Ensayo Sobre La Indiscplina

LA DISCIPLINA EN EL AULA; UN IDEAL CONSTRUIDO ENTRE HOGAR Y ESCUELA.

Una de las mayores dificultades que presenta la educación en casi todas las partes del mundo sin distinción de la escuela pública o privada, son los reiterados trastornos de conducta que observamos dentro y fuera del aula, y a los que comúnmente denominamos como “Indisciplina”, según lo expresado por Nerici (1969), en una de sus grandes obras;

El problema de la disciplina es una preocupación constante de la escuela y del profesor. Hay, sin embargo, profesores que se despreocupan del problema y van “dando sus clases” para las paredes. Otros, por el contrario, toman el problema de la indisciplina tan enserio, que hasta el vuelo de una mosca se percibe en el curso. En los dos extremos expuestos se advierte la falta de disciplina. Pues hay realmente disciplina cuando los estudiantes se sienten satisfechos trabajando, como si el profesor no estuviese en el aula.

Disciplina implica el reconocimiento de la función de cada uno en la consecución de un objetivo. Es la garantía de orden a través de la responsabilidad que pone cada cual en la ejecución de una tarea colectiva. Esto es así porque solamente se puede hablar de disciplina escolar en términos de colectividad: Que unos no perturben el trabajo de los otros. (pág. 478)

En muchas ocasiones, la palabra “disciplina” representa para los profesores un significado inmediatamente relacionado con el silencio, pero disciplina en términos pedagógicos actuales se convierte en un concepto complejo y difícil de definir pues cada docente tiene en mente sus propios conceptos y significados de acuerdo al grupo de estudiantes, la ubicación, métodos, contenidos, entre otros. Ahora bien, al hablar sobre las distintas manifestaciones de indisciplina que se presentan en la escuela, muchos coinciden en señalar las experiencias vividas por los estudiantes en el hogar; como las principales fuentes promovedoras e impulsadoras de las evidentes conductas inadecuadas que muestran los escolares contemporáneos, pero, ¿es en realidad la familia la única “institución” responsable de éstos trastornos?

¿Es la indisciplina una problemática que tiene su raíz justamente en el hogar y en el entorno social del individuo, o la escuela también es responsable en el origen de éstos desordenes del comportamiento?

Desafortunadamente las clases siempre se ven afectadas con problemas de disciplina que deben ser manejados por los profesores porque afectan de manera directa todo el sistema educativo, se dan o presentan dentro del aula pero sus consecuencias se reflejan y afectan el sistema educativo en general; para lograr el manejo y dominio de dichas situaciones, los docentes deben identificar las posibles causas y orígenes de los comportamientos, para así establecer acciones, métodos o estrategias efectivas y apropiadas para cada caso. En el presente escrito, se discutirá acerca de las limitadas y tradicionales conjeturas en cuanto a las raíces y cimientos de la indisciplina escolar, que sin desconocerlo, tienen gran vigencia e influencia, pero que no nos conducen en ocasiones a verdades ni motivos verídicos y razonables que nos sirvan como pauta o guía a la hora de abordar y tratar dichas circunstancias; según lo expresa Edwards (2004):

Existen bastantes situaciones familiares que influyen en el comportamiento de los estudiantes. Si los padres pasan poco tiempo en casa, es posible que los niños busquen experiencias fuera del hogar, y éstas algunas veces tienen consecuencias muy graves. Incluso cuando están en casa, las interacciones padres-hijos pueden estar marcadas por los conflictos. Algunos factores, como el divorcio de los padres y la pobreza, así como los abusos físicos y psicológicos pueden afectar negativamente a la capacidad de los niños de actuar correctamente. En particular, los niños de familias gravemente disfuncionales se enfrentan a grandes problemas de adaptación escolar. (pág. 5)

Como es bien sabido por todos, el contexto familiar del niño y las situaciones que allí se viven, tienen enorme influencia e impacto en el desempeño escolar del mismo, ya que el hogar es la primera y más importante instititución formadora de individuos, la educación del niño y la niña inicia en el hogar y continúa en la escuela; siendo entonces los padres y madres de familia los primeros responsables en la tarea de educar, de ellos depende brindar una estabilidad social y emocional por medio de las buenas relaciones interpersonales y la sana convivencia.

Pero esta función formadora y modeladora de conductas de la familia se pierde cuando en el mismo hogar se presentan situaciones dificiles y conflictivas que alteran la armonía necesaria para el equilibrio emocional de los niños, y para su posterior desarrollo en la escuela, ejemplos claros de esto, son los casos estudiados a lo largo del proceso de seminario de Investigación en el grado Tercero de la ENSVI, tres niños con grandes problemas de comportamiento y con situaciones hogareñas muy similares, lo cual nos lleva pues a reiterar sobre la gran incidencia que tiene el núcleo familiar en el desempeño y situación escolar del niño, en los casos observados se encontró una familia disfuncional (Edier Martinez) y en las otras se evidencia claramente mala proyección de la figura de autoridad, indicios de maltrato de tipo físico verbal y falta de atención, en relación a éste último aspecto Dreikurs, Grunwald, & Bronia (1982) mencionan:

Los niños que no reciben la atención suficiente en su familia suelen compensar esta carencia afectiva buscando la atención de sus profesores. Por desgracia, muchos niños sólo reciben la atención de sus padres cuando se portan mal. Si no molestan a los padres éstos le ignoran. Estas condiciones fomentan las actitudes inaceptables y disuaden el buen comportamiento. Los niños descubren que su mal comportamiento es una manera segura de conseguir la atención que reclaman. Cuando aprenden estos patrones de comportamientos en su entorno familiar, tienden a repetirlos en la escuela. Si los profesores

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