Consumo de sustancias en adolescentes en cd. juarez.
Enviado por Anaid Vazquez • 23 de Octubre de 2016 • Documentos de Investigación • 1.147 Palabras (5 Páginas) • 389 Visitas
Anaid Patricia Vázquez Antúnez
Matricula: 77699
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
La problemática del consumo de sustancias toxicas y adictivas es una cuestión que genera destrucción a nivel global, afecta la salud y relaciones sociales profundamente, por ser una situación muy delicada que requiere tratamiento, atención, sistemas de prevención e inclusión, no solo categorización y juicios o segregación hacia el consumidor de sustancias.
Así como lo son los Centros de Integración Juvenil (CIJ, A.C.), quienes brindan el servicio de tratamiento médico y psicológico, así como un acompañamiento hacia la rehabilitación, el autor corporativo menciona en su página virtual, en el año 2012 que:
“El consumo de drogas es un fenómeno complejo que incide en la salud individual, familiar, social y colectivo, es un problema de orden público que requiere de un análisis y evaluación permanente ya que la sociedad se encuentra expuesta a la oferta de diferentes sustancias, cada vez más potentes y de mayor acceso. Entre los grupos más vulnerables se encuentran los niños y jóvenes.” (CIJ, 2O12, EBCO: Párrafo 2)
El resumen 2014 del Informe Mundial sobre las Drogas indica que se calcula que 1 de cada 20 adultos, es decir, alrededor de 250 millones de personas de entre 15 y 64 años, consumieron por lo menos una droga en 2014. (UNODOC, 2016, pg.1)
El uso de cualquier sustancia o droga perjudica el sistema nervioso central y periférico, causa daños a veces irreversibles cognitivamente y puede ocasionar hasta la muerte, así lo muestra en su página de internet el Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas en E.U.A. (NIDA):
Sabemos que el mismo tipo de mecanismos implicados en el desarrollo de la tolerancia pueden finalmente conducir a cambios profundos en las neuronas y los circuitos del cerebro, con el potencial de comprometer seriamente la salud del cerebro a largo plazo. Por ejemplo, el glutamato es otro neurotransmisor que influye en el circuito de recompensas y en la capacidad de aprender. Cuando la concentración óptima del glutamato se ve alterada por el abuso de drogas, el cerebro intenta compensar este cambio, lo que puede causar un deterioro de la función cognitiva. Del mismo modo, el abuso de drogas a largo plazo puede desencadenar adaptaciones en los sistemas de memorias no conscientes o habituales. El condicionamiento es un ejemplo de este tipo de aprendizaje, donde ciertos indicios en la rutina o el entorno diarios de una persona se asocian con la experiencia de la droga y pueden disparar deseos incontrolables cada vez que la persona está expuesta a estos indicios, aun cuando la droga en sí no está disponible. Este “reflejo” aprendido es extremadamente durable y puede afectar a una persona que alguna vez consumió drogas incluso después de muchos años de abstinencia. (NIDA, 2014, las drogas y el cerebro).
Los amigos y conocidos pueden tener una influencia cada vez mayor durante la adolescencia. Si estas personas consumen drogas, pueden convencer hasta a quienes no tienen factores de riesgo de que las prueben por primera vez. El fracaso escolar o la falta de habilidades sociales pueden poner a un niño en mayor riesgo de consumir o convertirse en adicto a las drogas, algunas personas son más vulnerables a volverse dependientes ya sea emocional o fisiológicamente; sin embargo, no se puede establecer un factor determinante biológico o psicológico o social para que una persona tome la decisión de consumir drogas. Por esto es necesario realizar un estudio de campo en las áreas donde se concentra el mayor consumo en adolescentes en Cd. Juárez, para esto es necesario tomar en cuenta los siguientes puntos:
El consumo de drogas en niños y adolescentes sigue siendo un problema de gravedad en el país. Así lo dio a conocer la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas en Estudiantes (ENCODE) 2014-2015. Según dicha encuesta, se explica que “el consumo de drogas es un fenómeno dinámico, con periodos de aumento y decremento, que varían geográficamente y en diferentes grupos de la población; nos han mostrado que en México el uso de drogas ha aumentado, y junto con ello la proporción de personas que se ven afectadas por el problema”, informa.
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