DESARROLLO HUMANO

CAPITULO 10:

COMO SER UN PENSADOR POSITIVO

Se aprende mediante un gran esfuerzo, sabemos que el Señor todo poderoso nos ha hecho a su imagen, y por lo tanto por naturaleza somos creativos porque Él es positivo y tiene una asombrosa confianza en sus creaciones. Cambiar nuestro pensamiento negativo por pensamiento positivo y gozar de las bendiciones que esto atrae. Entendemos que nuestra voluntad es una máxima prioridad para cambiar a una persona, nosotros como personas descubrimos que el hambre y la sed de algo más grande se llaman intensidad de deseo y nos lleva inevitablemente a lo que intensamente se desea. Entiendo que el pensamiento positivo es para personas fuertes: fuertes en la fe, fuertes en el pensamiento, fuertes de carácter. Y si ya no lo son cuando adoptan el pensamiento positivo, el esfuerzo por llegar a ser positivos les da fortaleza. Se entiende que el pensamiento positivo es todo lo contrario de lo negativo ya que el negativo es un descreído y mientras el positivo es creyente, el uno está lleno de dudas sobre sí mismo, el otro lleno de confianza en sí mismo En resumen creo que el pensador negativo tiende a ver, y por tanto a producir, fracasos. Mientras el pensador positivo imagina lo posible y atrae el éxito hacia sí mismo y hacia sus proyectos. Sabemos que efectuar el cambio de negativo a positivo requiere empezar a alimentar ideas positivas acerca de las cosas pequeñas. Debemos de atacar las actitudes mentales negativas con pequeños proyectiles positivos, tales como “si puedo, si es posible” y esto empezara a labrar un nuevo surco mental, aun cuando sea pequeño.

En conclusión creo que cuando uno no hace casos a esos pensamientos negativos se abren grandes puertas de oportunidades que nos hacen cambiar y crecer tanto en lo material como en lo espiritual.

CAPITULO 11: AL FIN LA FELICIDAD

Debemos de ser inteligentes y abandonar los pensamientos negativos, debemos aprovechar el momento oportuno, ese momento mágico en que todos los elementos se presentan justamente a tiempo, o cuando comprendemos que se necesita acción correctiva. Todos nosotros tenemos grandes sueños en nuestros corazones y hay que luchar y tratarlos con respeto para poder alcanzarlos en conclusión creo que cuando la fe es débil, la angustia será menos problema, como dice la escritura: si tuvieras fe como un grano de mostaza… nada os sería imposible.

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