia de deficiencias en la estructuración del superyó, como otras caracterizadas por su gravedad. Más bien es esta última, de la que la melancolía y la neurosis obsesiva son ejemplos paradigmáticos (Freud, 1923), la que ha dado lugar a que hoy se hable de una clínica del superyó, y las que más nos interesan en esta ocasión. Por supuesto, no me olvido de que dentro de la denominada patología contemporánea hay muchas imágenes en las que hay exactamente un déficit en la estructuración del superyó y en las que el yo ideal domina el ideal del yo.

Se trata de pacientes que carecen de apoyo interior, como diría H. Mayer (2000), que entiendo no solo como un déficit del yo, sino también como una función protectora del superyó. Finalmente, visualizaremos lo que constituye una metapsicología de la curación en el sentido del superyó, un tema en el que quizás no hayamos pensado demasiado, e incluiré escritores posfreudianos y algunas ideas personales al respecto. Podemos dividir la historia del concepto de superyó en tres partes:

a) la fase previa a su presentación en sociedad, que se acaba de llamar - superado - por Freud desde 1923 con la presentación de la teoría estructural del funcionamiento de la psique. Esta fase inicial se extiende desde prácticamente las primeras obras freudianas hasta la publicación de El yo y el ello;

b) una segunda etapa, que comienza en 1923 y se prolonga hasta 1939, con las últimas obras de Freud y

c) una tercera fase, que se extiende desde entonces hasta ahora, en la que se registran ideas y distintas aportaciones sobre este tema por parte de distintos autores.

Primera etapa

Así como el superyó, como yo lo veo, no se constituyó de la noche a la mañana con el naufragio del complejo de Edipo, pero cuya aparición y desarrollo permiten fases anteriores, el desarrollo del concepto en sí desde entonces, no repentinamente en 1923, se ha adelantado mucho con la prehistoria compuesta por hipótesis contenidas en textos freudianos y las de algunos de sus alumnos. Hay una serie de referencias teóricas y clínicas que aparecen en el trabajo de Freud que pueden vincularse al concepto de superyó, una conexión que el propio Freud hará después de que haya llegado el término final, y en la mayoría de los casos a forma explícita.

Antes de 1923 existían otros conceptos del superyó:

• En Lo siniestro se sientan las bases para entender la autoridad crítica como un doble - Antagónico - del yo.
• Una referencia particularmente importante, esta vez quizás más con respecto al ideal que a la conciencia moral, es el conocido Modelo de Psicología de las Masas y Análisis del Yo de 1921. Es una contribución a la comprensión de la psicología de las masas precisamente a través de la transferencia - creo que se podría llamar así, y Freud menciona el término al menos una vez en esta obra - del ideal individual del líder.

Aunque con el mencionado nombre del ideal del yo ya en la psicología de masas ... encontramos una descripción bastante completa del superyó; Se nota que poco se notó al respecto. (Para ello los exegetas de la obra continúan dirigiéndose directamente al yo y al ello). En la obra de 1921 hay un capítulo especial en el que Freud -con todas las letras, diría yo- anticipa el concepto de superyó: es cuando habla de una fase de diferenciación en el yo Freud asignará al superyó funciones muy diferentes del yo, que tendrá que profundizar en el texto mencionado anteriormente. Son: introspección, conciencia moral, censura onírica y una especial influencia sobre la opresión.

Segunda etapa

En esta fase y en relación a la producción freudiana, se pueden ver dos puntos altos en relación a la teoría del superyó: El primero tiene lugar en 1923 con el yo y el ello, en el que el término se presenta con el nuevo nombre, supra. Yo (superyó) y también como una organización particular dentro de la división tripartita de la personalidad; El segundo se registró en 1933, cuando Freud redefinió las funciones, es decir, los componentes de este superyó, en las nuevas conferencias de Introducción al psicoanálisis. Antes y después de 1933 también hay contribuciones significativas de Freud que también debemos considerar.

El yo y el ello

En este texto trascendente hay una serie de contribuciones en torno al superyó, que en algunos lugares todavía se conoce como el ideal del yo. (Más tarde, la terminología debe reformularse y el ideal del yo se convierte en una subestructura del sistema de superyó, que es responsable de la formación de los ideales). Una pregunta extraña: ¿Por qué Freud no incluyó el nombre "superyó" en el título de esta obra y en cambio se refirió sólo a las otras dos instancias psíquicas? Siempre conviene pensar que el superyó se describe en parte como un desprendimiento del yo, como lo era en 1921 (un yo doble, como también hemos visto). Teniendo esto en cuenta, conviene recordar que, en ocasiones, cuando Freud nombra al yo, según Etcheverry, traductor de las obras de Freud en la Colección Amorrortu, se refiere a lo que el traductor traduce como el sistema del yo, que también incluye el SUPERYO.

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