EL VERDADERO ÉXITO, CONSISTE EN VENCER EL TEMOR AL FRACASO

EL TEMOR A DECIDIR

*EL VERDADERO ÉXITO, CONSISTE EN VENCER EL TEMOR AL FRACASO*

ROBERT  LEMBKE

Ocupar una posición directiva en una empresa, ya sea como gerente, supervisor, capataz, o cualquiera otra, implica ineludible  necesidad de tomar decisiones que, muy difícilmente, satisfarán a  todo el mundo; siempre habrá algún descontento y ofendido.  

Un gerente  con largos años de experiencia en el manejo de empleados con más variadas personalidades sostiene que tal situación es inevitable. “Por lo tanto, -afirma- hay que tener el valor de guiarse por el propio criterio que, sea cual fuere lo que se haga, no faltara quien diga estamos equivocados.”

Para probar su punto de vista enumera las siguientes disyuntivas con las que puede verse enfrentado cualquier ejecutivo y los comentarios que sus actos probablemente provoquen.

1° Si estamos de acuerdo con algo,…..  se nos tildare de aduladores.

2° Si disentimos,….     Se nos calificara de obstruccionistas o tercos.

3° Si cambiamos un procedimiento o un método,…    estamos tratando de crearnos un nombre dentro de la empresa.

4° Si No cambiamos un procedimiento o un método,…. Carecemos de iniciativa o de espíritu progresista.

5° Si le damos un trato cordial y amistoso a los empleados,…   estamos haciendo demagogia a costa de la disciplina y el orden, y sentando un mal precedente.

6° Si mantenemos la distancia y adoptamos una actitud rígida,…  somos orgullosos y engreídos.

7° Si no disculpamos,…. Somos déspotas o discriminadores.

8° Si disculpamos, la falta de un empleado,… somos débiles o parciales.

9° Si redactamos un informe sobre progresos realizados en el departamento,… nos guía solo el propósito de ganar prestigio personal.

10° Si no lo hacemos,…   le estamos negando a nuestros empleados la oportunidad de que se les de el crédito que merecen pro su desempeño o ideas.

11° Si alguien nos hace una sugerencia y la aceptamos,… estamos tratando de beneficiarnos con las ideas ajenas.

12°  Si rechazamos la idea que se nos ha sugerido,… estamos desalentando la iniciativa de nuestros empleados.

13° Si nos retiramos del trabajo por sentirnos enfermos,… estamos aprovechándonos de nuestra posición.

14° Si nos quedamos pese a no sentirnos bien,… queremos crearnos la reputación de sacrificarnos por la empresa.

15° Si ofrecernos adiestrar a alguien con el fin de que tenga mayores probabilidades de progresar estamos pretendiendo sentar fama de saberlo todo.

16° Si no lo hacemos,…. Es porque tenemos temor de que esa persona resulte mejor que nosotros y puede desplazarnos en le futuro.

17° Si exigimos un trabajo en equipo,… se nos acusará de mandones.

18° Si no lo exigimos –y logramos-  un trabajo en equipo,… carecemos de energía.

Estas situaciones, cuyo número podrá  ampliarse  prácticamente al infinito, es lo que hace que muchos hombres en posición directiva; Teman asumir la responsabilidad de sus actos.

“ LAS VOLUNTADES DEBILES SE TRADUCEN EN DISCUSIONES…..  

LAS FUERTES EN ACTOS.”

G.LE BON

Pero este temor es lo que nos impide desempeñarnos con eficiencia y constituye el más serio obstáculo para su progreso dentro de la empresa, para la cual trabajan.

Cuando se enfrentan con la necesidad de tomar una decisión, temen hacer lo que corresponda. En consecuencia, se sienten inclinados a seguir la línea de menor resistencia creyendo que en esta forma no ofenderán a nadie.

*A LO UNICO QUE HAY QUE TENERLE MIEDO,

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