Ensayo sobre el sueño

El sueño es un tema que ha provocado curiosidad y misterio en todos desde siempre. En una noche pacifica el tener un buen sueño te hace sentir de buen humor, con la esperanza de que todo se cumplirá. Por otro lado, una noche inquieta, llena de pesadillas, lo cambia todo... hasta la personalidad.

El organismo humano cuenta con distintos mecanismos para "conservarse", es decir, de asegurar el mantener su salud de la mejor manera posible. Lo hace cuidando todas sus necesidades lo cual incluye el dormir. El sueño es casi tan importante como comer o respirar, por lo cual es considerado una necesidad universal. Se han realizado algunas investigaciones sobre la privación del sueño prolongado en las cuales se observan las consecuencias devastadoras que se producen al no dormir el tiempo adecuado. Todos conocemos sus cualidades restablecedoras físicas y psíquicas. Cuando los sentidos naturales descansan, la mente, nuestro gran archivo, da paso a nuestras inquietudes subconscientes, llamado por otros inconsciente parapsicológico, el cual funciona como un receptor o grabador que recoge datos descargados de nuestros sentidos mientras dormimos.

Según estudios los humanos pasamos una tercera parte de nuestra vida durmiendo, es decir que, si en promedio el ser humano vive 70 años, 23.33 de estos se la pasa dormido. Esto explica por qué existe tanto interés en estudiar sobre este tema. El dormir es algo que de una u otra forma va a llegar ya que, aunque intentemos aplazarlos siempre termina ganando. Pero ¿qué es?, ¿porque necesitamos dormir?, ¿qué procesos suceden en nuestro cerebro mientras dormimos?; en este ensayo abarcaremos todas estas cuestiones.

El sueño es una parte integral de la vida cotidiana, una necesidad biológica que permite restablecer las funciones físicas y psicológicas esenciales para un pleno rendimiento1.

"Perder el sueño, que desteje la intrincada trama del dolor; el sueño, descanso de toda fatiga; el alimento más dulce que se sirve a la mesa de la vida"2. Al dormir el cerebro descansa, autorregula y ordena lo sucedido durante el día. El sueño y la vigilia son lo contrario, cada uno de estos procesos se dividen en fases, pero en el sueño al no estar conscientes no podemos percibirlas. Para poder estudiar las distintas fases del sueño se han utilizado diferentes estudios como el electroencefalograma, el electromiograma, el electrooculograma, etc. Se divide en dos etapas: REM y no REM.

La fase REM (rapid eye movement) o Sueño con movimientos oculares rápidos es el momento más cercano a la vigilia y en el que más se sueña3. Durante esta fase el cuerpo entra en atonía, que se refiere a una perdida casi total del tono del musculo esquelético4. Los músculos respiratorios y los ojos son los únicos que se pueden mover y en ocasiones hacen movimientos rápidos de delante hacia atrás. En esta fase hay actividad onírica (sueños), y aunque es la de menor duración, lo que sucede en ella es lo que más llama la atención. Cuando despertamos y recordamos claramente un sueño lo más probable es que sea porque despertamos durante fase REM. El consumo de oxigeno es mayor durante esta fase que cuando el cerebro está despierto y resolviendo problemas matemáticos. La tension arterial, la frecuencia cardiaca, la respiratoria, la temperatura cerebral y corporal tienen niveles similares a los de estado de vigilia5.

El REM se produce al final de los ciclos de sueño de 90 minutos que caracterizan al sueño humano normal. La cantidad de REM aumenta a medida que la noche avanza y a medida que uno pasa por ciclos repetidos de manera que a pesar de que el REM podría representar sólo 10 minutos del primer ciclo, puede durar hasta 30 minutos durante el último ciclo3.

La fase NO REM es la de relajación y descanso ya que no suele generar sueños muy complejos. El investigador William Dement de la Stanford University, describe el sueño NO REM como un cerebro quieto en un cuerpo móvil6. El sueño paradójico tiene 4 etapas, la primera se produce después de que el individuo se queda dormido y las otras 3 etapas son profundas y livianas y los músculos del cuerpo pueden relajarse o contraerse. En esta fase es cuando generalmente se mueve el cuerpo, las típicas patadas o movimientos bruscos. Durante esta fase disminuye la frecuencia cardiaca, baja la temperatura corporal y se liberan hormonas de crecimiento. Al despertarse durante esta fase las personas no recuerdan lo que soñaron.

Como se mencionó anteriormente el dormir tiene un ciclo y gracias a las investigaciones que se han realizado sabemos que son 2 etapas las cuales se alternan durante el transcurso de la noche. Aproximadamente la etapa REM ocupa el 25% del tiempo del sueño y el otro 75% la fase no REM7. La etapa NO REM está compuesta por 4 estados diferentes que son de relajación y descanso:

 El primer estado se conoce como transicional ya que es la transición de la vigilia al sueño, esta dura pocos minutos y es en la que el individuo puede despertarse más fácilmente porque el sueño es ligero y solo dura de algunos segundos a varios minutos en cada ciclo.

Durante el segundo estadio el sueño es más profundo y se caracteriza por un EEG más lento. También aparecen los complejos K y los husos del sueño. Este estadio es menos superficial que el primero, pero aun así el individuo puede despertar fácilmente.  Los husos del sueño son generados por el marcapaso talámico. Esta etapa dura aproximadamente entre 5 y 15 minutos.

El tercer estadio dura entre 5 a 20 minutos en cada ciclo. En este los movimientos oculares prácticamente desaparecen, se pueden registrar las ondas delta y en comparación con las 2 fases anteriores es más difícil el poder despertar al durmiente.

Por último, el cuarto estadio el cual es donde el cuerpo realmente descansa y el sueño es más profundo, siendo así mayor la dificultad para despertar en este estadio, el cual dura aproximadamente entre 20 y 40 minutos.

Cada 90 minutos las etapas REM y NO REM se alternan. El ciclo de sueño es el conjunto de las 4 fases de la etapa NO REM junto con la fase REM. Un ciclo tiene en total una duración de entre 90 y 120 minutos el cual se repite de cuatro a cinco veces durante el transcurso de la noche. En los primeros ciclos de la noche predominan las fases de sueño profundo, de descanso. En la segunda mitad de la noche predominan las fases 2 y REM. Esto significa que a medida que avanza la noche soñamos más, ya que los sueños se producen principalmente durante la fase REM. Es por eso que en ocasiones podemos recordar varios sueños. Cada fase proporciona una restauración física o mental en nuestro organismo8.

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