Frases Que No Se Deben Decir A Los Hijos

Este comportamiento puede llegar a generar grandes consecuencias en la formación de la personalidad de los menores.

LAS FRASES QUE NUNCA SE DEBEN DECIR A LOS NIÑOS

Por qué sucede

Como gran parte de los problemas intergeneracionales se repiten en distintos casos, conviene las razones que llevan a que un padre –la gran mayoría de las veces, sin intencionalidad- a comunicarse de una forma errada con sus hijos. Estas alteraciones en la comunicación y, por lo tanto, en la relación con los hijos están determinadas por la sobrecarga de trabajo, cansancio o por no conocer los efectos que estas palabras pueden tener en los hijos. Uno de los factores fundamentales tiene que ver con historias personales de la infancia respecto de la familia de origen. Los padres tienden a repetir de modo consciente patrones de relación aprendidos desde sus progenitores. Es importante que puedan revisar sus propias historias, para así poder ponerse en lugar de sus hijos y tomar conciencia de las vivencias personales, para no volver a cometer los mismos errores”.

Ellos deben asumir un sistema democrático protector, es decir, deben educarlos con cariño y respeto y, al mismo tiempo, deben corregirlos con firmeza”.

Ejemplos: “Tonto” “Eres un niño malo”.

Usualmente, lo padres utilizan términos que los niños creen que reflejan lo que realmente piensan de ellos. Esto puede afectar la personalidad, así como otros comportamientos específicos. También originan que se tiendan a la profecía auto-cumplida, ya que, por ejemplo, un niño tildado de “torpe” puede tratar de evitar bailar o practicar deportes, o una niña denominada como llorona puede generar una advocación al contacto con sus pares o adultos.

Consejo: se debe ser directo para llamar la atención a los niños en comportamientos particulares que necesitan cambiar, sin usar términos negativos. “esta pieza debe ser ordenada de inmediato”.

Ejemplos: “ojalá nunca hubiéramos nacido”, “nadie podría amarte”.

El rechazo puede ser interpretado como el deseo de los padres de separarse de los hijos. Para un menor, sentir el desprecio de la persona que lo trajo al mundo hace que piense que sus padres también son despreciables. Los niños deben sentir que son amados en forma incondicional.

Consejo: diariamente debe hacer refuerzos de tipo verbal (frases como te quiero) y físico (abrazos).

Predicciones negativas

Ejemplos “nunca servirás para nada” “algún día terminaras en la cárcel”

Los niños tienden a vivir-para bien o mal-lo que se cree de ellos. Un cura visito una prisión para hablar con los reclusos. Pregunto a cuantos de ellos le dijeron cuando niños que podrían terminar el la cárcel. Casi todos levantaron la mano.

Consejo: los padres necesitan creer en sus niños y predecirles un buen futuro, usando frases como “estas pasando momentos duros ahora, pero quiero que sepas que nunca dejaré de creer en ti”.

Válvula de escape

Ejemplos: “me haces perder la paciencia” “eres mala razón por la que tu madre y yo estamos separados”

Esto ocurre cuando se trata de culpar al niño por las acciones de otros. Los niños son una fácil y conveniente forma de traspasar los problemas de otros miembros de la familia.

Consejo: si los niños aprenden a asumir responsablemente sus acciones, los mayores deben ser un ejemplo y reconocer sus errores. Cuando se pierde la paciencia, tan pronto como vuelve la calma, hay que disculparse.

Perfeccionismo

Ejemplos: ¿solo tienes un 6,5 en el examen? ¿Qué pasó que no fue un 7? Demasiada presión el los hijos, ya sea para que sea el mejor en el equipo de fútbol o en el conseguir las notas más altas en el colegio, sólo deja un mensaje: tu no eres suficiente bueno en lo que haces. Llevar a los niños hacia expectativas poco realistas solo les genera perdidas del autoestima.

Consejo: se debe acentuar lo positivo diciendo cosas como “buen trabajo, esto traerá muchas otras buenas notasen tu libreta”.

Comparaciones

Ejemplos: ¿Por qué no puedes ser como tu hermana?, cuando yo tenía tu edad solía caminar varios kilómetros para ir al colegio, tu eres mejor que tu hermana para el tenis”.

Cuando le dices a tu hijo que no se porta también como su hermana, sé esta creando inmediatamente un resentimiento y una rivalidad entre ellos. Los menores no deben sentirse en competencia con otros miembros de la familia, porque-inevitablemente-se

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