EL GÉNERO Y LAS MATEMÁTICAS

EL GÉNERO Y LAS MATEMÁTICAS

El tema de género ha sido abordado a través de la historia y trae consigo una serie de criterios que caracterizan su estudio, es un tema que ocupa al ser humano desde el instante en que hombres y mujeres establecen relaciones dentro de la sociedad. Por lo que contribuye una estructura de poder que determina las interacciones entre los géneros. Dicha estructura se ve influenciada en diversos espacios como la política, la economía, la familia, e incluso en la educación.

Para Pnud (2010) el género abarca todas aquellas relaciones sociales organizadas a partir de una atribución de igualdad y jerarquía a las diferencias sexuales y a las identidades, los cuerpos y subjetividades que surgen de esa atribución. La influencia que tiene el género dentro de la sociedad configura las experiencias de hombres y mujeres generando oportunidades o dificultades. Ahora bien, dentro de la educación y desde la psicopedagogía es importante observar cómo se desarrolla las influencias de género durante los años de escolaridad.

La cuestión de la mayor o menor capacidad intelectual relacionada con el género en el estudio de las matemáticas, ha querido ser explicada, puesto que según el Consocio del Programa para la Evaluación Internacional de los Alumnos (PISA) (2004), los estudios realizados en Estados Unidos por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCEDE) y la implementación de PISA 2003, indica que hay una ventaja significativa de los varones en muchos países en al menos una de las áreas con contenido matemático, resultado del contexto social y cultural sentido amplio o de las políticas y prácticas educativas (citado en Rojas y Correa, 2014).

Por otra parte según SERCE niñas en 3° y 6° grado, tiene un rendimiento promedio menor al de los niños en Latinoamérica (Treviño,Valdés, Castro, Castillo, Pardo y Donoso, 2010, citado en Pérez-Jiménez, 2016), a su vez para Gallagher y Kaufman (2004) afirma que las mujeres continuamente sacan peores notas en las pruebas estandarizadas aunque esa diferencia no existe dentro de clase.

Por lo tanto, para Gonzáles (2003) los resultados dan realce a generar discusión entre el género y las matemáticas, puesto que, esto concibe una perspectiva entorno a que los niños suelen ser mejores que las niñas en el estudio de las mismas. Esto marca un interés por la acción de las mujeres en el campo de las matemáticas, ya que muchas de las veces la diferencias entre mujeres y hombres en pruebas de matemáticas como bien se menciona anteriormente son significativamente desfavorables para las mujeres, así mismo dentro del estudio en niveles superiores relacionados con las matemáticas.

La diferencia que existe en el desempeño matemático tiene una estructura cultural, los aprendizajes y la misma socialización que se ha hecho de lo roles, primero desde la familia por la interiorización de los estereotipos, y luego desde la escuela por ser un ámbito que mantiene las desigualdades, creando un contexto diferente para los alumnos y alumnas, que se asume de manera natural (Rojas y Correa, 2014).

La claridad de las mujeres a través de las imágenes y el lenguaje que utilizamos en la formación van reproduciendo nuestra cultura (Schüssler, 2007). El desarrollo de los profesores de educación básica, deben de estimular las destrezas y habilidades de los estudiantes dentro el aula, ya que pueden dar pauta para que el estereotipo donde los hombres se reflejan como mejores en matemáticas que las mujeres, desaparezca y permita mostrar que ambos son buenos dependiendo de las habilidades que desarrollen cada uno.

Es tiempo de inclusión, que posibilite que cada uno pueda ser completamente sí mismo, por lo que la demanda

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